La Fundaci¨®n V¨ªctimas del Terrorismo redacta un dec¨¢logo para atajar el adoctrinamiento de los j¨®venes
La organizaci¨®n pretende concienciar a las familias para que prevengan cualquier comportamiento violento
"Poner el dedo en la llaga". Ese es el objetivo de la Fundaci¨®n V¨ªctimas del Terrorismo, que ha redactado un dec¨¢logo que incluye una serie de cuestiones b¨¢sicas para terminar con el adoctrinamiento terrorista y la fanatizaci¨®n de los ni?os. De este modo, la organizaci¨®n busca concienciar a las familias para que prevengan en casa cualquier tipo de comportamiento violento o af¨ªn al terrorismo por parte de sus hijos. En un art¨ªculo publicado en su ¨²ltimo n¨²mero, la presidenta de la instituci¨®n, Maite Pagazaurtundua, hace hincapie en la necesidad de evitar desde la familia y la escuela que los j¨®venes se vinculen, "moral o personalmente", en el asesinato de personas.
En este sentido, para Pagazaurtundua es esencial "abandonar la pasividad y el miedo en el que anidan los terroristas" y exige a los padres que inicien desde el propio hogar la lucha contra la "fanatizaci¨®n" de sus hijos. Para ella, por tanto, es fundamental que los j¨®venes no alcancen la adolescencia sin haber percibido en su entorno m¨¢s cercano actitudes claras de rechazo a cualquier comportamiento violento. La presidenta de la Fundaci¨®n se apoya en los ¨²ltimos datos del informe del Arateko, que apuntan que un 15% de los ni?os de doce a?os no rechaza la actividad terrorista de ETA o la justifica.
"En una parte significativa de ellos, el apoyo a ETA nace en la propia familia", asegura, a la vez que advierte de que a esa edad los j¨®venes ya han generado en su mente "la c¨¢rcel del odio y menosprecian la identidad humana de las potenciales v¨ªctimas". Pagazaurtundua se?ala adem¨¢s que "la anormalidad ¨¦tica nace en la propia familia, cuando los padres y madres no ofrecen gu¨ªas claras sobre lo que resulta inaceptable desde el punto de vista de la vulneraci¨®n de los derechos humanos".
El miedo conduce a la insensibilidad
Seg¨²n ella, "el factor miedo" es ha causado un gran da?o en el Pa¨ªs Vasco, ya que a lo largo de los ¨²ltimos a?os "ha condicionado el comportamiento de los ciudadanos, ha alterado los valores sociales b¨¢sicos y ha distorsionado la vida p¨²blica". Todo ello ha llevado a que en muchas familias que no apoyan a ETA, los padres no educan sin embargo a sus hijos en los valores ¨¦ticos b¨¢sicos porque el miedo les ha llevado "a la insensibilidad, el silencio y el tab¨²" sobre el asesinato.
Asimismo, la presidenta de la Fundaci¨®n defiende que otro punto sobre el que se debe incidir es la comunidad educativa, que al igual que la familia "debe sacudirse el miedo y las excusas". Pagazaurtundua afirma que "debe dejar el toreo de sal¨®n y encarar el problema real de que algunos ni?os pueden asesinar en pocos a?os y pasar¨¢n muchos a?os en la c¨¢rcel, arruinando su vida y habi¨¦ndose llevado por delante a seres humanos inocentes".
Di¨¢logo permanente
Los primeros puntos del dec¨¢logo recomiendan mantener una actitud de di¨¢logo permanente sobre los problemas y no evitar hablar de terrorismo. "Si antes de los doce a?os los padres expresan que el derecho a la vida es el primer derecho humano universal y que no se debe aceptar el asesinato en ning¨²n caso, es muy posible que sus hijos no se vean envueltos despu¨¦s en entornos radicalizados".
El documento tambi¨¦n propone a los padres facilitar que sus hijos sepan "decir no" a comportamientos no ¨¦ticos y ofrecerles informaci¨®n "fiable y realista sobre los efectos devastadores del terrorismo". Adem¨¢s, en el caso de que los j¨®venes est¨¦n ya inmersos en el proceso de fanatizaci¨®n, aconseja no ocultar el problema y actuar cuanto antes para ayudarles a analizar los motivos por los que asume como tolerable el acoso y asesinato de seres humanos.
Por otra parte, la Fundaci¨®n V¨ªctimas tambi¨¦n propone a los padres facilitar a sus hijos la b¨²squeda de alternativas "a la funci¨®n que est¨¢ cumpliendo en el entorno fan¨¢tico", as¨ª como solicitar ayuda y orientaci¨®n para no sentirse solos y perdidos". No obstante, lamenta que en el Pa¨ªs Vasco no existe un servicio al que acudir para solicitar orientaci¨®n y ayuda cuando se detectan estos estados avanzados de adoctrinamiento.
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