Uriarte pide a los pol¨ªticos modificar la ley del aborto en su homil¨ªa de la Inmaculada
Espera que en la tramitaci¨®n parlamentaria los legisladores introduzcan "mejoras", atendiendo a su "conciencia" por encima de las "consignas de partido"
El obispo de San Sebasti¨¢n, Juan Mar¨ªa Uriarte, ha aprovechado hoy su homil¨ªa de la festividad de la Inmaculada Concepci¨®n para aludir a la tramitaci¨®n de la Ley de interrupci¨®n voluntaria del embarazo, de la que ha dicho que, es "en realidad, una ley reguladora del aborto" y de la que espera una "notable" mejora en el proceso de tramitaci¨®n parlamentaria "Cada uno de los diputados legisladores tiene el derecho y el deber de seguir su propia conciencia por encima de las consignas de partido".
El prelado ha mantenido que "casi todos" entienden que aborto es "un mal que es preciso erradicar o debilitar" y ha destacado que incluso la propia ley en su pre¨¢mbulo reconoce que hay que disminuir esta pr¨¢ctica. Para Uriarte, "es necesario y noble" que la pareja de la mujer embarazada, sus padres y amigos la animen "a respetar esta nueva vida humana en vez de a deshacerse de ella elimin¨¢ndola".
Lo mismo opina de la nueva ley del plazo de catorce semanas que establece la ley en que la mujer "es la ¨²nica que puede decidir sobre si tener a su hijo" o "aceptar que sea destruida la criatura inocente", que, a?adi¨®, "se encuentra a merced de los miedos y angustias de la madre".
"Me pregunto si es esta la manera de respetar y cuidar por parte del estado a un ser humano al que la misma Constituci¨®n reconoce la condici¨®n de un bien jur¨ªdico que es preciso proteger", ha a?adido.
Uriarte ha se?alado adem¨¢s que los que, como ¨¦l, se ponen con firmeza al aborto han de ser "coherentes" con este pensamiento. "Hemos de hacer cuanto est¨¦ en nuestras manos para que millones de ni?os nacidos en el mundo no mueran de hambre, de sed. Ser¨ªa manifiestamente insuficiente y flagrantemente incoherente una lucha contra el aborto que no se preocupara de salvar de la muerte a tantas vidas ya nacidas. Amar la vida humana es amarla desde el principio hasta el final".
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