Camps y Valc¨¢rcel culpan al Gobierno de la guerra del agua

Los presidentes de la Comunidad Valenciana y Murcia, Francisco Camps y Ram¨®n Luis Valc¨¢rcel, respectivamente, han exigido al presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, que resuelva el problema del agua que mantiene bloqueada la tramitaci¨®n del Estatuto de Castilla-La Mancha. "El pacto del agua es una cuesti¨®n de Estado y corresponde al Gobierno de Espa?a liderar esta situaci¨®n y convocar al l¨ªder de la oposici¨®n, Mariano Rajoy, a las comunidades aut¨®nomas y a los regantes y usuarios", seg¨²n Camps, que ha defendido que esa fue tambi¨¦n la base del Plan Hidrol¨®gico Nacional.

Camps y Valc¨¢rcel, acompa?ados de la alcaldesa de Valencia, Rita Barber¨¢, y varios representantes de las comunidades de regantes, han comparecido en Valencia para reiterar su defensa del trasvase Tajo-Segura y responsabilizar al presidente del Gobierno y al PSOE del atasco del Estatuto de Castilla-La Mancha. Valc¨¢rcel ha reconocido que ni ¨¦l ni Camps han llegado a ning¨²n tipo de acuerdo con la secretaria general del PP y presidenta del partido en Castilla-La Mancha, Mar¨ªa Dolores de Cospedal, acerca del trasvase Tajo-Segura. "Que haga algo el que tiene posibilidad de hacer algo. No creo que sea Rajoy el que tenga que resolver este asunto. Que se sepa, Rajoy no preside el Gobierno", ha recalcado el presidente de Murcia.

La tramitaci¨®n en el Congreso del Estatuto de Castilla-La Mancha est¨¢ atascada desde hace m¨¢s de un a?o por las discrepancias en torno a las reservas de agua, que han dividido internamente tanto al PSOE como al PP. Las direcciones regionales de ambos partidos en la Comunidad Valenciana y en Murcia han rechazado de plano la intenci¨®n manchega de incluir en el Estatuto la caducidad del trasvase Tajo-Segura a la costa mediterr¨¢nea. La posibilidad de que se elimine esa referencia, pactada por socialistas y populares en Castilla-La Mancha, y se sustituya por una reserva de 6.000 hect¨®metros c¨²bicos no ha servido para que cambien su postura.

El enfrentamiento ha puesto en una situaci¨®n complicada a la secretaria general del PP, Mar¨ªa Dolores de Cospedal, que como presidenta de los populares de Castilla-La Mancha ha apoyado la reforma estatutaria que pretende poner fin al trasvase Tajo-Segura. El l¨ªder del partido, Mariano Rajoy, ha intentado encontrar un punto de encuentro entre De Cospedal y los presidentes murciano y valenciano. Este lunes, Rajoy volvi¨® a reunirse con Valc¨¢rcel, que presiona para que la direcci¨®n nacional rechace la oferta socialista de fijar la reserva de 6.000 hect¨®metros c¨²bicos. Al encuentro no asisti¨® Francisco Camps.

Por su parte, el presidente castellanomanchego, Jos¨¦ Mar¨ªa Barreda, en respuesta a la reuni¨®n de Camps y Valc¨¢rcel, ha advertido por la tarde de que Castilla-La Mancha no aceptar¨¢ "menos que los dem¨¢s" en la reforma de su Estatuto de Autonom¨ªa. Para Barreda, el PP tiene que hacer en Castilla-La Mancha "exactamente lo mismo que en Arag¨®n, Andaluc¨ªa y Valencia" cuando se debatieron los estatutos de esas comunidades. Al respecto, ha recordado que en el de Arag¨®n se incluy¨® una reserva h¨ªdrica de 6.500 hect¨®metros c¨²bicos, similar a la que reclama el Gobierno de Castilla-La Mancha; en el de Andaluc¨ªa se adjudic¨® a esta regi¨®n la gesti¨®n exclusiva del Guadalquivir en su territorio, y en el valenciano se estableci¨® el derecho a disfrutar de las aguas excedentarias de las cuencas lim¨ªtrofes.

"Deben saber Camps y Valc¨¢rcel que en Castilla-La Mancha no aceptamos menos que los dem¨¢s", ha dicho el dirigente socialista, quien ha asegurado que "de ninguna manera" aceptar¨¢ que quienes se comprometieron con Arag¨®n quieran ahora negar "el pan y la sal" a Castilla-La Mancha.

Barreda ha aprovechado para mencionar a la presidenta del PP de Castilla-La Mancha y secretaria general de este partido, Mar¨ªa Dolores de Cospedal, quien, a su juicio, "tiene un problema, que est¨¢ aqu¨ª y all¨ª y le genera contradicciones". "Yo s¨®lo estoy aqu¨ª en la defensa de los intereses de Castilla-La Mancha", ha recordado Barreda, para quien "es inadmisible" que el PP defienda ahora cosas diferentes que en otros estatutos.