Como en Espa?a no se vive en ning¨²n lado...
... sobre todo siendo acad¨¦mico en Ciencias Humanas y Sociales. Los m¨¦ritos pueden servir de algo, pero si no tienes enchufe, no encontrar¨¢s trabajo en la universidad espa?ola
Tengo 32 a?os y estoy embarazada de cinco meses. Vine a Londres hace seis a?os a hacer un master en antropolog¨ªa del Islam, y todav¨ªa no he tenido la oportunidad de volver. Despu¨¦s hice el doctorado, y ahora estoy haciendo un postdoc en Cambridge. He dado clases en la universidad, presento mi trabajo en conferencias internacionales con asiduidad y he publicado mis investigaciones en journals reconocidos. Desde que me fui, cada a?o, he buscado trabajo en mi sector, en la investigaci¨®n y docencia universitarias en Espa?a pero es imposible. Simplemente, he querido dedicarme a la antropolog¨ªa, y he hecho todo lo posible por poderle dar una continuidad a mi carrera. Ello parece ser incompatible con el hecho de vivir en Espa?a.
Mientras en la mayor¨ªa de universidades europeas las plazas de investigaci¨®n y docencia son abiertas, se publican en las p¨¢ginas webs de las universidades, las ofertas detallan las condiciones laborales, incluyendo condiciones del empleo y salario, y a ellas se puede presentar cualquiera, en Espa?a se mantiene un secretismo que hace muy dif¨ªcil la incorporaci¨®n de nuevos profesionales al mundo acad¨¦mico. Al hablar con j¨®venes acad¨¦micos espa?oles, todo el mundo parece coincidir, los m¨¦ritos pueden servir de algo, pero si no tienes enchufe no encontrar¨¢s trabajo en la universidad espa?ola.
La verdad es que tengo m¨¢s oportunidades de trabajar en cualquier otro pa¨ªs de Europa que en Espa?a. Estoy apuntada a boletines en los que se publican ofertas laborales para investigadores y personal docente en universidades en todo el mundo y en 6 a?os he visto ofertas en pa¨ªses de los 5 continentes, incluyendo India, Israel, M¨¦xico, Rusia, Egipto, Hungr¨ªa, y por supuesto las m¨¢s esperadas, Australia, Nueva Zelanda, Estados Unidos, Canad¨¢ y pa¨ªses de Europa Occidental, pero sin embargo nunca he visto una oferta laboral en Espa?a.
Por lo menos en lo que concierne a las Humanidades y Ciencias Sociales, la crisis en la universidad espa?ola no es reciente. Cuando la gente me pregunta si me gustar¨ªa regresar, no s¨¦ que responder. Me gustar¨ªa vivir de nuevo en Espa?a, pero no quiero volver a ser camarera; ya lo fui durante siete a?os para costearme la carrera y creo que estoy suficientemente preparada como para aspirar a trabajar en algo relacionado con mis estudios. Dado el excepcional caso de que encontrara un trabajo de investigadora o docente, otro de los grandes problemas es la calidad del empleo, la falta de continuidad y los salarios; he conocido a gente dando clases en la universidad y ganando menos de mil euros al mes, con contratos temporales de por vida.
Creo que uno de los problemas es que en Espa?a no se estila el concepto de vocaci¨®n y la idea de ciertas carreras "no sirven para nada" est¨¢ demasiado instalada ; luego vienen los problemas cuando los miles de licenciados en "cosas ¨²tiles" inflan las mismas filas del paro que los historiadores, ge¨®grafos y fil¨®sofos.
La ¨²nica diferencia seria que cuando el acad¨¦mico cualificado en algo que la sociedad espa?ola considera de poca utilidad no encuentra trabajo, se considera que en parte, es culpa suya, por no haber estudiado algo "con m¨¢s salida". La concepci¨®n de que una persona har¨¢ el mejor servicio a la sociedad si disfruta de su trabajo no tiene demasiado eco y mientras eso siga siendo as¨ª el capital humano y la excelencia acad¨¦mica de los j¨®venes espa?oles seguir¨¢n beneficiando los sistemas acad¨¦micos de otros pa¨ªses y no del nuestro. No se trata solo de no volver a Espa?a por una cuesti¨®n de salarios y calidad del empleo, tambi¨¦n se trata de obtener cierto reconocimiento profesional.
Es m¨¢s, ser¨¢ muy dif¨ªcil poder desarrollar un tercer sector econ¨®mico consolidado si no contamos con el apoyo de profesionales en todos los sectores laborales, los think tanks, por poner solo un ejemplo, no se nutren de personal en los sectores de la construcci¨®n y la hosteleria.
Mientras tanto, pasaremos mucho d¨ªas entre el Easyjet y el Ryanair, y oyendo cada vez que vengo de vacaciones, que Inglaterra debe de ser muy deprimente, y que como en Espa?a no se vive en ning¨²n lado.
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