A este mundo se viene llorando... luego te callas y tiras para adelante

Soy un asturiano de 25 a?os, licenciado en Administraci¨®n de Empresas, biling¨¹e, con estudios universitarios en Reino Unido, un m¨¢ster en Gesti¨®n Internacional de la Empresa, experiencia laboral en Dubai y ahora mismo en Espa?a, en una de las principales empresas del sector tur¨ªstico.

Mi contrato finaliza en tan s¨®lo un mes y he decidido no renovar. Actualmente realizo tareas administrativas para las que estoy sobrecualificado. Mi sueldo es m¨¢s que decente, pero no he estudiado para esto; s¨¦ que puedo aspirar a m¨¢s.

Dej¨¦ Asturias a los 20 a?os y he vivido en 5 ciudades en los ¨²ltimos 5 a?os. El a?o que viene me espera Per¨²; siempre he querido colaborar con una ONG y creo que no hay momento mejor para dar el paso.

Mi decisi¨®n no es forzada; podr¨ªa permanecer en mi puesto, frustrado, pero, ?a qui¨¦n le importa? Hay gente que tiene problemas reales, problemas de verdad. Que tu trabajo no te satisfaga, que toda mi generaci¨®n haya ido a la universidad para tener la educaci¨®n que nuestros padres no tuvieron y ahora nos encontremos con que no hay "trabajo digno" para todos, no es un problema vital. Nuestros padres tuvieron que trabajar de cualquier cosa, todav¨ªa hoy son administrativos, dependientas, camareros... y la crisis tambi¨¦n les afecta.

Es cierto que no fueron a la universidad, qu¨¦ l¨¢stima, tuvieron que comenzar a tragar mierda tres, cinco, siete a?os antes... no disfrutaron de una beca Erasmus como yo, ni han viajado por medio mundo a base de becas pagadas por el contribuyente.

No escucho m¨¢s que lamentos, no veo m¨¢s que brazos ca¨ªdos... La crisis no es solamente un problema actual, un t¨²nel con entrada y salida; tiene repercusiones a largo plazo. Y la magnitud de estas repercusiones depende de nosotros...

El desempleo juvenil alcanz¨® el 41,6%; s¨ª, dos d¨¦cimas m¨¢s que en el mes anterior, duplica la tasa de la eurozona... los j¨®venes que s¨ª tienen empleo disfrutan en su mayor¨ªa de contratos temporales y mal remunerados... y la tan criticada reforma laboral no parece precisamente un plan de rescate para la juventud espa?ola...

Con respecto a la contrataci¨®n temporal, y para desincentivar este tipo de contratos, aumentar¨¢n las indemnizaciones por despido en estas contrataciones, actualmente en ocho d¨ªas por a?o trabajado, hasta los doce, pero a partir de 2015... y yo me pregunto: ?d¨®nde estaremos en 2015?

Las restricciones de liquidez y la incertidumbre desincentivan la firma de contratos indefinidos, y la aprobaci¨®n de estas medidas potenciar¨¢ m¨¢s si cabe la negativa de las empresas a transformar empleos temporales en indefinidos. En consecuencia, los empleados temporales reciben menos formaci¨®n, ya que los empresarios no ven ning¨²n futuro en su relaci¨®n contractual, y por consiguiente, no ven un retorno en la inversi¨®n destinada a su formaci¨®n.

Y de este modo, muchos j¨®venes se ver¨¢n obligados a vagar de una empresa a otra, de beca en beca, de pr¨¢ctica en pr¨¢ctica -a veces sin cotizar a la Seguridad Social y sin derecho a paro-, m¨¢s titulados que formados.

El nivel del desempleo de los j¨®venes en Espa?a es tan llamativo que hasta el New York Times ha publicado un largo art¨ªculo sobre este tema.

Desempleo juvenil y formaci¨®n

Hay cosas que no cambian... lo demuestra este art¨ªculo, publicado en El Pa¨ªs el 7 de marzo de 2010, pero que bien podr¨ªa haber sido escrito hoy:

"El problema m¨¢s importante no es el nivel de desempleo juvenil sino sus repercusiones futuras. Los j¨®venes que acceden al mundo laboral en un momento de recesi¨®n econ¨®mica tienen, a lo largo de su carrera laboral, menores salarios, m¨¢s periodos de desempleo y mayor sobrecualificaci¨®n que los que acceden en un momento de expansi¨®n.

La oferta de trabajadores cualificados no crea necesariamente su demanda. Todo depende de la calidad de la formaci¨®n, de su correspondencia con las necesidades del mercado laboral y de la actitud de los formados. Los datos disponibles indican que la calidad de la formaci¨®n en Espa?a es cuestionable.

En segundo lugar, la formaci¨®n ser¨¢ un ant¨ªdoto para el desempleo en la medida en que est¨¦ orientada, en habilidades y conocimientos, a las necesidades del mercado laboral. Tampoco se puede decir que la formaci¨®n en Espa?a cumple en la actualidad este segundo requisito. Los datos de la OCDE muestran que Espa?a es, con diferencia, el pa¨ªs con mayor nivel de sobrecualificaci¨®n en su poblaci¨®n laboral (m¨¢s del 25%). Entre los j¨®venes, la sobrecualificaci¨®n se acerca al 40%.

Adem¨¢s, en las recesiones se observa que el grado de sobrecualificaci¨®n aumenta. El motivo es doble: por una parte los trabajadores, ante las dificultades de encontrar un trabajo adecuado a su cualificaci¨®n, aceptan empleos claramente por debajo de su nivel. Por otra parte, las empresas, que en una situaci¨®n normal tendr¨ªan algunas reticencias a contratar un trabajador excesivamente cualificado para el puesto por la posibilidad de perderlo en poco tiempo, no tienen tantas reticencias cuando el desempleo es muy elevado.

Finalmente, hay un tercer factor que es la actitud de los formados, condicionada por el contexto social y la impronta de un sistema educativo anquilosado. Los datos del Observatorio de la Inserci¨®n Laboral de los J¨®venes espa?oles muestran que incluso los trabajadores j¨®venes tienen una enorme aversi¨®n a la movilidad geogr¨¢fica, una gran preferencia por el trabajo de funcionario y rechazan mayoritariamente el autoempleo y la creaci¨®n de empresas. La resistencia a la movilidad dificulta la disminuci¨®n del desempleo y multiplica la sobrecualificaci¨®n al impedir el ajuste entre la oferta y demanda de trabajadores con alto nivel de cualificaci¨®n".

Resumiendo...

Ni las reformas del Gobierno, ni un cambio de Gobierno, ni la productividad -y por consiguiente, la salud econ¨®mica y financiera de las empresas-, ni la calidad de la ense?anza, ni la actitud de una generaci¨®n de j¨®venes m¨¢s titulados que preparados, auguran una pronta y feliz recuperaci¨®n.

El n¨²mero de parados registrado en los Servicios P¨²blicos de Empleo supera de nuevo los cuatro millones al sumar 48.102 parados en septiembre.

Finalizado el verano, que es "pan para hoy y hambre para ma?ana", 48.102 personas se unir¨¢n en las colas del INEM a las 61.083 que perdieron su empleo en el mes de agosto, terminando con la racha positiva registrada en los cuatro meses anteriores.

Conocemos la situaci¨®n... as¨ª que acept¨¦mosla cuanto antes y de una puta vez, y que cada uno decida lo que m¨¢s le conviene. Pero dejemos de culpar al Gobierno, de culparnos los unos a los otros, dejemos de lamentarnos por lo que nos prometieron y no cumplieron, por todo lo que nos cre¨ªmos -lo guapos, lo listos que somos, y lo mucho que nos merecemos- y lo enga?ados y est¨²pidos que ahora nos sentimos. Aceptemos nuestra parte de culpa y hagamos algo por nosotros mismos. Lo que aqu¨ª tenemos y lo que nos espera ya lo conocemos... S¨®lo nos queda conformarnos o cambiar el rumbo. No es mucho, pero es lo que hay. ?frica, Asia, Sudam¨¦rica, Centroam¨¦rica... no nos importa, est¨¢n mucho peor, pero s¨®lo nos preocupamos por nosotros mismos. A este mundo se viene llorando... luego te callas y tiras para adelante con lo que tienes.