Seis meses de c¨¢rcel por matar a un perro de forma cruel

Un hombre de 66 a?os y vecino de Alcoletge (Lleida) ha aceptado una pena de seis meses de prisi¨®n por matar a su perro de forma extremadamente cruel, at¨¢ndolo al parachoques trasero de su coche y arrastr¨¢ndolo 700 metros. Cuando el animal ya estaba moribundo, lo abandon¨® junto a un puente de la autov¨ªa. El acusado no ingresar¨¢ en la c¨¢rcel si paga una multa de 2.160 euros al no contar con antecedentes penales. No obstante, el juez le advirti¨® que si deja de pagar una sola mensualidad ingresar¨¢ autom¨¢ticamente en prisi¨®n. Esta es una de las primeras condenas dictadas en Lleida por maltrato animal tras la reforma del C¨®digo Penal en 2004, que castiga este tipo de conductas con penas que van de tres meses a un a?o de prisi¨®n.

Los hechos se produjeron el 4 de diciembre de 2008, cuando el condenado, "con ¨¢nimo de acabar con la vida de un perro de su propiedad", lo at¨® a su veh¨ªculo, un R-12 tipo ranchera, y lo arrastr¨® a toda velocidad por el asfalto de un camino vecinal. Despu¨¦s arroj¨® al animal junto a un puente, donde muri¨® y fue encontrado dos d¨ªas m¨¢s tarde por agentes de los Mossos d'Esquadra.

El juicio dur¨® menos que la agon¨ªa del animal porque el acusado reconoci¨® los hechos y se conform¨® con la pena solicitada por la fiscal, que la rebaj¨® de diez a seis meses. El juez le comunic¨® la sentencia de viva voz y le reproch¨® que hubiera causado un sufrimiento innecesario a su perro. La pena conlleva tambi¨¦n una inhabilitaci¨®n especial de un a?o para el desempe?o de cualquier actividad relacionada con animales.

Lydia Argil¨¦s, responsable de una protectora de animales de Lleida que lleva su nombre, critic¨® ayer que las penas previstas por el delito de maltrato a los animales no conlleven el ingreso en prisi¨®n de sus autores. Argil¨¦s considera que el C¨®digo Penal ya est¨¢ desfasado y que deber¨ªan endurecerse las penas para que los maltratadores de animales vayan directamente a la c¨¢rcel y no tengan la opci¨®n de eludirla mediante el pago de una multa rid¨ªcula. "Lo que hizo es de una crueldad extrema y no comprendo c¨®mo pudo aguantar los gritos de dolor del perro", apostill¨®.