Los acampados de Barcelona deciden quedarse como m¨ªnimo hasta el domingo
El consejero de Interior de la Generalitat reitera que no tiene intenci¨®n de dimitir
Los centenares de indignados acampados en la plaza de Catalunya de Barcelona decidieron ayer mi¨¦rcoles a las 23.30, tras m¨¢s de dos horas de debate, quedarse en la plaza de Catalunya. Los indignados aprobaron permanecer al menos hasta el domingo. La asamblea decidi¨® que cada domingo se votar¨¢ de nuevo la continuidad de la acampada. Todo apunta a que los indignados no tienen previsto irse en breve de la plaza de Catalunya. A las 21.30, centenares de acampados se reunieron en el centro de la plaza para decidir el futuro del movimiento. El objetivo era decidir si los indignados abandonaban el c¨¦ntrico enclave y le daban continuidad al movimiento en otros ¨¢mbitos, o si bien permanec¨ªan el mismo lugar.
Pero m¨¢s all¨¢ de la continuidad del movimiento 15-M y del resultado del informe interno de la dur¨ªsima operaci¨®n policial del pasado viernes para, oficialmente, limpiar el espacio de la concentraci¨®n, Felip Puig, consejero de Interior, reiter¨® ayer que no tiene previsto dejar su puesto en el Gobierno. "El presidente [Artur Mas] tiene mi cargo a su disposici¨®n desde mi nombramiento", dijo, pero a?adi¨® acto seguido que no est¨¢ dentro de sus "c¨¢lculos" dimitir.
El portavoz de ICV-EUiA en la comisi¨®n de Interior del Parlamento catal¨¢n, Jaume Bosch, le reproch¨® ayer que la actuaci¨®n policial del viernes est¨¦ siendo investigada por el S¨ªndic de Greuges (Defensor del Pueblo) y por el Comit¨¦ Europeo para la prevenci¨®n de la Tortura, y que se llev¨® a cabo a pesar de las advertencias de la divisi¨®n de Informaci¨®n y de la Guardia Urbana.
"Pida disculpas a los heridos", le requiri¨® el diputado de ERC Oriol Amor¨®s. Y sac¨® a relucir una frase que el propio Puig dijo en contra de Joan Saura, cuando este era consejero de Interior del tripartito, tras una carga policial: "El consejero de Interior busca culpables en los medios de comunicaci¨®n para negar su propia incompetencia", paralelismo que tambi¨¦n utiliz¨® el socialista Llena.
Fue entonces cuando el consejero catal¨¢n acus¨® a los acampados de haber empezado la violencia. Y asegur¨® que antes de llegar a las porras, los Mossos trataron durante tres horas de establecer "di¨¢logo" con ellos. Como no lo consiguieron, utilizaron "m¨¦todos previos" al uso de la fuerza para persuadir a los resistentes, tambi¨¦n sin ¨¦xito. Ante las "acciones violentas que se estaban produciendo", indic¨®, cargaron.
Una carga "sin preaviso con personas sentadas en el suelo", y que, en definitiva, consigui¨® el "resultado contrario al que se buscaba", le espet¨® Bosch. "Ten¨ªamos claro que la gente volver¨ªa", se defendi¨® Puig. "No era previsible que los acampados se comportasen como lo hicieron", a?adi¨®, esgrimiendo que "desestimaron mediadores".
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