Cacerolada contra Gallard¨®n por prohibir los conciertos en Chueca en el Orgullo

Centenares de personas secundaron anoche una ruidosa y reivindicativa cacerolada en la plaza de Chueca de Madrid para protestar por la decisi¨®n municipal de no autorizar actuaciones musicales en esta plaza durante el pr¨®ximo Orgullo Gay, una prohibici¨®n que amenaza con tirar por tierra las fiestas. Una vez concluida la protesta, unas decenas de personas se dirigieron a la casa del alcalde, Alberto Ruiz Gallard¨®n, al que abuchearon e increparon cuando sacaba al perro. Los organizadores de las fiestas se han apresurado en desvincularse de este acto, que condenan "rotundamente", al tiempo que esperan que no enturbie el di¨¢logo con el Ayuntamiento para buscar una salida al problema. Delegaci¨®n de Gobierno ha abierto una investigaci¨®n sobre estos hechos.

La protesta, convocada a trav¨¦s de Facebook a las nueve de la noche en esta plaza, fue respaldada por centenares de personas que pidieron al Consistorio que recapacite y permita actuaciones musicales en la emblem¨¢tica plaza del movimiento gay durante la celebraci¨®n de sus fiestas. En un pulso con el consistorio, los convocantes amenazan con no celebrar el Orgullo porque, para ellos, "Chueca es irrenunciable". A 15 d¨ªas de su comienzo, las fiestas est¨¢n en al aire. Los asistentes portaban pancartas contra la asociaci¨®n de vecinos que pidi¨® a trav¨¦s de los tribunales una "reorganizaci¨®n urgente" del Orgullo Gay para evitar impacto ambiental y problemas de seguridad.

"Dejadle hablar, aunque mienta"

Con lemas como "no nos representan" y "sois Chueca", los manifestantes han escenificado su rechazo a la prohibici¨®n municipal, alegando que "cualquier fiesta popular espa?ola -las Fallas, los San Fermines, San Juan, los Carnavales o La Tomatina por citar algunos ejemplos- implica inconvenientes como el ruido y la suciedad y, sin embargo, est¨¢n promovidos por los ayuntamientos de sus ciudades e incluso tienen el car¨¢cter de Fiesta de Inter¨¦s Tur¨ªstico Internacional", seg¨²n reza la convocatoria.

Finalizada la cacerolada, decenas de personas marcharon hasta el domicilio del alcalde, que se vio sorprendido por la protesta cuando sal¨ªa a pasear a su perro con su mujer, Mar Utrera. Al grito de "?fuera! ?fuera!", los congregados hac¨ªan sonar con estruendo cacerolas y silbatos al ver aparecer a Gallard¨®n. El alcalde trat¨® de apaciguar a los congregados dirigi¨¦ndose a ellos. "Dejadle hablar, aunque mienta", se escucha en una de las grabaciones que recogen este momento de tensi¨®n subidas a Yuotube. "Aqu¨ª viven mi mujer y mis hijos. Hacerle esto a mi mujer y a mis hijos no es de justicia", comenz¨® a decir Gallard¨®n, que quiso a?adir un "ma?ana" pero no logr¨® seguir hablando porque los silbidos y gritos van en aumento. El alcalde, Gallard¨®n, escoltado por la Polic¨ªa, dio media vuelta con su perro y se dirigi¨® hacia su casa perseguido por los manifestantes entre el ruido de los silbatos, las cacerolas y los gritos de "fuera, fuera" y "no nos representas".

Fuentes de la organizaci¨®n explican que ninguna de las tres asociaciones implicadas en las fiestas - la Federaci¨®n de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (FELGTB), Colectivo de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales de Madrid (COGAM) y la Asociaci¨®n de Empresas y Profesionales para Gays y Lesbianas de Madrid (AEGAL)- est¨¢ relacionada en esta convocatoria y a?aden a¨²n est¨¢n intentando negociar con el Consistorio una soluci¨®n m¨¢s satisfactoria para todas las partes. Juan Carlos Alonso, portavoz de la organizaci¨®n, ha declarado a este peri¨®dico que entiende las caceroladas, con cuya organizaci¨®n no tienen nada que ver, como "una iniciativa popular fruto de la indignaci¨®n de los vecinos, que ven c¨®mo la celebraci¨®n de sus fiestas pende de un hilo". A rengl¨®n seguido, ha rechazado en lo que deriv¨® la protesta: "Condenamos rotundamente la degeneraci¨®n de la protesta en un acoso al alcalde en su domicilio". El portavoz ha confesado que actos como el de anoche "complican el proceso de negociaci¨®n" con el consistorio y no benefician a nadie.

Pendientes de sentarse

Los organizadores han solicitado una reuni¨®n con Gallard¨®n que est¨¢ pendiente de fijarse para hoy martes o el mi¨¦rcoles con el objetivo de intentar modificar la autorizaci¨®n que les concedi¨® la semana pasada el Ayuntamiento, que limita las fiestas. Alonso ha precisado que a mediod¨ªa de hoy a¨²n no han recibido respuesta por parte del Consistorio para sentarse a hablar. La concejal de Medio Ambiente, Ana Botella, les da permiso para alcanzar excepcionalmente los 90 decibelios -el doble de lo permitido en la normativa-, entre las once y las 2.30 de la noche del jueves, viernes y s¨¢bado. Pero deja fuera el mi¨¦rcoles, d¨ªa del preg¨®n, y excluye Chueca porque la normativa sobre el ruido, aprobada este a?o, impide modificar los l¨ªmites sonoros en un radio de 150 metros alrededor de una residencia de mayores -hay una en Chueca-.

La organizaci¨®n cree que detr¨¢s del veto de instalar un escenario en la plaza coraz¨®n del festival est¨¢ la intenci¨®n de "sacar las fiestas del barrio". Alonso cree que la medida puede ser contraproducente. Teme que si no se permite programar actividades para la cantidad de gente que se concentra esos d¨ªas (el a?o pasado se super¨® el mill¨®n de personas), la fiesta puede acabar convertida en un botell¨®n y en un "espect¨¢culo lamentable para la imagen de Madrid". Alonso considera que la fiesta tendr¨ªa que tener el mismo car¨¢cter de excepcionalidad que se aplica a otras celebraciones como las de La Paloma, San Isidro o la Noche en Blanco. "No podemos permitir que la normativa se aplique solo a las fiestas del Orgullo", dice. El portavoz de la organizaci¨®n critica que el Ayuntamiento no tenga en cuenta el "esfuerzo" que han hecho para "minimizar en un 70% el impacto medioambiental en el barrio en los ¨²ltimos dos a?os".

Mientras contin¨²a el pulso con el Ayuntamiento y a la espera de la reuni¨®n, ya se ha convocado a trav¨¦s de Twitter una nueva cacerolada para hoy en el mismo lugar y a la misma hora: las nueve de la noche en Chueca. Al respecto, Alonso no ha querido enviar ning¨²n mensaje a los que est¨¢n detr¨¢s de la protesta m¨¢s all¨¢ de condenar el "acoso al alcalde" porque podr¨ªa parecer que los dirigen o "tener un efecto contrario y contraproducente".

Gallard¨®n, abucheado en su casa por vetar la m¨²sica en Chueca