S¨ª, hay problemas m¨¢s importantes para tratar en el Congreso. El que se ha colado esta ma?ana es irrelevante si se tiene en cuenta la tormenta de crisisque se abate sobre la sociedad espa?ola: una cuesti¨®n de corbatas. Puede ser una an¨¦cdota, pero tiene unvalor:ilustra la desigualdad que padecen los hombres frente a las mujeres en cuestiones del vestir. Ellas han logrado, salvo excepciones que aparecen en los peri¨®dicos,poder elegir entre falda o pantal¨®n, por ejemplo, y nadie les suele afear un escote. En cambio, ellos no logran desprenderse del ornamento que inventaron los croatasni en pleno verano, caiga la calorina que caiga. Por lo menos, en la C¨¢marabaja, cuyo presidente, Jos¨¦ Bono,defiende a capa y espada"la disciplina del vestido" que parece aplicarse soloa los varones.Y lo hace con una explicaci¨®n algo se?orita: "Tenemos que dar ejemplo a los que tenemos que mandar", argumenta. O sea, a los ujieresde la c¨¢mara, embutidos con chaqueta y corbata. ?No puede cambiarsela disciplina? ?para mandar hay que llevar corbata (lo que dejar¨ªa fuera a las mujeres)?
Bono le ha afeado al ministro de Industria, Miguel Sebasti¨¢n, que acudiera sin esa prenda al palacio de la Carrera de San Jer¨®nimo donde, precisamente, deb¨ªa responder a una pregunta sobre la relaci¨®n entre el sincorbatismoy el ahorro energ¨¦tico, que abandera este responsable. O sea, veranos sin corbata para ahorrar en aire acondicionado. (Lo de las bufandas en invierno para ahorrar calefacci¨®n no tiene defensores). En un gesto inusual (el presidente preside, pero no interviene), Bono agradeci¨® el gesto a quienes siguen llevando corbata, porque ayudan a mantener "la disciplina del vestido". "Es probable que el primer ministro japon¨¦s vaya sin corbata al Parlmento, no s¨¦ si ante el emperador", a?adi¨® aludiendo el ejemplo nip¨®n que hab¨ªa citado Sebasti¨¢n. Pero el ministro, que acogi¨® mal el reproche, no era el ¨²nico desafecto. Al menos otros tres diputadoshab¨ªan prescindido de ella, seg¨²n Efe.
Comentarios
Todo este asunto me parece absurdo y fuera de lugar. Es una l¨¢stima que Bono no tenga mejores cosas que hacer que preocuparse de la vestimenta de los que visitan o trabajan en el Congreso.
Charo, remiti¨¦ndose a Jos¨¦ Bono, escribe: "Tenemos que dar ejemplo a los que tenemos que mandar", argumenta. O sea, a los ujieres de la c¨¢mara, embutidos con chaqueta y corbata. ?No puede cambiarse la disciplina? ?para mandar hay que llevar corbata (lo que dejar¨ªa fuera a las mujeres)?"Hay que ser retorcida para lanzar la indirecta que Charo nos quiere colar. Porque nuestra articulista parece estar queriendo decir que el uso de las corbatas en los hombres tiene connotaciones similares a la de la coloraci¨®n de las nalgas en los babuinos y otros primates. As¨ª, en la cosmovisi¨®n charista, las corbatas vendr¨ªan a ser algo af¨ªn a los galones del general, un c¨®digo disuasor dirigido a sus subordinados y a las hembras, y al que las mujeres, ?c¨®mo no! les ha sido vetado su uso. La realidad es otra, porque las mujeres gozan de total libertad en esta sociedad a la hora de vestir, mientras que para los hombres tal posibilidad est¨¢ totalmente vetada. Sin embargo, lo que es una evidente discriminaci¨®n hacia los hombres choca con el dogma feminista, seg¨²n el cual y por definici¨®n, aqu¨ª las ¨²nicas discriminadas y v¨ªctimas de todo s¨®lo pueden ser las mujeres. Es de esa manera que, fiel a la tradici¨®n feminista de buscar y rebuscar por todos los lados alg¨²n indicio de "machismo", y guiada por la infalibilidad que proporciona la luz de la "perspectiva de g¨¦nero", Charo descubre la aut¨¦ntica verdad, que por lo visto no es que a ellos no los dejen vestirse a su gusto, sino que son ellos los que parecen estar deseando ponerse esas se?ales inequ¨ªvocas de su virilidad y dominio (las corbatas) en tanto que, recurriendo a perversas estrategias, impedir¨¢n que las mujeres puedan hacer lo mismo.?Sabe alguna feminista lo que es ser femin¨®filo? Si nunca han o¨ªdo tal palabra es porque la invisibilidad de la que tanto gusta hablar a nuestras feministas s¨®lo se entiende para cuanto a ellas afecta...
Tal como est¨¢ el pa¨ªs (y europa entera) deber¨ªan acudir tod@s arremangad@s y en mono de faena, aunque llevar un "lazo en el cuello" pueda -tambi¨¦n- parecer un s¨ªmbolo de ahogos. A este pronto por "dar ejemplo" en el Parlamento subyace -es lo que yo he pensado- el poco ejemplo que dio el senador canario del mismo grupo hace 4 d¨ªas. Tampoco le dar¨ªa mucha importancia a este aire de "colegio" con su director.
Mar¨ªa Jos¨¦, El Pa¨ªs, hoy, Sus problemas se remontan a hace 18 a?os, cuando hipotec¨® su piso para ayudar a su expareja a saldar una serie de deudas. En 2002, terminada esa relaci¨®n e incapaz de asumir sola las cuotas, acudi¨® a una reunificadora de deudas que le tramit¨® un nuevo pr¨¦stamo con la CAM, que le concedi¨® 157.000 euros. Hoy, la entidad le reclama 200.000 euros, una cifra lejos de las posibilidades de esta mujer, que ingresa 520 euros por tener un hijo discapacitado a su cargo y 168 euros por la Ley de Dependencia. Tambi¨¦n vive con ella una hija de 24 a?os licenciada y en paro. La familia ha solicitado una alternativa al Instituto de la Vivienda de Madrid (Ivima), que les ha informado de que tardar¨¢n tres a?os en asistirles ...
Y a todo esto ?la flamante secretaria de Estado para la Igualdad, Bibiana Aido, qu¨¦ medidas va a tomar para acabar con esta discriminaci¨®n que padecemos los hombres?
Hace 15 a?os cuando llegu¨¦ a Dinamarca y me encontr¨¦ a un cajero en un banco con pendiente y pelo largo me d¨ª cuenta de que no solo hab¨ªa cogido un avi¨®n y hab¨ªa cambiado de pa¨ªs, sino que hab¨ªa cambiado de vida. Y a mejor. Cuando me enter¨¦ de que un profesor de universidad al que le gustaba mucho la m¨²sica cl¨¢sica era maltratador me di cuenta de que no existen los lotes: que a uno le guste la m¨²sica cl¨¢sica no significa que sea buena persona. Pues lo mismo, la corbata no hace a un hombre respetable. Su discurso tampoco. Los hechos, esos ya son otra cosa. Que la apariencias no significa casi nada
La corbata y el se?or Bono comparten la caracter¨ªstica de ser imposiciones del a?o de la picor a hombres sensibles y en sus cabales como el Dr Sebasti¨¢n.
Hace 50 a?os era obligatorio llevar corbata a los ex¨¢menes, hoy con una camisa es suficiente. Me parece que el Sr Bono vive anclado en el pasado.
Por motivos de trabajo tengo que llevar traje, pero me apunto al 'sincorbatismo' (hubiera preferido llamarlo 'hombres libres') y no llevo nunca ese estorbo carpetovet¨®nico en el cuello que impide la respiraci¨®n y la elocuci¨®n.
Por lo normal son mujeres de larga melena las que me van diciendo que yo tengo que cortarme el pelo.
pues m¨¦tete a soldado ... y te lo cortan gratis, y sin peluqueras.
La pr¨®xima vez que use Wikipedia para "profundizar" en un art¨ªculo, por favor, l¨¦ala con calma: la corbata no la inventaron los croatas, sino que su nombre deriva de la palabra que los italianos utilizaban para denominar a ¨¦stos. Son dos cosas muy diferentes...
Como hace unos d¨ªas que no pongo enlaces, aqu¨ª va uno que tiene que ver con el tema:http://www.elmundotoday.com/2011/07/jose-bono-publica-los-dibujos-que-ha-hecho-durante-las-sesiones-del-congreso/En cuanto a lo del Ej¨¦rcito... pues me llega un poco tarde. Estuve cuando era derecho y deber ciudadano el de estar preparado para defender la patria (sea lo que sea lo que uno entienda por patria) y en los cuarteles se juntaba desde estudiantes que no hab¨ªan querido o podido ir a las Milicias Universitarias hasta delincuentes m¨¢s o menos consumados. Con el tiempo me doy cuenta de que la igualdad era como la que hay hoy en d¨ªa en la educaci¨®n: todos vestidos igual y ya est¨¢. O como la que hay en otros ¨¢mbitos de la sociedad que no nombrar¨¦, en donde las artes que permiten medrar son las ciencias de la picaresca: disimulo, enga?o, mentira...
La corbata es una prenda que en ocidente (y no solamente), tiene el simbolo de respeto por los presentes. No es vanidad ni coqueteria, aunque la coqueteria es una muestra tambi¨¦n un "¨¦gard" por los dem¨¢s y sobretodo por los que trabajan con nosotros. Si todo da igual, pues es que nadie tiene valor. Si no hay s¨ªmbolos ni elegancia ni una cierta solemnidad... es que la sociedad est¨¢ en profundo declinio. Espa?a es lieder en el declinio de la sociedad ocidental y europea.
a KS, contestando a Keyser S?ze, escribe: "pues m¨¦tete a soldado ... y te lo cortan gratis, y sin peluqueras."
Efectivamente, es sabido que los hombres que entran en el cuartel, tanto voluntariamente como a la fuerza, son sometidos al rapado de su cabeza. Sin embargo, las mujeres que se meten en la instituci¨®n militar pueden conservar intactas sus cabelleras, aunque, eso s¨ª, la han de llevar recogida (por aquello de no desplegar el potencial er¨®tico de sus melenas). ?Por qu¨¦ ese trato discriminatorio? ?Por qu¨¦ a un soldado se le obliga a pelarse, mientras que a una "soldada" no? ?Por qu¨¦ la ministra Chac¨®n no toma medidas contra tal trato desigual? El argumento cl¨¢sico de los amigos de lo militar ha sido decir que el rapado cuartelero obedece a motivos higi¨¦nicos. Pero ahora que hay mujeres en los cuarteles, ?qu¨¦ dicen al respecto? La realidad es que a los soldados los militares les han cortado el pelo por la misma raz¨®n que se lo cortaron a Sans¨®n en el mito b¨ªblico, para que aquellos pierdan su fuerza, no la f¨ªsica, sino la moral. Porque rapar a alguien es como desnudarlo. Una humillaci¨®n p¨²blica destinada a despersonalizar a lo que antes era un ser humano, y ahora es un soldado. En el caso de las mujeres, su presencia en los ej¨¦rcitos, claramente minoritaria, cumple otras funciones, como servir de "gancho" en la recluta de varones (que pensar¨¢n que van a ligar con ellas si entran en el ej¨¦rcito), as¨ª como la de prestar su imagen en una campa?a publicitaria sin precedentes que pretende hacernos creer que el ej¨¦rcito es una especie de ONG cuya funci¨®n es realizar "labores humanitarias". Es esa "misi¨®n" relacionada con la imagen la que conlleva que en el caso de las militares sea conveniente el que ¨¦stas no aparezcan a la luz p¨²blica totalmente desfeminizadas, porque la foto de la ternura desplegada por una sargento con el negrito entre los brazos queda lo m¨¢s progre, moderno y sentimentaloide que pudiese imaginarse. Naturalmente nuestras feministas se jactar¨¢n de ello, y nos lo presentar¨¢n como una "conquista", un "avance", una incorporaci¨®n de la mujer a una profesi¨®n (bueno, los sicarios tambi¨¦n son profesionales) en la que antes se ten¨ªa "vetada" su presencia. Sorprende ello, porque siempre hab¨ªa pensado que lo militar era la encarnaci¨®n m¨¢s viva de los (dis)valores masculinos; de la exaltaci¨®n del machismo; del culto a la violencia; todo lo contrario a lo que los cuentos de hadas feministas nos prometen para el d¨ªa en que el patriarcado sea finalmente derrotado. Sin embargo, los tiros (y nunca mejor dicho) no parecen ir por ah¨ª. Carmen Chac¨®n, Trinidad Jim¨¦nez e Hillary Clinton (que por cierto no renuncia a su apellido de casada) son otras tantas feministas convencidas que est¨¢n demostrando en Libia y Afganist¨¢n que para gestionar la violencia del Estado no hace falta desprenderse de la gracia y elegancia femenina.
Joder con el Bono, a m¨ª, con tan sesudo e importante problema planteado se me han puesto de "corbata". Y no por culpa m¨ªa
hoy es d¨ªa de trajes
Tambi¨¦n estoy de acuerdo con M Dutronc. Adem¨¢s es c¨®modo, como un uniforme para trabajar y con hombreras ... siempre quedas bien. Pero se puede ir contraje y sin corbata.
Est¨¢ claro que el problema del Semicirco de San Jer¨®nimo se puede resolver manu militari: uniformando a todos los Diputados. Y cuando digo todos quiero decir lo que siempre ha querido significar "todos": hombres, mujeres y ni?os. En estos tiempos de la igualdad, estas soluciones igualitarias son tildadas de totalitarias: all¨¢ pel¨ªculas.
EL FORMALISMO FRENTE AL CONTENIDO LOS CIUDADANOS VOTAMOS NO EN FUNCION DE UNA CORBATA ,SINO EN FUNCION EL PENSAMIENTO O IDEOLOGIA. AL IGUAL QUE A LA MUJER NO SE LE PUEDE OBLIGAR A LLEVAR MINI TAMPOCO AL SE?OR MINISTRO SE LE PUEDE OBLIGAR A LLEVAR UN DETERMINADO TIPO DE VESTIMENTA . POR ESE CAMINO TAMBIEN PROHIBIRIAMOS A CIERTAS DIPUTADAS QUE NO ENSE?ARAN LAS TETAS.ESTO ,DE MOMENTO ,TAMPOCO SE HA PROHIBIDO , SE?OR BONO.
a lo mejor lo que pretende el se?or bono es reflotar (?se dice asi?) la industria corbatera de este pais...dentro de unos d¨ªas les dir¨¢ a los se?ores diputados que lo elegante es ir con zapato de piel ...para reflotar la industria zapatera.....
con la que est¨¢ cayendo y de que cosas nos preocupamos!!!!
que no digo yo que vayan en bermudas...pero si con tejidos veraniegos,... su pantal¨®n y su camisa....?no van las mujeres tan fresquitas con su vestido de verano?....
de verdad que es pasmosa la chorrada.
luego nos subimos por las paredes cuando un juez dice en una sentencia que una mujer merecia ser violada por llevar falda y nos rasgamos las vestiduras hablando de la libertad que debemos de tener para vestirnos como queramos....
El Presidente del Congreso est¨¢ gag¨¢ en su acepci¨®n tradicional. Pone como ejemplo a los pobres ujieres que, am¨¦n de tener que llevar y traer y subir y bajar, pasando calor, seguro, les obliga a ir con chaqueta y corbata. Vaya argumento.?No dice el t¨ªo que es cristiano? Pues que se apiade de ellos, que les compren unas camisas de manga corta chulas que les distinga de los dem¨¢s (que esa es la raz¨®n de la chaqueta esa de acomodador de cine) y punto. Por favor, si ya lo usan hasta los soldados, que est¨¢n en oficinas. Van con corbata o no, ya no me acuerdo, pero con manga corta y punto. Y no por ello se baja la disciplina un mil¨ªmetro.Pero, ?no ser¨¢ que quiere desviar la atenci¨®n?El Sr. Bono tiene un colmillo retorcido que es capaz de hincar en el m¨¢s duro de los huesos.?OJO!Un saludo,Bartolom¨¦.
Lo que le sucede a Bono es que tiene muy asumido lo del valor de los s¨ªmbolos y lo de que el templo principal de la Soberan¨ªa Nacional no puede convertirse en discobarra para que cuatro mindundis horteras exhiban su mal gusto.Pero es que Bono es de otra ¨¦poca. La nuestra es m¨¢s propia de di¨¢logos como ¨¦ste:"Max: ?Ya se guardar¨¢ usted del intento! ?Soy el primer poeta de Espa?a! ?Tengo influencia en todos los peri¨®dicos! ?Conozco al ministro! ?Hemos sido compa?eros!Seraf¨ªn El Bonito: El se?or ministro no es un golfo.Max: Usted desconoce la historia moderna."Di¨¢logos anta?o audaces: ahora, puro costumbrismo, casi hiperrealista.Sin embargo, todav¨ªa vivimos tiempos antiguos. Todav¨ªa no puede decirse de una se?ora ministra que sea una golfa sin exponerse a reprobaci¨®n y condena p¨²blicas, y a alg¨²n que otro elogio, m¨¢s o menos envenenado, privado. Todo llegar¨¢. Si las ministras no son unas golfas es porque no han tenido todav¨ªa oportunidad.
La perspectiva de g¨¦nero es esa eficaz y milagrosa herramienta que permite a nuestras feministas ver indicios de machismo en aquellos lugares donde se hab¨ªan propuesto encontrarlos. Pero sucede que la perspectiva de g¨¦nero no es una ciencia exacta, ni siquiera una ciencia humana, sino que viene a ser una especie de software libre que todo el mundo puede usar, con la ¨²nica condici¨®n, claro est¨¢, de previamente haberse adherido entusi¨¢sticamente a la nueva religi¨®n laica que alumbra al mundo. El resultado de tal metolog¨ªa de trabajo no puede ser otro que un conjunto de esperpentos, al estilo de criaturas como las llamadas "familias monomarentales" o el m¨¢s conocido "miembros y miembras". En esta ocasi¨®n nuestra articulista ha pretendido haber descubierto en las corbatas una especie de eslab¨®n perdido que permite conectar a los varones con el ejercicio de la autoridad v¨ªa nudo en la garganta, y que lo expresa claramente cuando dice: "?para mandar hay que llevar corbata (lo que dejar¨ªa fuera a las mujeres)?" Para ella el hecho de que las mujeres no lleven corbata, lo que le extra?a pues es consciente de que las mujeres disponen de total libertad a la hora de vestirse de la manera que quieran, s¨®lo puede ser consecuencia de un invisible tab¨² patriarcal que veta a las f¨¦minas el uso de tal prenda con f¨¢licas connotaciones. Al margen de alucinaciones de g¨¦nero, lo ¨²nico cierto es que la corbata en nuestra sociedad nada tiene que ver con el concepto de autoridad, sino con el de lo que se entiende por la buena imagen (percepci¨®n subjetiva, por supuesto), con la de la buena presencia, con la idea de "educaci¨®n". La corbata la llevan los empleados de las funerarias, los vendedores de seguros, o los dependientes de la planta de caballeros del Corte Ingl¨¦s. Y ello es as¨ª no porque pretendan amedrentar al cliente de turno, sino porque a juicio de sus jefes ello transmite imagen de seriedad, de buenos modales y de buen hacer, todo ello imprescindible a la hora de poder vender una mercanc¨ªa o servicio. Los pol¨ªticos, que son vendedores de ilusiones, no pod¨ªan ser menos, y en consecuencia recurren a la corbata como look indispensable cuando tratan de vendernos lo que ni ellos mismos se creen. ?Autoritarismo en ello? Ninguno. En cambio, si hay una est¨¦tica que en nuestra sociedad vaya unida a la idea de autoridad es la representada por los uniformes de corte militar. No es casualidad que los modelos pol¨ªtico-sociales m¨¢s autoritarios del siglo XX, como lo fueron los fascismos y los comunismos, hayan recurrido al ampl¨ªsimo uso de los uniformes de estilo militar. Es cierto que en esos uniformes hab¨ªa corbatas, pero lo eran a tono con el resto de las prendas, por lo que pasaban desapercibidas. Eran otros complementos, tales como las gorras de plato, los correajes, los guantes y las botas de cuero los que realzaban el porte autoritario del que los usaba. En ese ejercicio de poder a trav¨¦s de la est¨¦tica fueron los nazis alemanes los que m¨¢s glamour alcanzaron. Muy diferente hubiese sido el resultado de la Segunda Guerra Mundial si ¨¦sta se hubiese librado en las pasarelas. Porque la presencia altiva de un oficial de las SS habr¨ªa conseguido para s¨ª toda la atenci¨®n de las abuelas de nuestras actuales feministas, de igual manera que a?os m¨¢s tarde ZP har¨ªa lo mismo vendi¨¦ndoles su talante de prototipo de nueva masculinidad a las nietas de aquellas. Es cierto que Carmen Chac¨®n no usa uniforme, salvo ese extra?o bot¨®n que se pone en la solapa a modo de condecoraci¨®n. Pero s¨ª es verdad que se hace acompa?ar de un militar de alta graduaci¨®n, y que s¨ª lleva el uniforme de su rango. ?Acaso Leire Paj¨ªn aparece en p¨²blico con un cirujano con bata y gorra verde? Evidentemente que no, porque el uniforme impone. Adem¨¢s, no es un secreto que los uniformes tiene un valor er¨®tico a?adido. Que hay hombres que se sienten atra¨ªdos por una mujer uniformada (de militar, no de cajera de supermercado). Y que, sobre todo, hay much¨ªsimas mujeres a las que le "ponen" los uniformados. Definitivamente la corbata no es fetiche er¨®tico, salvo para aquellos a los que les vaya el peligroso juego de la asfixia. Y ello es as¨ª porque la corbata no va asociada al poder. En cambio, s¨ª lo son los uniformes militares o policiales, porque van asociados a lo que en un hombre se le supone... Lo ¨²nico que me queda por saber es si en el mundo de las fantas¨ªas sexuales de nuestras feministas existe la escena del uniformado y lo inherente a su car¨¢cter. Aunque, naturalmente, y como buenas herederas de curas y monjas, ellas siempre lo negar¨¢n.
Esto a lo que recuerda es al "guardar compostura", que queda caduco. Pero el que tal como est¨¢ el pa¨ªs pierdan el tempo en hablar del tiempo y las corbatas y se piquen entre ellos con el tema demuestra hasta qu¨¦ punto el "poder" con o sin corbata -seguramente en traje de ba?o y yate- est¨¢ lejos de los parlamentos. Y eso es lo grave. Es como si quedaran los s¨ªmbolos ...
Intento hacer un comentario en la nueva entrada del blog Mujeres ("Seis m¨¢s seia igual a uno", y donde se nos habla de las "bondades" del jurado paritario en el caso del premio nacional de cinematograf¨ªa), pero me sale la siguiente nota: "Los comentarios de esta entrada est¨¢n cerrados." ?Es una cuesti¨®n t¨¦cnica, o simplemente una censura preventiva para evitar que, como de costumbre, los que no comulgamos con la nueva fe que alumbra al mundo nos dediquemos a darles ca?a?Dicen, aunque yo no s¨¦ si es cierto, que antiguamente, cuando la Iglesia Cat¨®lica eleg¨ªa a un papa, hab¨ªa un cardenal que se encargaba de palpar con sus manos las partes pudendas del nuevo pont¨ªfice, para cerciorarse de que efectivamente era var¨®n o mujer. Como no soy miembro de dicha iglesia, el tema me importa m¨¢s bien poco, como tambi¨¦n me importa un bledo si de los tocamientos susodichos el nuevo papa experimentaba alg¨²n tipo de m¨ªstica comuni¨®n con Dios. Lo que s¨ª me gustar¨ªa saber es que garant¨ªa tenemos de que efectivamente los nuevos miembros (o "miembras", en terminolog¨ªa bibianesca) del jurado son realmente mujeres. ?Hay alg¨²n perito o perita que lo certifique? ?Es suficiente lo que ponga el DNI? Porque de acuerdo con la ideolog¨ªa de g¨¦nero, y en palabras de Simone de Beauvoir, las mujeres no nacen, sino que se hacen. En consecuencia, que tenga g¨®nadas masculinas o femeninas a m¨ª no me dice nada. ?Qu¨¦ tal si proponemos a un intelectual como Pat Califia como miembro del tribunal que juzgue las pel¨ªculas? Al Pat Califia de hace 20 a?os, cuando era mujer y lesbiana, claro... Porque ahora que se ha operado y que es var¨®n quedar¨ªa autom¨¢ticamente excluido de la lista... En otras palabras, porque antes era de las "nuestras", por tanto de fiar, mientras que ahora se ha pasado al "enemigo", y ya no despierta confianza en aquellas que incluyen o excluyen a algien en funci¨®n de lo que se tenga entre las piernas. Siempre me ha llamado la atenci¨®n la denuncia del "sexismo" que hacen las feministas, cuando luego, en la pr¨¢ctica, son ellas las m¨¢s sexistas que hay sobre la faz de la Tierra. En fin, a saber qu¨¦ dir¨¢n en el futuro los historiadores de las mentalidades, cuando se enteren de las aberraciones que ahora se hace y dice en nombre del g¨¦nero...
S¨ª. Resultar¨¢ que la culpa de que haya que meter mujercitas con calzador en el jurado es de la ley de la paridad.La paridad por si misma no es ning¨²n concepto igualitario. S¨®lo iguala en n¨²mero, pero no en m¨¦rito ni en capacidad. Y eso seguramente lo sab¨ªa el que redact¨® la ley. Por eso, a ¨¦ste no hay que llamarle imb¨¦cil sino soci¨®pata; pues su nefasta ley parece hecha a prop¨®sito para no contentar a nadie salvo a un grupo de mentes enfermas que se empe?an en ver desigualdades y agresiones sexuales por todas partes.El aut¨¦ntico problema para los cr¨ªticos de la descabellada pol¨ªtica hembrista de los ¨²ltimos a?os es el que el hembrismo sabe muy bien usar el ventilador y acusar de ***machismo (porque muchos, y a cada cual m¨¢s tonto, son los prefijos que emplean) a quienes les cantan las verdades. Por suerte el tiempo es el que al cabo pone a todos en su sitio.
Aqu¨ª otra noticia en la que el principio de igualdad es reinterpretado al modo hembrista.http://www.elcorreo.com/vizcaya/20110724/mas-actualidad/politica/juzgado-avala-hacer-pruebas-201107241100.htmlVerg¨¹enza les deber¨ªa dar a los hembristas el tener que tragar con estas ruedas de molino (la verdad es que creo que no las tragan; s¨®lo fingen, los muy canallas) pero, sobre todo, el intentar que otros lo hagan. Son unos jetas y tienen la cara muy dura, aunque intenten echarle la culpa a mi machismo (lo intentan; s¨®lo consiguen ponerse de manifiesto en el esplendor de su impudicia).Pero es que claro, las mujercitas son iguales en lo bueno pero en lo malo no. Por eso, cuando son mejores que el hombre no hay que hacer nada pero cuando son peores es que est¨¢n discriminadas y hay que implantar medidas de igualdad y paridad. Y lo mismo se predica de aquellas profesiones en que la mujer est¨¢ sobrerepresentada: nada de establecer paridades para que haya un n¨²mero igual de hombres. Ya saben. El Tribunal Constitucional, como el CGPJ, est¨¢n no s¨®lo politizados sino completamente desprestigiados porque han renunciado a su m¨¢s importante derecho/deber: la honradez.
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