Vuelve el volc¨¢n Laporta (a su pesar)
Al expresidente le hubiera gustado reencarnarse en Pep Guardiola. No pudo ser. Pero el v¨ªnculo contin¨²a. El entrenador que le devolvi¨® al Olimpo le ha vuelto a salvar. En esta ocasi¨®n, de un embargo millonario. Esta es la historia de un barcelonista con siete vidas
Me firma un aut¨®grafo, por favor? ?Es usted Juan Laporta?". Un aficionado hispano, inmigrante en Estados Unidos, le pas¨® un papel y un l¨¢piz en un restaurante de la plaza de M¨¦xico, en Los ?ngeles, al entonces jefe de la expedici¨®n del Bar?a, Xavier Sala- Mart¨ªn, el catedr¨¢tico de Econom¨ªa de la Universidad de Columbia, defensor a ultranza del neoliberalismo econ¨®mico y conocido tambi¨¦n por sus extravagantes americanas de colores chillones.
"No, no soy yo", respondi¨® con fastidio Sala-Mart¨ªn, ¨ªntimo amigo de Laporta, al aficionado, que, incr¨¦dulo, busc¨® miradas de complicidad ante la sospecha de que estaba ante el presidente azulgrana por el parecido que guardan.
Sala-Mart¨ªn minti¨® en parte porque entonces, el 5 de agosto de 2006, s¨ª que era el presidente del Bar?a in pectore. Dirig¨ªa una gestora en el interregno de dos elecciones y era la cabeza visible de un club que acababa de ganar la Champions en Par¨ªs; que ten¨ªa por estandarte a un Ronaldinho a quienes los polic¨ªas de inmigraci¨®n de Los ?ngeles le preguntaban si era verdad que se ir¨ªa al Mil¨¢n, y en Laporta, a un presidente buscado por los cazaaut¨®grafos.
Pero Jan no fue ese verano a la gira de M¨¦xico y Estados Unidos. Se qued¨® a rega?adientes en Barcelona preparando unas inesperadas elecciones y tuvo que anular sendas citas con el entonces presidente de M¨¦xico, Vicente Fox, y una recepci¨®n en Nueva York con Kofi Annan, secretario general de la ONU. El socio Vicen? Pl¨¤ present¨® una demanda, que gan¨®, y forz¨® a la junta a acortar un a?o su mandato de cuatro y a anticipar el paso por las urnas. La directiva hab¨ªa ganado los comicios el 15 de junio de 2003 y tom¨® posesi¨®n el 23. Pl¨¤ defend¨ªa que los ocho d¨ªas que van hasta el 1 de julio hab¨ªa consumado un ejercicio completo. Los socios no llegaron a votar en esas elecciones de 2006 porque Laporta no tuvo rival. Pero Pl¨¤ present¨® una demanda para que avalaran los 24 millones de euros de p¨¦rdidas de su antecesor, Joan Gaspart.
Cinco a?os despu¨¦s, la causa a¨²n colea. Ha llegado al Supremo, que orden¨® a un juez de Barcelona que reclamara al expresidente y otros siete directivos tres millones por cabeza. El plazo expiraba ayer e, in extremis, y no se sabe si invitado por su sucesor, Sandro Rossell, Pl¨¤ retir¨® la ejecuci¨®n provisional del aval. Laporta, ahora diputado del Grupo Mixto del Parlamento catal¨¢n y edil de Barcelona, se hab¨ªa resignado a que sus bienes -asegura que tampoco tiene esa cantidad- fueron embargados. No quiso cambiar su titularidad por dignidad y porque dice que no ha hecho nada y es una cuesti¨®n de justicia.
"Estoy indignado y muy preocupado. S¨ª, me puedo quedar sin casa", explicaba Laporta el d¨ªa 21 en su despacho de abogados. La amenaza se cern¨ªa sobre ¨¦l, pero mantuvo intacta su agenda: esa ma?ana acudi¨® a una comisi¨®n de cinco horas sobre Calidad de Vida del Ayuntamiento; fue entrevistado despu¨¦s por una revista francesa sobre el ¨¦xito del modelo Bar?a, y por la noche asisti¨® a un estreno de El Tricicle. "No suelo hablar del Bar?a... hasta hoy", dijo calmado, mientras uno de sus asistentes le daba una corbata para asistir corriendo al teatro. "La demanda la ha presentado un se?or vinculado a Rosell y exnu?istas rabiosos, y el Bar?a se ha personado en ella". Al d¨ªa siguiente comi¨® con Cruyff y Guardiola, y por la noche colg¨® una carta en su facebook en la que acusaba a Rosell de "maniobrar" de forma "indecente" para hundirle a ¨¦l y sus compa?eros pese a heredar un club campe¨®n. "Es de manual: me quieren aniquilar", dijo antes de sentarse ante el ordenador. "Me siento como Garz¨®n. Tejen una telara?a a tu alrededor y lo que se publica es para desacreditarte". D¨ªas despu¨¦s dijo que sus hijos se hab¨ªan ido a estudiar a Inglaterra para evitar ese acoso.
?Destrucci¨®n? Guardiola, el hombre en que le hubiera gustado reencarnarse, le ha hecho un favor inmenso. Pep es ahora mismo palabra de Dios. Tiene a Catalu?a a sus pies. Los pol¨ªticos se rindieron ante ¨¦l cuando recibi¨® la Medalla de Oro del Parlamento catal¨¢n. Laporta renunci¨® a su momento de gloria y envi¨® un SMS al entrenador inform¨¢ndole de que no ir¨ªa a la ceremonia. Guardiola pas¨® en nueve meses de dirigir al filial a ganar la Champions en Roma en 2009, y abri¨® el discurso dando las gracias a Laporta por haberlo elegido. D¨ªas despu¨¦s, tras el 5-0 al Atl¨¦tico, mostr¨® su "estima infinita" hacia el expresidente y el resto de directivos se?alando, para conmoci¨®n de Rosell, que ni ellos ni sus familias merec¨ªan sufrir tanto. Seis d¨ªas m¨¢s tarde, Pl¨¤, despu¨¦s de cinco a?os, retir¨® la ejecuci¨®n del aval certificando el inmenso ascendente del entrenador.
"S¨ª, Pep lo ha cambiado todo. Y se lo agradezco con emoci¨®n. Desde la sinceridad y desde el fondo de su coraz¨®n, ha actuado para que estas cosas no sucedan en el barcelonismo", dijo ayer por la ma?ana Laporta en Catalunya R¨¤dio. Apasionado y tan obstinado que apost¨® por Guardiola contra corriente -"Me trataron de loco"-, Laporta ha vuelto sin querer a acaparar los focos por las fracturas fratricidas del club porque cree que la primera labor de un expresidente es "no molestar". Estaba en un segundo plano porque su carrera pol¨ªtica en su partido independentista Democracia Catalana, de momento, no da para m¨¢s. No le fue mal al principio: llen¨® en la campa?a teatros y aulas universitarias. Logr¨® cuatro diputados con la coalici¨®n Solidaritat (SI), pero la aventura acab¨® como el rosario de la aurora. La alianza se rompi¨® porque ¨¦l quiso ir con Esquerra (ERC) a las municipales para tener opciones de que el independentismo siguiera en el Ayuntamiento, y sus compa?eros, no. Acert¨® porque sali¨® electo. Ahora es un diputado del Grupo Mixto, que comparte con SI y Ciudadanos, y debe tener opini¨®n para todo lo inimaginable en tres minutos: desde leyes ¨®mnibus, la reforma constitucional o, por supuesto, los recortes sociales. Dice que, gracias a su equipo, nunca se ha sentido solo.
Su discurso pol¨ªtico es imperturbable: siempre acusa al Gobierno de Espa?a de expoliar cada a?o a Catalu?a 20.000 millones en impuestos que se van y no vuelven. Su meta es que Mas, cuyos presupuestos apoy¨® junto al PP, organice un refer¨¦ndum secesionista ya. Le entusiasma la pol¨ªtica, pero ya no arrastra a las c¨¢maras y genera indiferencia hasta el punto de que en la sala de prensa a veces no recibe preguntas. "Ese cambio es bonito", afirma asumiendo su nuevo rol. El Parlamento est¨¢ al lado del zoo y dice estar encantado con su despacho porque afirma que ve a "los elefantes". No ha hecho grandes amigos en la pol¨ªtica, pero tiene buena relaci¨®n con la presidenta del PP catal¨¢n, Alicia S¨¢nchez-Camacho, por amigos comunes, y especialmente con Llu¨ªs Recoder, consejero de Territorio y exalcalde de Sant Cugat, ciudad donde viv¨ªa.
Su mundo est¨¢ troceado entre la pol¨ªtica, el derecho y... el Bar?a: "Es cuesti¨®n de organizaci¨®n. Y tener entusiasmo y motivaci¨®n". Hace equilibrios: duerme muy poco y es capaz de pasar un fin de semana en Los ?ngeles y estar el martes en Barcelona en una comisi¨®n municipal. Y acepta hacer bolos en Colombia o Estados Unidos para disertar sobre el modelo Bar?a. No ha renunciado a ese patrimonio y mantiene estrechos lazos con el vestuario: come con relativa frecuencia con Pep y tiene amistad con Cesc o con Xavi y Pujol, quienes en el Gamper de 2010 le invitaron -"?A que no tienes cojones?"- a dar la vuelta al campo con el equipo con la Supercopa. Por supuesto, los tuvo.
Y a veces aparecen fotos suyas como la de este verano en la que se le ve¨ªa en ba?ador, luciendo barriga, bebiendo champ¨¢n y con un puro. Le gusta vivir bien, pero eso no le impide estar muy pendiente de su familia y tres hijos y levantarse a las seis de la ma?ana, como el curso pasado, para ir de Barcelona a Sant Cugat y llevarles al colegio. "?Bah! La caverna medi¨¢tica", zanja despectivo. "Estaba en un yate de unos amigos y, en vez de pedirla, robaron la foto. Y, s¨ª, de vez en cuando me gusta beber champ¨¢n y fumar un puro", a?ade con chanza. "Dej¨¦ el tabaco el 11-S. Fue una fecha tan se?alada que me propuse no fumar m¨¢s". Controvertido por excelencia, considera que se le persigue por su independentismo. Pero tiene un lado oscuro que aflor¨® en su ¨²ltimo a?o de mandato. En febrero de 2009 trascendi¨® que su despacho Laporta & Arb¨®s recibi¨® la propuesta de una empresa uzbeka para comprar el Mallorca y el gabinete subcontrat¨® a una firma para hacer una auditor¨ªa sobre el club balear. La operaci¨®n no se consum¨®. Uzbekist¨¢n es una de las dictaduras m¨¢s sangrientas del mundo y all¨ª fue el Bar?a a un entrenamiento. Cobr¨® tres millones de euros. Fue amigo de Gulnara Karimova, hija del presidente dictatorial uzbeko, embajadora en Espa?a y dise?adora expulsada de la pasarela neoyorquina por la tiran¨ªa de su pa¨ªs, pero la relaci¨®n con la rep¨²blica asi¨¢tica ya est¨¢ rota. Y luego su cr¨¦dito qued¨® muy da?ado cuando trascendi¨® que el aparato del club hab¨ªa espiado a cuatro vicepresidentes supuestamente por cuestiones electorales. Oficialmente fue por razones de seguridad. Laporta dijo que no sab¨ªa nada. Uno de los espiados fue su delf¨ªn en las elecciones.
Nadie en el Bar?a le niega dos aciertos indiscutibles: reconstruir un club hundido con la semilla del cruyffismo y auparlo a la cima futbol¨ªstica y erradicar a los boixos nois del Camp Nou. "Los dos [Laporta y Rosell] son caras de la misma moneda", apunt¨® Guardiola en Minsk procurando sembrar paz. Pero no ser¨¢ f¨¢cil porque, embargo o no, la demanda sigue en el Supremo y la junta le reclama en otra causa a Laporta 41 millones por p¨¦rdidas de su ¨²ltimo a?o. Ayer se mostr¨® dispuesto a hablar con Rosell para demostrarle que esas cifras no son ciertas. "Conf¨ªo en que se haga justicia. No queremos ni actos de magnanimidad, ni perd¨®n, ni clemencia. Pero si se habla de construir la paz del barcelonismo, se debe hacer a partir de la verdad", insisti¨® pidiendo seny por el bien del club.
La pelota sigue rodando y Messi ya ha atrapado a la leyenda de Kuba la. Laporta ya ha vuelto a su butaca del Camp Nou junto a las de sus hermanos. Pero nunca ser¨¢ solo un socio m¨¢s porque tiene madera de l¨ªder. Lo que m¨¢s agradece es el cari?o que recibe. En el Bar?a- Mil¨¢n, 30 abonados le saludaron al entrar al estadio.
Uno le dijo: "?T¨² s¨ª que nos defender¨ªas de Mou! ?Me das un aut¨®grafo?".

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