Tragos con historia

Tras las presentaciones el desfile de botellas, muestras singulares que fuimos probando sin interrupciones. De un tinto Valbuena 2007 llegamos hasta los Vega Sicilia ?nico de 1953 y 1942, este ¨²ltimo con casi 70 a?os. Asombroso pero cierto. ?Ambos estaban vivos?

Diez testimonios y dos estilos. Los m¨¢s recientes, los Vega Sicilia ?nico de 1996 y 2004, as¨ª como los Tinto Valbuena 2001 y 2007, presentaban hechuras modernas, las propias de vinos de terru?o, notas frutales domesticadas por maderas nuevas, mucha finura y puntos de acidez compensados. En las a?adas antiguas, 1983, 1976, 1967, 1960, 1953 y 1942, se apreciaba el efecto de largas crianzas, maderas viejas, notas de reducci¨®n y una acidez pronunciada, orgullo de la bodega.

Aus¨¢s lo dejo bien claro: ¡°La evoluci¨®n en los gustos no nos va a impedir que Vega Sicilia siga siendo diferente. Tenemos que mantener su esp¨ªritu tradicional con independencia de que hoy se estilen vinos que no se parecen a los de hace 40 a?os.¡±

?Cu¨¢l es el verdadero estilo de este famoso vino espa?ol, me preguntaba yo a m¨ª mismo conforme Aus¨¢s hablaba? No sabr¨ªa decirlo.

Aus¨¢s se refiri¨® al talante bipolar -- masculino y femenino--, de los Vega Sicilia. Por un lado, suavidad, amabilidad y complejidad arom¨¢tica. Por otro potencia, estructura y car¨¢cter. En mi opini¨®n no son vinos sencillos de entender aplicando los criterios de juicio actuales.

Es conocido que los Vega Sicilia ¡°?nico¡± presumen de largas crianzas en madera (las m¨¢s prolongadas del mundo), y que desde su elaboraci¨®n hasta su salida al mercado transcurren no menos de 10 a?os, incluidos 3 de reposo en botella. As¨ª que probamos en primicia la a?ada de 2004 que no se comercializar¨¢ hasta 2014. Un vino complejo y potente de gran persistencia arom¨¢tica. ?C¨®mo evolucionar¨¢ durante los pr¨®ximos a?os? ?Lograr¨¢ mantener ese car¨¢cter bipolar que supuestamente singulariza a la marca?

Vega Sicilia, vino de leyenda, no ser¨ªa lo que es sin la concurrencia de muchos factores. Procede de una finca de 1000 hect¨¢reas, rodeada de encinares y alcornoques en la que tan solo 200 hect¨¢reas las ocupan vi?as que se cuidan como plantas ornamentales. Tampoco seguir¨ªa en la cumbre sin su valioso capital humano y las gigantescas inversiones que la familia ?lvarez ha realizado en los ¨²ltimos a?os. Bodega con historia, que elabor¨® su primer vino en 1915 y por la que han desfilado en¨®logos famosos. En la lista Domingo ¡°Txomin¡± Garramiola, Jes¨²s Anad¨®n y Mariano Garc¨ªa.

Sin embargo, a Vega Sicilia ya no la rodea aquel halo m¨¢gico de anta?o. Como afirma mi amigo y especialista Juancho Asenjo, ¡°el mito de Vega Sicilia termin¨® el d¨ªa que se pudo comprar en tiendas con tarjeta de cr¨¦dito. Antes, para conseguirlo hab¨ªa que ser uno de los privilegiados con acceso a aquellos cupos que la bodega otorgaba con cuentagotas. Durante a?os fue el m¨¢s prestigioso y menos bebido de todos los vinos espa?oles¡±. Una frase lapidaria.

O mucho me equivoco o entre las preocupaciones prioritarias de Pablo ?lvarez y Javier Aus¨¢s figura su inter¨¦s por mantener el elegante estilo de la marca que a fuerza de ser fiel a s¨ª misma sigue sin parecerse a otras.