?Hemos aprendido algo en el Cuerno de ?frica?
Foto:Un ni?o severamente desnutrido en el centro de tr¨¢nsito de Kabasa.?UNHCR/S.Modola
Se cumplen seis meses desde que se declarase formalmente la pavorosa crisis alimentaria del Cuerno de ?frica. Millones de refugiados han transitado entre las fronteras de Somalia, Kenia y Etiop¨ªa buscando refugio de la crisis que asola la regi¨®n y otros muchos se preparan para lo que puede ser una vida entera en un campo de refugiados. En conjunto, 13 millones de personas est¨¢n amenazadas por la crisis alimentaria.
Las causas directas de esta tragedia humanitaria est¨¢n en la violencia armada y clim¨¢tica de las ¨²ltimas d¨¦cadas, pero la denuncia realizada ayer por Save the Children y Oxfam sugiere una responsabilidad casi criminal de la comunidad internacional, incapaz de reaccionar cuando las alarmas eran evidentes para cualquiera que quisiese verlo. ?Hemos aprendido algo de esta crisis?
Para contestar a esta pregunta, las principales organizaciones internacionales presentes en la regi¨®n han promovido una declaraci¨®n que recoge las lecciones fundamentales de la crisis y de la respuesta internacional. Un par de p¨¢ginas escasas que encapsulan recetas eficaces para evitar nuevas tragedias como la que acecha en este momento a la regi¨®n africana del Sahel, que en muchos aspectos replica la historia del Cuerno de ?frica:
- Existen mecanismos aceptables (aunque mejorables) de alerta temprana, pero las rigideces del sistema impiden responder a tiempo a las se?ales que se reciben. Los expertos sab¨ªan en agosto de 2010 lo que la sequ¨ªa estaba a punto de provocar, pero la respuesta a gran escala no lleg¨® hasta un a?o despu¨¦s.(Duncan Green explica en estasugerente entradapor qu¨¦).
- Cuando la crisis ha explotado se hace necesaria la ayuda alimentaria internacional, pero la mejor ayuda es la que no se necesita. D¨¦cadas de reglas comerciales injustas y de abandono por parte de gobiernos y donantes han reducido la capacidad de los productores locales para producir sus propios alimentos y mantener sus fuentes de agua. Es el tipo de ayuda menos ?sexy? -la que se recorta en momentos como ¨¦ste-, pero la m¨¢s importante para prevenir futuras crisis alimentarias.
- Una situaci¨®n humanitaria de este tipo est¨¢ tan relacionada con los shocks (la violencia y la sequ¨ªa) como con la incapacidad de las poblaciones de hacer frente a ellos. La consolidaci¨®n de redes b¨¢sicas de protecci¨®n social (como peque?os empleos, alfabetizaci¨®n o programas de vacunaci¨®n) pueden marcar la diferencia entre una situaci¨®n dif¨ªcil y una situaci¨®n cr¨ªtica.
- Las dos lecciones anteriores est¨¢n perfectamente ilustradas en el modo en el que la escalada de los precios de los alimentos ha roto los esquemas de millones de familias en los pa¨ªses pobres. En ausencia de un nivel b¨¢sico de autosuficiencia alimentaria y de redes de protecci¨®n que garanticen un margen de maniobra a las familias (si te gastas dos tercios de tus ingresos en alimentos, una subida peque?a puede ser definitiva), los incrementos de precios son la antesala de las crisis alimentarias.
- Finalmente, lo que parece m¨¢s evidente: la violencia y los conflictos magnifican y perpet¨²an crisis humanitarias como la del Cuerno de ?frica. Y, si es tan evidente, ?por qu¨¦ ¨¦ste y otros conflictos han languidecido durante d¨¦cadas mientras la comunidad internacional miraba para otro lado? ?No resulta un poco ir¨®nico que los mismos pa¨ªses que han ignorado (o alimentado con sus armas) la violencia africana se despepiten ahora por enviar ayuda humanitaria?
Cada una de las lecciones recogidas en esta Declaraci¨®n est¨¢ acompa?ada por medidas concretas a las que se comprometen las organizaciones e instituciones firmantes. A ellas se han unido responsables pol¨ªticos, como la Comisaria Europea de Desarrollo,Kristalina Georgieva. Se me ocurre que esta es una estupenda oportunidad para que el nuevo Ministro y Secretario de Estado de Espa?a marquen posiciones.
(Pueden leer aqu¨ª el texto completo de la Declaraci¨®n para Acabar con el Hambre Extrema.)
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