Un auditorio para todo
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¡°Hay mucho que decir, pero habitualmente se suele callar¡±. Eva ?lvarez y Carlos G¨®mez tratan de hablar con sus proyectos. Llevan a?os trabajando en Massanassa, un pueblo del interior, a pocos kil¨®metros de Valencia, donde, en el l¨ªmite entre el antiguo n¨²cleo urbano y el ensanche, acaban de levantar un auditorio efectivo y efectista. ?lvarez y G¨®mez, los arquitectos, aseguran que, al dise?ar, se hacen siempre dos preguntas: ?Para qui¨¦n? Y ?Para qu¨¦? En el nuevo Auditorio el qui¨¦n es amplio: -grupos de ciudadanos tomados de 360 en 360- y el para qu¨¦, a¨²n m¨¢s amplio: para todo. Su nuevo edificio busca albergar los m¨²ltiples usos que hoy se asocian a un edificio cultural y, adem¨¢s, preveer el futuro mantenimiento, consumo e incluso crecimiento del edificio que ahora se inaugura.
Los auditorios, como los teatros y casi como los cines de los pueblos son hoy, en realidad, espacios polivalentes. Nacen para dar un servicio amplio: desde actuaciones teatrales hasta proyecciones de cine pasando por festivales y fiestas populares. Con un presupuesto inferior a 500 euros por metro cuadrado, Eva ?lvarez y Carlos G¨®mez idearon el auditorio de Massanassa como un espacio preparado para acoger varios usos y ¨Cgracias a su previsi¨®n de estructura- preparado tambi¨¦n para crecer con futuras ampliaciones como, por ejemplo, la construcci¨®n de una escuela municipal de m¨²sica.
As¨ª, el inmueble es un lugar compartimentado en previsi¨®n de nuevos usos, y sin embargo, transparente para transmitir una idea de unidad ya que las sucesivas bandas que lo componen est¨¢n comunicadas en todos sus niveles. El edificio resulta as¨ª tremendamente vers¨¢til (la sala de exposiciones podr¨ªa emplearse como foyer para separar el acceso a nuevas dependencias) y contempor¨¢neo al indagar en dos de los asuntos en los que m¨¢s se detiene la arquitectura actual: el espacio intermedio y la construcci¨®n en seco.
El edificio est¨¢ organizado en cuatro bandas paralelas a la avenida principal. La primera contiene accesos y cafeter¨ªa. La segunda es un patio. La tercera, la sala principal y la de exposiciones y la cuarta alberga camerinos y accesos.
Cancelas correderas, tabiques de vidrio, circulaciones alternativas y un gran patio central ayudan a percibir el inmueble como un gran espacio y no como una suma de usos. Adem¨¢s de iluminar y ofrecer riqueza espacial y puntos de fuga visual, los patios ampl¨ªan los usos y accesos del edificio. Los frentes acristalados pueden oscurecerse e, incluso insonorizarse. Y est¨¢ previsto que las plantas trepadoras afecten tambi¨¦n a los muros del patio. Entre tanto, el Auditori se percibe como un espacio abierto que, seg¨²n sus arquitectos ¡°trata de evitar el monocultivo social¡±. Ellos tambi¨¦n evitan muchos problemas arquitect¨®nicos empleando medios pasivos para favorecer la ac¨²stica e ideando recorridos y materiales para facilitar el mantenimiento. M¨¢s all¨¢ de la luz y el cristal, la iluminaci¨®n, con diodos de led rojos o azules, constituye la ¨²nica decoraci¨®n de un auditorio sencillo que nace con vocaci¨®n de servicio y previsi¨®n de futuro.
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