¡°Te puedes quedar ciego de ¡®photocall¡±
Pregunta. Dicen que no ha estado mal su desfile de la pasarela madrile?a. ?Qu¨¦ ha inventado desde que empez¨® con aquellas mujeres encapuchadas y con sogas al cuello?
Respuesta. Han pasado diez a?os, y con trabajo y perseverancia he ido construyendo la identidad de David Delf¨ªn, que tiene que ver con cierta androginia, cierta austeridad.
P. ?Por qu¨¦ nadie se pone luego lo que se ve en las pasarelas?
R. Hay gente que se lo pone. Pero la pasarela tambi¨¦n es teatro, fantas¨ªa, muchas cosas. Aunque hay un p¨²blico. Con que pensemos en Lady Gaga¡
P. No me dir¨¢ que ha vendido mucho su pantal¨®n de tres piernas.
R. No, pero alguno s¨ª, para coleccionistas. Nadie tiene tres piernas, pero la tercera se giraba hacia delante o hacia atr¨¢s y dejaba una especie de fald¨®n muy favorecedor.
A CORTA DISTANCIA
Nos vemos en su nuevo estudio-taller, un garaje adaptado a las nuevas circunstancias. Reconoce que la crisis no perdona. Pero sigue haciendo mil cosas: prepara la colecci¨®n primavera-verano de 2013, se va a Chicago a hacer un vestuario para el Luna Negra Dance Theatre, va a comisariar una exposici¨®n de moda, busca sacar un perfume. Habla entre maniqu¨ªes, zapatos de al?tura imposible, burros de ropa, bolsos. Y explica: ¡°La venta de ropa ha bajado, pero como somos inquietos¡¡±.
P. Lo militar es recurrente en usted. ?Se lo ha agradecido alg¨²n general?
R. Pues todav¨ªa no, la verdad. Y me sigue gustando. Mi padre estuvo en la guerra de Sidi Ifni y fue paracaidista, y de peque?o he tenido todas esas im¨¢genes como muy cercanas a m¨ª.
P. Lo suyo es marcial.
R. Bueno, s¨¦ lo que es la disciplina, s¨ª.
P. ?Su fanatismo por el psicoan¨¢lisis no vuelve un poco loco a su entorno?
R. De ese fanatismo me cur¨¦. He vuelto a psicoanalizarme ahora, y creo que ayudo a mi entorno. El psicoan¨¢lisis te ayuda a quitar hierro a las cosas. Te das cuenta de que nada es tan grave.
P. ?Qu¨¦ dir¨ªa Freud de sus trapitos?
R. A lo mejor dir¨ªa que mi moda es un poquito esquizofr¨¦nica.
P. ?Hay algo de usted que no le guste o no se besa porque no se llega?
R. Hay un mont¨®n de cosas de m¨ª que no me gustan. Pero ?qu¨¦ m¨¢s da? Al final, lo que tenemos que aprender es a relacionarnos con nuestros deseos inconscientes, con nuestras virtudes y nuestros defectos.
P. Confiese algo en lo que no se guste.
R. Hay veces que me pongo muy pesado y obsesivo. Pero en el mundo de la moda, ser obsesivo es genial. Preparando un desfile me pongo insoportable. Ser pesado me viene de familia.
P. ?Cu¨¢l de los cinco sentidos le ense?a m¨¢s?
R. Yo creo que la vista. A m¨ª me sientas en un banco de estos horrorosos que tenemos en la Gran V¨ªa de Madrid y me entretengo un buen rato. Soy muy observador, y no solo de la superficialidad, sino tambi¨¦n de las actitudes, las miradas, las intenciones.
P. ?Qu¨¦ hay m¨¢s en usted: surrealismo o cuento?
R. Si entendemos cuento vinculado a la fantas¨ªa¡ Mi trabajo est¨¢ lleno de met¨¢foras, y hay una historia detr¨¢s que mezcla la realidad con la ficci¨®n. Pero yo tengo los pies muy en el suelo. Y el surrealismo me interesa mucho.
P. ?Trata de sorprender o es que tiene una cabeza complejita?
R. Tengo una cabeza complejita, pero no mucho m¨¢s que la de cualquiera. La moda te obliga a sorprender y a renovarte casi cada seis meses. Mi principal obsesi¨®n es emocionar a la gente.
P. No quiero ni pensar c¨®mo ser¨¢n sus sue?os si despierto hace estas cosas.
R. Sue?o cosas abstractas y absurdas. Hace poco iba como nadando ¨Cyo, que aunque me apode Delf¨ªn nado como un perro¨C y me adelantaban ni?os y ni?as. Me despert¨¦ como muy angustiado.
P. Igual es la competencia, que viene ya desde muy joven.
R. Es lo que dicen (r¨ªe). Siempre hay otro m¨¢s joven, con m¨¢s talento, m¨¢s guapo y m¨¢s de todo que viene detr¨¢s.
P. Tiene dos obsesiones: la mente y el cuerpo. ?A cu¨¢l teme m¨¢s?
R. A la mente. Porque al final el cuerpo est¨¢ al servicio de la mente. Ya dicen que el cuerpo es el escenario donde los s¨ªntomas se manifiestan.
P. Bimba Bos¨¦ y usted se emparejaron con dos hermanos de grandes posibles. Cuando usted se separ¨®, ?se le desmoron¨® un poco la barraca?
R. Todo lo contrario. Yo creo que est¨¢ m¨¢s fuerte que nunca. Gorka [su expareja] tuvo apoyo de su familia. Pero cuando la ayuda se acab¨®, mi empresa iba adelante por s¨ª misma, era ya autosuficiente antes de que nos separ¨¢semos. Y seguimos siendo socios.
P. Su nueva pareja, que le hace los bolsos, es un bloguero confeso. ?Ha descubierto un mundo nuevo?
R. He descubierto muchas cosas, claro. Me hace ver c¨®mo todo est¨¢ cambiando y la importancia del medio online, que es una ventana al mundo, y no es tan caro como tener una tienda abierta al p¨²blico.
P. ?Se puede morir de photocall? ?No teme que le pase?
R. No s¨¦. Morir parece exagerado. A lo mejor te puedes quedar ciego de photocall. Para m¨ª son cuesti¨®n de trabajo. Voy, me hago la foto y me marcho.
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