?Una norma para Jes¨²s y otra para Mahoma?

Las cosas sencillas pueden ser muy dif¨ªciles. La igualdad, por ejemplo. El Reino Unido tiene desde hace un par de a?os una cosa llamada la Ley de Igualdad, para promover ese concepto tan bueno. Ahora bien, cuando se empieza a mirar qu¨¦ significa en la pr¨¢ctica, la cosa se complica.

He estado pensando en ello por cierta reacci¨®n que ha habido en los medios de comunicaci¨®n a un di¨¢logo que mantuve hace poco con Mark Thompson, director general de la BBC, para el proyecto que estamos llevando a cabo en Oxford sobre la libertad de expresi¨®n (www.freespeechdebate.com) [http://freespeechdebate.com/en/media/mark-thompson-talks-religion/]. Despu¨¦s de hablar de la emisi¨®n en la BBC del musical Jerry Springer: The Opera, que levant¨® airadas protestas de los cristianos evang¨¦licos porque se trata de una obra sat¨ªrica que mostraba a Jes¨²s como un beb¨¦ gigante y gru?¨®n vestido con un pa?al, le suger¨ª que a la BBC no se le ocurrir¨ªa jam¨¢s emitir una s¨¢tira equiparable sobre el profeta Mahoma. Me contest¨®: ¡°Creo que, en una palabra, la respuesta es que es verdad¡±.

Sus palabras las recogieron varios medios, en primer lugar The Daily Mail [http://www.dailymail.co.uk/news/article-2106953/Christianity-gets-sensitive-treatment-religions-admits-BBC-chief.html#ixzz1p5gkq1eL], y luego The Daily Telegraph, The Spectator y por lo menos una p¨¢gina web cristiana [http://www.christian.org.uk/news/well-mock-jesus-but-not-mohammed-says-bbc-boss/], con titulares como ¡°El director general de la BBC reconoce que al cristianismo se le trata peor¡± (Telegraph) [http://www.telegraph.co.uk/culture/tvandradio/bbc/9107689/Mark-Thompson-BBC-director-general-admits-Christianity-gets-tougher-treatment.html] y ¡°?Deber¨ªan matar los cristianos a Mark Thompson?¡± (Spectator) [http://www.spectator.co.uk/nickcohen/7680573/should-christians-kill-mark-thompson.thtml]. En Mail Online, un lector o lectora que se identific¨® como D. Acres de Balls Cross, West Sussex, colg¨® este comentario: ¡°Este hombre es repugnante. Deber¨ªan colgarlo en una cruz. Eso le ense?ar¨ªa a no faltar al respeto a su pa¨ªs y su fe cristiana¡±. Qu¨¦ cristiano y qu¨¦ patriota, este indignado o indignada de Balls Cross.

Le suger¨ª a Thompson que esta asimetr¨ªa entre la forma que tienen los medios audiovisuales (no solo la BBC, y no solo en Reino Unido) de tratar al islam en comparaci¨®n con otras religiones es consecuencia de la amenaza violenta de los extremistas musulmanes. Respondi¨®: ¡°Bueno, es evidente que es un factor importante... Protesto de la forma m¨¢s en¨¦rgica posible es distinto de Protesto de la forma m¨¢s en¨¦rgica posible y estoy cargando mi AK47 mientras escribo¡±. Se trata de un franco reconocimiento de una de las mayores amenazas contra la libertad de expresi¨®n que existen hoy en el mundo. La literatura cl¨¢sica estadounidense sobre la libertad de expresi¨®n habla del ¡°veto del saboteador¡±. Hoy nos enfrentamos al ¡°veto del asesino¡±. Y es preciso resistir siempre contra esa intimidaci¨®n violenta. Ceder ante ella no sirve m¨¢s que para animar a otros a utilizar la violencia. Si creyeran que los ateos, cristianos, sijs o jud¨ªos somos capaces de cargar nuestros AK47, quiz¨¢ misteriosamente se nos tendr¨ªa m¨¢s respeto.

No debemos abandonar jam¨¢s la b¨²squeda de libertad para todos en igualdad bajo la ley

Sin embargo, en su respuesta, muy meditada, Thompson mencion¨® otros dos motivos para que haya un tratamiento asim¨¦trico. En primer lugar, mientras que el cristianismo es la religi¨®n establecida y ¡°de anchas espaldas¡± de la mayor¨ªa de los brit¨¢nicos, el islam es una la religi¨®n de unas minor¨ªas ¨¦tnicas vulnerables ¡°que quiz¨¢ se sienten ya aisladas en otros aspectos, v¨ªctimas de prejuicios, y que pueden considerar que un ataque contra su religi¨®n es otra forma de racismo¡±.

Segundo, como cristiano practicante, Thompson dijo que es preciso comprender el poder emocional de ¡°lo que supone la blasfemia para alguien que es realista en sus creencias religiosas¡±. Las creencias religiosas no se pueden comparar sencillamente con proposiciones racionales como 2 + 2 = 4. ¡°Para un musulm¨¢n, y quiz¨¢ tambi¨¦n para un cristiano, hay, como si dij¨¦ramos, cosas blasfemas o casi blasfemas que ellos pueden sentir casi como una amenaza violenta¡±.

Quiero dejar claro que no me parece que estos dos argumentos justifiquen la asimetr¨ªa. Creo que la BBC deber¨ªa tener la libertad de emitir un programa tan sat¨ªrico como Jerry Springer: The Opera sobre el islam, que, por cierto, no ser¨ªa verdaderamente una s¨¢tira sobre la religi¨®n, porque Jerry Springer: The Opera era una s¨¢tira sobre el programa de Jerry Springer y la cultura popular estadounidense, no sobre Jesucristo y el cristianismo. Y estoy convencido de que el principal motivo por el que la BBC y la mayor¨ªa de los dem¨¢s medios se ponen m¨¢s nerviosos cuando se trata del islam es la amenaza de la violencia.

Pero merece la pena detenerse a estudiar con seriedad esos dos argumentos, y ambos, en definitiva, est¨¢n relacionados con la igualdad. No es intr¨ªnsecamente malo ni antidemocr¨¢tico sugerir que se trate a los miembros de minor¨ªas desfavorecidas con una sensibilidad especial. La igualdad no significa, por ejemplo, que los encargados de las admisiones en Oxford, ante dos candidatos, el hijo de unos inmigrantes pobres que ha luchado para sacar a duras penas el bachillerato en una escuela p¨²blica, y el hijo de un millonario educado en Eton, tengan que decir: Sunder tiene peores notas y ha hecho peor la entrevista, as¨ª que est¨¢ claro que debemos admitir a David. Lo que hay que preguntarse aqu¨ª es: ?es cierto que los musulmanes siguen siendo una minor¨ªa vulnerable y desfavorecida en el Reino Unido? (Para complicar a¨²n m¨¢s las cosas, eso puede ser cierto en el conjunto del pa¨ªs, pero no en determinadas ciudades.) Y, en ese caso, ?esta es la manera de mostrar especial sensibilidad?

Los dobles raseros son las se?ales de alarma de una sociedad libre

Su argumento sobre la peculiar naturaleza de las creencias religiosas tambi¨¦n nos remite a la igualdad. Desde un punto de vista emp¨ªrico, es innegable que mucha gente siente con especial intensidad su fe religiosa. Pero eso no basta para que la fe tenga prioridad sobre la raz¨®n. Supongamos que yo siento la misma pasi¨®n sobre la realidad cient¨ªfica de la evoluci¨®n que los cristianos o los musulmanes sobre la creaci¨®n. ?Por qu¨¦ una pol¨ªtica p¨²blica o un medio p¨²blico de comunicaci¨®n va a tener que proteger sus sentimientos m¨¢s que los m¨ªos? La Ley de Igualdad brit¨¢nica indica que no deben hacerlo, con una definici¨®n deliciosamente enrevesada: ¡°Fe se refiere a cualquier creencia religiosa o filos¨®fica, y una referencia a la fe incluye una referencia a la falta de fe¡±.

Aunque es muy dif¨ªcil, no debemos abandonar jam¨¢s la b¨²squeda de libertad para todos en igualdad bajo la ley. Todo el mundo tiene derecho a lo que el fil¨®sofo Ronald Dworkin llama ¡°igual respeto y preocupaci¨®n¡±. Eso no significa tratar a todos de la misma forma en cualquier circunstancia. Pero, cada vez que oigan a alguien (incluidos ustedes y yo) defender un tratamiento distinto de alguna cosa, busquen una linterna y exam¨ªnenlo con m¨¢s detalle. El mismo cristiano evang¨¦lico que se queja de tratamiento injusto en la BBC se opondr¨¢ ruidosamente al matrimonio homosexual. El mismo liberal europeo que asegura con pasi¨®n que los peri¨®dicos deben tener libertad para publicar caricaturas de Mahoma defender¨¢ unas leyes que penalizan la negaci¨®n del genocidio. Los dobles raseros son las se?ales de alarma de una sociedad libre.

Timothy Garton Ash es catedr¨¢tico de Estudios Europeos en la Universidad de Oxford, investigador titular en la Hoover Institution de la Universidad de Stanford. Su ¨²ltimo libro es Los hechos son subversivos: ideas y personajes para una d¨¦cada sin nombre.

Traducci¨®n de Mar¨ªa Luisa Rodr¨ªguez Tapia