Vincent Gallo, contra Los ?ngeles

Vincent Gallo no tiene pudor en embestir contra el star system de Hollywood, de hecho es famoso, entre otras cosas, por criticar a actores y directores, incluso aquellos con los que ha colaborado, como Francis Ford Coppola, bajo cuyas ¨®rdenes rod¨® Tetro. Esta vez ha ido un paso m¨¢s all¨¢ y ha decidido centrar sus ataques no contra personas sino contra una ciudad, la de Los ?ngeles. Seg¨²n anunci¨® en la web de cotilleos de famosos TMZ, el int¨¦rprete y director ha demandado a la localidad por malgastar sus impuestos en un programa del Gobierno encargado de limpiar, embellecer y mantener la seguridad del Distrito de las Artes.

Gallo considera el programa una ¡°p¨¦rdida de dinero de los contribuyentes¡± que ¡°no genera ning¨²n beneficio¡± y que solo sirve de excusa para que la empresa que tiene la contrata se ¡°llene los bolsillos¡±. En su demanda, se?al¨® TMZ, el actor indica que el a?o pasado ¡°se desperdiciaron¡± en esa iniciativa 860.000 d¨®lares (655.445 euros) y exige que se le devuelvan los 1,3 millones de d¨®lares que ha pagado en impuestos.

El actor tiene una p¨¢gina web en la que adem¨¢s de ofrecer su esperma por 50.000 d¨®lares, tambi¨¦n se vende a s¨ª mismo

A la espera de que un juez decida si admite o no la demanda, queda por saber si la denuncia es otra extravagancia m¨¢s del actor. La lista de excentricidades de Gallo es larga. El actor, un icono hipster, tiene una p¨¢gina web en la que adem¨¢s de ofrecer su esperma por 50.000 d¨®lares, tambi¨¦n se vende a s¨ª mismo por esa cantidad m¨¢s gastos para ¡°satisfacer los deseos, los sue?os y las fantas¨ªas de cualquiera que haya nacido mujer¡±. La suma asciende a 100.000 d¨®lares la noche si se trata de ¡°parejas con inclinaciones l¨¦sbicas¡±.

Pol¨¦mico por naturaleza, Gallo lleva la controversia m¨¢s all¨¢ de su vida privada. Su pel¨ªcula The Brown Bunny, en la que la protagonista, Chlo? Sevigny, le hac¨ªa una felaci¨®n que duraba varios minutos, fue denostada por la cr¨ªtica. El director le dese¨® a uno de los periodistas, que tild¨® la cinta como la peor de la historia, que se muriera de c¨¢ncer. Ahora ha decidido que su pr¨®ximo film, Promsises Written in Water, no se distribuya en circuitos comerciales porque no quiere que sean los estudios los que impongan la audiencia a la que vaya dirigido.