?Temor o desprecio?

?C¨®mo ha de tomarse la ciudadan¨ªa el hecho de que el presidente del Gobierno se niegue a que se celebre el debate del estado de la naci¨®n?

No acierto a comprender que, con todo lo que est¨¢ pasando, el se?or Rajoy se atreva a tanto. ?Acaso piensa que los ciudadanos no tenemos derecho a escuchar sus explicaciones sobre la ca¨®tica situaci¨®n que estamos pasando, sobre casos tan escandalosos como el de Bankia, sobre el deterioro de las instituciones, sobre su continuo ¡°donde dije digo, digo Diego¡±, sobre tanta corrupci¨®n, sobre la ineficacia de los recortes salvajes que ha establecido, sobre el desmantelamiento del Estado de bienestar?

Deber¨ªa comprender el presidente que hay motivos sobrados para que comparezca ante la opini¨®n p¨²blica y d¨¦ explicaciones contundentes, claras y concisas. No puede seguir escondi¨¦ndose, huyendo de los periodistas, deteriorando su imagen y la del pa¨ªs dentro y fuera de Espa?a, dejando pasar el tiempo esperando no se sabe qu¨¦. Cada d¨ªa que pasa hay algo nuevo, y siempre peor que lo anterior. Si est¨¢ convencido de que sabe lo que hace, que lo diga, que lo explique con claridad, sin eufemismos, sabiendo lo que dice, sin tener que desdecirse a los pocos d¨ªas, con gallard¨ªa, con respeto a todos, sin salidas de tono y sin ambig¨¹edades.

Ignoro si don Mariano teme que sus explicaciones no resulten convincentes. No s¨¦ si lo que le pasa es que no siente que tenga la obligaci¨®n de dar esas explicaciones. Lo que s¨ª s¨¦ es lo que siento yo como ciudadano. Verg¨¹enza e indignaci¨®n.¡ª ?ngel Villegas Bravo.