Uruguay toca la marihuana

Las drogas producen tanto dolor en quienes caen bajo su influjo, generan tanto dinero, tantos cr¨ªmenes y tanta corrupci¨®n, tantos excesos, que la f¨®rmula que se consider¨® m¨¢s eficaz para combatirlas ha sido la prohibici¨®n. No parece haber funcionado, y donde su fracaso resulta m¨¢s evidente es en Latinoam¨¦rica, donde la violencia de los carteles del narcotr¨¢fico est¨¢ llegando incluso a dinamitar la viabilidad de algunos Estados. Por eso, desde hace cuatro a?os, tres expresidentes ¡ªel mexicano Ernesto Zedillo, el colombiano C¨¦sar Gaviria y el brasile?o Henrique Cardoso¡ª llevan defendiendo la idea de abrir un debate para discutir la eficacia de las pol¨ªticas actuales y hablan, entre otras cosas, de legalizar el consumo de marihuana. El primer presidente en funciones que ha tenido sin embargo el coraje de enfrentarse a este problema ha sido el uruguayo Jos¨¦ M¨²jica. ¡°Alguien tiene que ser el primero¡±, ha dicho. ¡°Porque estamos perdiendo la batalla contra las drogas y el crimen en el continente¡±.

El pasado jueves, su Gobierno present¨® un proyecto de ley para legalizar la producci¨®n y comercializaci¨®n de la marihuana de manera regulada y controlada y bajo monopolio estatal. El proceso se est¨¢ llevando con mucho cuidado. Nada de improvisaciones, ni de demagogia: hace falta abrir un debate dentro del pa¨ªs sobre la propuesta y luego es necesario estudiar qu¨¦ implicaciones internacionales puede tener la medida y c¨®mo se la tomar¨¢n los pa¨ªses vecinos. La idea es que el Estado est¨¦ siempre encima y que la marihuana se venda a consumidores adultos registrados. Siempre se ha hablado de que esta batalla no la puede librar un pa¨ªs en solitario, pero Uruguay considera que debe combatir la prohibici¨®n ya que, seg¨²n el ministro de Defensa. ¡°est¨¢ generando m¨¢s problemas que la droga misma¡±.

Son unos 47 millones de euros los que mueve la marihuana cada a?o en Uruguay, donde la consumen unas 150.000 personas (el 5% de la poblaci¨®n). Lavado de dinero, corrupci¨®n, delincuencia e inseguridad ciudadana son el correlato diab¨®lico de esas cifras. La ¨²nica manera de paliar los males es empezar por tocar la marihuana, aunque queme. M¨²jica se ha atrevido. Ojala le vaya bien.