Mujeres libres para taparse
Las nuevas autoridades egipcias defienden el uso del pa?uelo en la televisi¨®n p¨²blica en nombre de la libertad de elecci¨®n de las mujeres
Fatma Nabil es una periodista egipcia cuya actitud ha puesto de manifiesto dos contradicciones aparentes. La primera de ellas es que Nabil ha sido noticia destacada por presentar un programa informativo en la televisi¨®n p¨²blica con un pa?uelo blanco que le cubr¨ªa cabeza y cuello en un pa¨ªs en el cual el 70% de las mujeres utiliza una prenda similar (no hay certeza de que todas ellas lo hagas de forma libre y voluntaria). La segunda aparente contradicci¨®n es que el uso de dicho velo ha sido defendido por la oficialidad como parte de la libertad de elecci¨®n de las mujeres en una zona en la que salir a pasear por ciertos barrios sin el pa?uelo puede acarrear serios problemas a la osada que lo haga. El nuevo Gobierno del islamista Mohamed Morsi no se ha preocupado, empero, por la libertad de esas mujeres an¨®nimas.
El caso de Nabil ha reavivado el debate del velo, un asunto que remueve los cimientos de las sociedades actuales, sean cristianas o sean musulmanas.
El velo, pa?uelo o hiyab fue prohibido en la televisi¨®n p¨²blica egipcia en 1952 siguiendo los principios secularizadores de la revoluci¨®n de Nasser. Ahora que los Hermanos Musulmanes han accedido al poder han cambiado la norma en nombre de la libertad femenina y la sociedad egipcia se pregunta si poco a poco el velo se extender¨¢ entre las locutoras de la televisi¨®n p¨²blica (de momento solo Nabil ha echado mano del hiyab), entre las azafatas y en todo colectivo profesional dependiente de un organismo p¨²blico. Los nuevos dirigentes tienen ventaja. No necesitan obligar formalmente a que se use; basta con dejar que la presi¨®n social act¨²e por s¨ª misma. O que cambien los criterios de selecci¨®n de personal.
Lo que este caso denota, una vez m¨¢s, es la importancia que las sociedades m¨¢s conservadoras y religiosas otorgan a la vestimenta femenina como estandarte de sus valores. Tanto es as¨ª que por fin los pa¨ªses m¨¢s reaccionarios han acabado por permitir a sus mujeres que participaran en los Juegos Ol¨ªmpicos, pero algunos se han negado a que lo hagan sin velo. Tampoco en este caso ha habido autoridades musulmanas defendiendo la libertad de elecci¨®n.
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