Melendi: ¡°La borrachera del avi¨®n me cambi¨® la vida¡±

Pregunta. El programa La Voz, de b¨²squeda de talentos canoros, va como un tiro. Y muchos concursantes eligen irse con usted. ?Es el coach revelaci¨®n?

Respuesta. Yo creo que ellos vienen ya con una idea muy predeterminada, saben con qui¨¦n se quieren quedar. Yo soy el que m¨¢s talento ve, el que m¨¢s se da la vuelta [los coach escuchan las voces de espaldas, y giran la silla cuando quieren elegir a alguien]. Los aspirantes no dan ni el treinta por ciento de lo que tienen por los nervios. Veo voces especiales y hay cosas de desafinaci¨®n que no tengo en cuenta, porque el primero que desafina soy yo.

P. Siempre ha sido un bala perdida. ?Con la tele se est¨¢ haciendo m¨¢s formalito?

R. Yo estoy m¨¢s formalito desde hace seis a?os, cuando inici¨¦ un proceso de cambio, que necesitaba, porque a m¨ª la m¨²sica me super¨® por todos los sitios. Un d¨ªa llegu¨¦ a mi casa y dije: algo estoy haciendo mal. Me est¨¢n pasando cosas muy bonitas y soy infeliz.

P. Y dec¨ªa: ¡°El mundo me ha hecho canalla¡±. ?Ahora va de virginal doncella?

R. Noooo. Soy un chaval normal, de barrio, y mi vida, con unos padres maravillosos, ha sido siempre muy f¨¢cil. Mi mayor enemigo he sido yo, yo mismo, y he pasado un proceso de cambio, de conocerme a m¨ª mismo, muy doloroso. Pero ya me he ca¨ªdo del guindo. Tengo dos hijos, llevo siete a?os con mi pareja y la cosa est¨¢ en otro plano.

P. Como asturiano, ?le pesa ser de Oviedo y no de Gij¨®n?

R. Ja, ja, ja. No, no, ?por qu¨¦? Yo estoy muy orgulloso de ser de Oviedo. A m¨ª Gij¨®n me encanta, y tengo all¨ª muchos amigos. Nuestra rivalidad es simplemente futbol¨ªstica. Y yo en eso tengo un sentimiento carbay¨®n.

P. Han escrito: ¡°Es pobre en lo musical, pero tiene capacidad para la empat¨ªa¡±. ?Malillo, pero simpatic¨®n?

R. Algo as¨ª yo creo que quiere decir. Yo siempre he basado mi carrera en la composici¨®n, en las letras, y en comunicar con la gente. Siempre he reconocido que no tengo una gran voz.

P. ?Lleg¨® a pagar el combustible cuando se agarr¨® la borrachera en un avi¨®n a M¨¦xico y el piloto tuvo que regresar a Madrid?

R. Al final se firm¨® un contrato de confidencialidad, y algo se tuvo que pagar de costas civiles, s¨ª. Mi vida ten¨ªa que explotar por alg¨²n lado.

P. Pues que explotara en un avi¨®n lleno de pasajeros...

R. Vuelvo a pedirles excusas. Pero para m¨ª aquello no fue negativo. A partir de entonces me cambi¨® la vida, y empec¨¦ a pensar mucho m¨¢s en hacia d¨®nde quer¨ªa ir y qu¨¦ estaba haciendo mal.

P. Si bebe por miedo al avi¨®n, ?por qu¨¦ no prueba con tila?

R. El problema es que, adem¨¢s, tomaba pastillas para los nervios. Estaba una o dos semanas antes sin dormir. Ten¨ªa mil trabas mentales.

P. Le veo muy serio y razonable. Han debido de ser tremendos los ejercicios espirituales.

R. S¨ª, y el psicoan¨¢lisis, y muchas cosas, claro. Sobre todo el proceso de conocerte a ti mismo.

P. Y ahora que se conoce, ?se gusta?

R. Me gusto m¨¢s que antes.

P. ?Sigue estando colocado casi siempre, como dijo una vez?

R. No s¨¦ cu¨¢ndo lo dije. Se saca todo de contexto. S¨ª es verdad que yo, a la hora de componer, cuando me atasco, me fumo un porrillo y se me abre la mente. Pero esto se lo puede decir cualquier artista del planeta Tierra.

P. ?Y ahora mismo qu¨¦ le coloca?

R. El d¨ªa a d¨ªa, la ilusi¨®n que me da el trabajo, el nuevo disco que sale en noviembre, hacer cosas diferentes. La Voz para m¨ª es una aventura, porque llevo quince a?os en un bucle de grabaci¨®n de disco, promoci¨®n, gira. Y llega un momento en el que no creces m¨¢s como persona.

P. En 2007 hizo un videojuego en el que su personaje era un proxeneta que traficaba con drogas. Ejemplar para sus ni?os.

R. No es cosa m¨ªa. Era un juego de bandas y de mafiosos, y no se llama como yo. Solo cogieron mi f¨ªsico.

P. Ha estado siempre a favor de la pirater¨ªa. No querr¨¢ ni o¨ªr hablar de la Ley Sinde.

R. Cuando yo empec¨¦ en la m¨²sica las compa?¨ªas me dieron de lado, y no puedo negar que estoy donde estoy por los conciertos y el boca a boca. No puedo tirar ahora piedras contra mi tejado y ser un hip¨®crita. Ahora, con el nivel de pirater¨ªa al que estamos se esta est¨¢ arruinando el negocio.

P. Si usted fuera concursante, ?se ir¨ªa con Melendi?

R. Depende. Yo puedo aprender mucho de mis tres compa?eros coach [Bisbal, Rosario y Mal¨²], sobre todo vocalmente. Conmigo, no, porque ya sabr¨ªa lo que he hecho. Vocalmente no quiero aprender m¨¢s de lo que s¨¦. Prefiero aprender m¨²sica, porque mi instrumento es suficiente para contar lo que cuento. Y mis canciones cantadas con otra voz m¨¢s l¨ªrica no pegan.

P. De mayor no quiere ser Pl¨¢cido Domingo ni Pavarotti.

R. Ni puedo ¨Cno tengo ni la capacidad ni el talento¨C, ni procede, para lo que yo hago.