Carla Bruni aconseja a Val¨¨rie Trierweiler que se case con Fran?ois Hollande

Desde que abandon¨® el El¨ªseo tras la derrota de Nicolas Sarkozy la pasada primavera, la cantante Carla Bruni hab¨ªa mantenido un perfil discreto. Volcada en la preparaci¨®n de su cuarto disco, que saldr¨¢ a la venta la primavera que viene, tan solo hab¨ªa hecho una aparici¨®n p¨²blica en televisi¨®n durante un concierto homenaje a Charles Aznavour. Sin embargo, Bruni ha decidido romper su silencio en una larga entrevista concedida a la revista Elle. En ella, la ex primera dama da algunos consejos a su sucesora en el palacio presidencial, Val¨¦rie Trierweiler, muy criticada por su temperamento explosivo y por mantenerse en activo como periodista, como el de casarse con el presidente Fran?ois Hollande para normalizar la relaci¨®n ante la opini¨®n p¨²blica.

¡°Solo hablo de mi experiencia, pero es m¨¢s simple ser la esposa leg¨ªtima del jefe de Estado que su compa?era¡±, relata Bruni, refiri¨¦ndose a la nueva inquilina del El¨ªseo, Val¨¦rie Trierweiler, compa?era sentimental de Hollande desde hace a?os, pero con el que no est¨¢ casada. ¡°La situaci¨®n es un poco confusa y la confusi¨®n no es aconsejable a ese nivel del Estado¡±, a?ade.

¡°Puede que me equivoque y que su opci¨®n sea moderna, pero por mi parte, sent¨ª un verdadero alivio de la preocupaci¨®n general respecto a mi persona cuando me cas¨¦ con Nicolas¡±, explica la exmodelo que contrajo matrimonio con el exmandatario en febrero de 2008, cuando este estaba ya en el El¨ªseo. En el momento de que la relaci¨®n Bruni-Sarkozy se dio a conocer, apenas unos meses tras la separaci¨®n oficial del expresidente con su entonces esposa Cecilia, a finales de 2007, la noticia fue tambi¨¦n acogida con cierto recelo por la opini¨®n p¨²blica. Bruni tuvo que renunciar a acompa?ar a Sarkozy en viaje oficial a India antes de contraer matrimonio por motivos de protocolo.

Sin querer entrar a ¡°juzgar¡± el caso del pol¨¦mico tuit de Trierweiler, el que fue sin duda el punto de partida de su creciente impopularidad ¨Cdurante las legislativas la primera dama manifest¨® su apoyo al socialista tr¨¢nsfuga que se opon¨ªa a la madre de los cuatro hijos de Hollande, S¨¦gol¨¨ne Royale-, Bruni se muestra m¨¢s bien comprensiva. ¡°Creo que simplemente no midi¨® la diferencia entre antes y despu¨¦s y eso es normal¡±, se?ala la cantante, que se gan¨® la opini¨®n favorable de los franceses a fuerza de interpretar el papel de perfecta esposa discreta que apoya a su marido contra vientos y mareas. ¡°Adem¨¢s, es periodista, dar su opini¨®n es su trabajo. Ahora ha entendido perfectamente d¨®nde se encuentra. ?Qui¨¦n no ha cometido errores en su vida?¡±.

Precisamente el doble papel de periodista y primera dama de Trierweiler, quien sigue escribiendo un par de cr¨®nicas mensuales en la revista Paris Match a la vez que dispone de un despacho en el El¨ªseo, es una de sus facetas m¨¢s comentadas, dado que muchos comentaristas consideran que hay conflicto de intereses. La postura es ¡°compleja¡±, admite Bruni, quien recuerda que ¡°incluso cultural, el periodista debe ser un contrapoder¡±.

En la entrevista, Bruni tambi¨¦n comenta el futuro de su marido y asegura que no cree en un regreso de Sarkozy a la pol¨ªtica, una posibilidad con la que especula media clase pol¨ªtica y la prensa. ¡°Su regreso me parece improbable, aunque yo no soy experta en movimiento pol¨ªticos¡±, asegura. ¡°Es ¨¦l quien decidir¨¢, son los franceses quienes decidir¨¢n¡±, a?ade. Aunque al mismo tiempo allana ya de alguna forma esa vuelta providencial a la primera plana de la pol¨ªtica, algo que el exmandatario habr¨ªa comentado estar dispuesto a hacer en caso de que fuera necesario. ¡°Sigo asombrada por el hecho de que los franceses se hayan privado de ¨¦l, de su energ¨ªa, de su visi¨®n, de su coraje, de su humanidad, de una inteligencia y de una voluntad con las suyas¡±, concluye.