Golpe al euro por receta

E Consejo de Estado considera que el cobro de un euro por receta, que se aplica en Catalu?a desde junio pasado y est¨¢ previsto implantarlo tambi¨¦n en la Comunidad de Madrid a partir de enero, es inconstitucional. Dos son las razones que esgrime el Consejo. La primera, que una comunidad aut¨®noma no puede incidir ¡°ni directa ni indirectamente en la fijaci¨®n de los precios de los medicamentos¡±, porque esa es una competencia exclusiva del Estado. Y segunda: que el cobro de un euro por receta introduce una desigualdad entre ciudadanos por el hecho de vivir en distintos territorios.

El Gobierno catal¨¢n ya ha dicho que ni se inmuta por el dictamen, pues tiene otro del ¨®rgano consultivo de la Generalitat que dice lo contrario: que el euro por receta no altera el precio del medicamento, porque es una tasa que se aplica a la receta, sutil distinci¨®n que de poco sirve a quienes han de pagarlo, pero que abre la puerta a una guerra de consejos consultivos.

?Qu¨¦ har¨¢ ahora Mariano Rajoy, quien hace poco declar¨® que no le gusta la medida? El Consejo consultivo ha emitido su dictamen a petici¨®n del Ministerio de Sanidad, que cuestion¨® en su momento la decisi¨®n del Parlamento catal¨¢n. Pero ahora es una comunidad gobernada por el PP la que se dispone a aplicarla.

Mucho se ha escrito ya sobre este copago que tambi¨¦n se califica de repago. El dictamen ha puesto el dedo en la llaga de la desigualdad territorial, pero no ha entrado en otra desigualdad que puede ser lacerante: cuando act¨²a como una tasa sobre la enfermedad, cuando penaliza especialmente a los ancianos y a quienes sufren patolog¨ªas cr¨®nicas. Tanto el Gobierno catal¨¢n como el de la Comunidad de Madrid han defendido que no tiene af¨¢n recaudatorio, sino disuasorio.

Efectivamente, la aportaci¨®n a las finanzas p¨²blicas es poco relevante. Puestos a buscar medidas para fomentar el uso racional de los medicamentos, algo muy deseable, hab¨ªa otras opciones menos injustas. Ya han salido los primeros indicios de que a quien disuade es a quienes tienen la doble desgracia de estar m¨¢s enfermos y ser m¨¢s pobres, aquellos a quienes les importa unos euros, porque no llegan a fin de mes y lo que pagan por las recetas deben restarlo de lo que gastan en butano.