El reconocimiento de Catalu?a
Mas debe plantearse el escenario de una independencia sin consenso en Espa?a
Nuestra sociedad, que est¨¢ muy avanzada en algunos aspectos, todav¨ªa no ha ca¨ªdo en la cuenta de la importancia de la prospectiva. Es preciso mirar al futuro para explorar hacia d¨®nde conducen las grandes tendencias y tambi¨¦n para calibrar los efectos de nuestros actos. Esta afirmaci¨®n general es v¨¢lida para el proyecto independentista que Artur Mas est¨¢ favoreciendo en Catalu?a, m¨¢s cerca de la rauxa que del seny.
Dicho proyecto ignora las consecuencias internacionales de una independencia contra la voluntad del estado, y esto supone una falta de previsi¨®n notable por parte de sus l¨ªderes. Se habla mucho sobre si una Catalu?a independiente estar¨ªa dentro o fuera de la Uni¨®n Europea, mientras que no se considera el paso previo para cualquier nuevo estado en la comunidad internacional: el reconocimiento.
En Derecho Internacional, el reconocimiento es un acto unilateral que realiza libremente un pa¨ªs por el cual acepta la creaci¨®n de otro a partir de entidades diversas (un pueblo colonial, un estado que se divide, varios que se fusionan, etc.). Tal reconocimiento es impresicindible porque ¨²nicamente la entidad con una aceptaci¨®n suficiente podr¨¢ participar en relaciones multilaterales, y acceder a organizaciones como la UE, Naciones Unidas, la OMC o el Consejo de Europa.
Si no cuentan con reconocimientos bastantes, los nuevos estados no podr¨¢n tener vida internacional
Los estados se definen por tres elementos constitutivos: territorio, poblaci¨®n y gobierno propio. Pero si, adem¨¢s, no cuentan con reconocimientos bastantes, estar¨¢n incapacitados para llevar a cabo una vida internacional en consecuencia. Pensemos en el caso de Taiwan, que cumple los tres primeros rasgos, pero disfruta de un reconocimiento muy limitado porque la mayor¨ªa de los estados entiende que es un pa¨ªs de origen artificioso que eventualmente terminar¨¢ formando parte de China.
Naciones Unidas cuenta hoy con 193 estados miembros. En la medida que el reconocimiento avance hacia ese n¨²mero, los nuevos estados pueden considerarse correctamente creados. Aqu¨ª hay que diferenciar varias situaciones. Existen nuevas entidades que han recibido un n¨²mero muy peque?o de reconocimientos, como por ejemplo Osetia del Sur, que declar¨® su independencia de Georgia en el verano de 2008. En un escal¨®n superior, aunque Taiwan mantiene relaciones diplom¨¢ticas con una veintena de estados, casi ninguno tiene una aut¨¦ntica relevancia internacional.
Subiendo un pelda?o m¨¢s, Kosovo cuenta con el reconocimiento de la mitad de los miembros de Naciones Unidas, pero esto tampoco le permite mantener unas relaciones normales. La declaraci¨®n unilateral de independencia con respecto a Serbia de febrero de 2008 fue apoyada por Estados Unidos y diversas potencias europeas, quienes calcularon una aceptaci¨®n mayoritaria del nuevo pa¨ªs. Sin embargo, a?os despu¨¦s, importantes actores como Brasil, China, India, M¨¦xico, Rusia, adem¨¢s de Espa?a y otros miembros de la UE, estiman que esa nueva entidad no debe ser considerada como independiente sino como parte de Serbia. En la zona superior de la escala, el r¨¢pido reconocimiento de nuevos candidatos permite su entrada en las instituciones internacionales, como ocurri¨® con Timor-Leste (miembro de Naciones Unidas desde 2002), Montenegro (2006) o Sud¨¢n del Sur (2011).
?Qu¨¦ estados europeos reconocer¨ªan una independencia definida unilateralmente?
Situaciones diferentes existen cuando los estados deciden reconocer entidades que no cuentan con los tres elementos constitutivos, como la Rep¨²blica ?rabe Saharaui Democr¨¢tica o Palestina, con el fin de manifestar su apoyo pol¨ªtico. Este reconocimiento de car¨¢cter ficticio puede tener no obstante consecuencias jur¨ªdicas internacionales, aunque tampoco permite una participaci¨®n normal en las relaciones globales.
La exigencia de reconocimiento aqu¨ª descrita deja sin duda varias cuestiones abiertas para los defensores de una Catalu?a independiente. Estas preguntas no son fruto de una toma de posici¨®n, sino que vienen dadas por la experiencia hist¨®rica, los imperativos del Derecho Internacional y la necesidad de la prospectiva. Desde luego, Artur Mas favorece la via unilateral y deber¨ªa plantearse los escenarios de futuro que abre esa exclusi¨®n del consenso en Espa?a. ?Qu¨¦ estados europeos reconocer¨ªan una independencia definida unilateralmente? ?Cabe pensar en una situaci¨®n de divisi¨®n en el seno de la UE como sucede con Kosovo? Fuera de Europa, ?en qu¨¦ pa¨ªses del mundo se apoyar¨ªa el movimiento independentista para buscar los primeros reconocimientos? ?Debe Artur Mas comenzar una campa?a internacional en este sentido? ?Se ha planeado qu¨¦ hacer si no se obtienen los reconocimientos suficientes para entrar en la UE y en la ONU? ?Qu¨¦ futuro espera a los ciudadanos de esa Catalu?a independiente al margen de las instituciones internacionales?
Mart¨ªn Ortega Carcel¨¦n es profesor de Derecho Internacional en la Universidad Complutense de Madrid.
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