El nuevo bel¨¦n
La tragedia del Madrid Arena ha puesto en jaque la apertura del rastrillo de Nuevo Futuro, que colinda con el pabell¨®n. Hasta que la infanta Pilar intervino
Esta vez la Iglesia cat¨®lica y su santidad el Papa han actuado de acuerdo a los tiempos: el bel¨¦n, como casi todo en Europa, se somete a recortes. Ni burra, ni vaca, ni ¨¢ngeles, y si se ponen muy estrictos, a lo mejor hasta ni Reyes Magos. Siempre se nos olvida que Benedicto, adem¨¢s de gran te¨®logo, tambi¨¦n es alem¨¢n, como Angela Merkel, y que de doctrina y disciplina sabe lat¨ªn.
Desde el barroco centroeuropeo, la ostentaci¨®n en la Iglesia es algo m¨¢s propio de aquellos bodorrios de antes que de los apresurados tiempos que vivimos. Por eso debemos celebrar la vuelta de campana del Papa con su decisi¨®n de reconvertir el bel¨¦n en una oda al minimalismo saj¨®n. Con su control del gasto y su d¨¦ficit cero. Todo viene bien documentado en el best-seller papal sobre la infancia de Jes¨²s que se publicar¨¢ urbi et orbe para la pr¨®xima campa?a de Navidad. Tampoco est¨¢n las cosas en Tierra Santa como para recrear una escena navide?a, que tambi¨¦n se nos olvida con frecuencia que Jesucristo naci¨® en un pesebre m¨¢s cerca de Gaza que de Wall Street. Y es que el camino que lleva a Bel¨¦n se hab¨ªa convertido en un ¨¦xodo hecho de r¨¢pidos viajes a Suiza de arist¨®cratas y pol¨ªticos auton¨®micos, un aqu¨ª cabe de todo, y cuanto m¨¢s, mejor, una liquidez desbordada, un maximalismo que seguro le pon¨ªa el terciopelo de punta a Benedicto XVI.
Desde luego, la decisi¨®n carece de diplomacia comercial. ?C¨®mo deben estar los grandes almacenes y las peque?as y medianas empresas de venta de souvenirs y merchandising navide?o! Clamando al cielo. El pr¨®ximo recorte fulminante ?ser¨¢ el fin de las cabalgatas? Ya lo predijo el Rey de verdad, Juan Carlos I: ¡°La crisis nos obligar¨¢ a cambiar muchas de nuestras m¨¢s arraigadas tradiciones¡±.
Los tr¨¢gicos sucesos del Madrid Arena han puesto en jaque la apertura del tradicional¨ªsimo Rastrillo de Nuevo Futuro. La Pipa, el simp¨¢tico recinto donde se congregan la caridad y el buen comer, no solo colinda con el tr¨¢gico Madrid Arena, sino que tampoco cumple las normativas de seguridad. Los madrile?os hemos visto a las se?oras de Nuevo Futuro hechas unos zorros temiendo que este a?o el rastrillo no tendr¨ªa futuro.
Do?a Pilar, la hermana del Rey, intervino como una infanta sabe hacerlo, presionando con bravura para que el Ayuntamiento solucionara. ¡°Se ha acelerado todo para que podamos abrir¡±, confirm¨® do?a Pilar. Los empleados municipales se vieron obligados a trabajar toda la noche. De labios de la alcaldesa no sabremos si hubo ri?a, porque ella solo habla lo que lee con much¨ªsima calma, pero queda demostrado que cuando se quiere, se puede. Y que do?a Pilar deber¨ªa postularse para la alcald¨ªa, ?por qu¨¦ no?
Siempre han existido tradiciones y belenes diferentes. Este a?o, en el hogar de los Urdangarin podr¨ªan hacer uno viviente, reservando especial sitio al abogado Pascual y la secretaria a prueba de fianzas Julita Cuquerella. El abogado se present¨® ante los periodistas con su inseparable casco, convirti¨¦ndose as¨ª en el Darth Vader de la abogac¨ªa catalana. El casco protector deja entrever que espera alg¨²n tortazo tanto fuera de la mansi¨®n de Pedralbes como dentro.
Porque resulta evidente que Pascual no acert¨® del todo en su estrategia de defensa. Presuntamente, convenci¨® a los duques de que regresar a casa les ganar¨ªa cierta solidaridad y que todo se normalizar¨ªa con el tiempo. Olvid¨® Pascual, y desde luego la acomodada pareja Urdangarin-Borb¨®n, que la crisis tiene a la gente muy quemada. No, se?or Pascual, lamentablemente este regreso no ha conquistado cari?o alguno para sus clientes. Una vez conocida la fianza de ocho millones, la prensa ha decidido convertir las inmediaciones de la mansi¨®n de Pedralbes en una mezcla de Bel¨¦n y Gaza ofreciendo un amplio surtido de im¨¢genes de la familia. La infanta saliendo, con la misma cara de desconcierto que las damas de Nuevo Futuro; los ni?os entrando aferrados a sus mochilas, y el duque paseando al perro en plena noche, quiz¨¢ la imagen mas desamparada que le hayamos visto ¨²ltimamente. El perro es blanco y casi brilla en la oscuridad, Urdangarin medio camina entre los focos, tanteando. El perro y su due?o parecen dos seres que han perdido el norte y el bel¨¦n.
Karl Lagerfeld, tambi¨¦n alem¨¢n, corta sobre todo trajes, una figura y estilo entre el siglo pasado y el que somos. Su presencia en la d¨¦cima entrega de los Prix de Marie Claire confirm¨® que es la mejor fiesta fuera o dentro de la burbuja. Todo es bueno y todo es divertido; para empezar, en la Embajada de Francia a¨²n no hay nuevo embajador, y quiz¨¢ eso hizo que la fiesta terminara hacia las tres de la madrugada.
M¨¢s que Lagerfeld, la estrella fue la fascinante presencia del director general de Lanc?me, Youcef Nabi, que fue presentado como Sue. Nabi naci¨® en Argel y el mundo de la belleza le transform¨® en mujer y directivo. Su apariencia es la de una bella y muy alta mujer y nada convencional jefe de una multinacional. ¡°Hay que vivir todos los riesgos¡±, pronunci¨®, sabiendo que todas las miradas estaban m¨¢s en ella que en el propio Lagerfeld. Ella s¨ª que es el nuevo futuro, pensamos muchos. Superaci¨®n personal y la perfecta alianza entre la cirug¨ªa y la alta cosm¨¦tica. El camino hacia el nuevo bel¨¦n.
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