Suspenso en igualdad de oportunidades

Ante el estupor colectivo, at¨®nito e indignado, una especie de revival macabro parece instalarse sigilosamente. No solo contin¨²a la avalancha de embestidas contra nuestro maltrecho Estado de bienestar, sino que se hace realidad una polarizaci¨®n social creciente en favor de quienes disponen de mayores niveles de renta. Todo ello en detrimento de los servicios p¨²blicos, que se van desmantelando a ritmo de real decreto con condimento privatizador.

Uno de los principales logros de los sistemas democr¨¢ticos en las sociedades desarrolladas es el progresivo afianzamiento de la igualdad de oportunidades como principio de referencia. Conviene recordar, en estos tiempos atribulados, que su implementaci¨®n supone el acceso igualitario a servicios p¨²blicos esenciales ¡ªcomo educaci¨®n, sanidad o protecci¨®n social¡ª, al mercado laboral y al desarrollo personal, con independencia de los condicionantes naturales o socioecon¨®micos, de origen o sobrevenidos a lo largo de un ciclo vital. Esta aspiraci¨®n concurrente, que informa la cohesi¨®n social, se construye sobre la consolidaci¨®n de derechos b¨¢sicos, el establecimiento de una serie de prestaciones universales y la provisi¨®n de medidas compensatorias para los m¨¢s desfavorecidos.

Sin embargo, en la rev¨¢lida de esta materia, Espa?a cosecha una baja puntuaci¨®n. A finales de 2010 nuestro pa¨ªs obtiene un 0,33 sobre 1 en el ¨ªndice sint¨¦tico de igualdad de oportunidades (ISIO), elaborado por la Fundaci¨®n IDEAS, que engloba variables relativas a educaci¨®n, mercado laboral, nivel de pobreza y de renta. Esto significa un empeoramiento de un 45,8% desde la crisis. Como consecuencia, la igualdad de oportunidades ha retrocedido a niveles de 1998. Es m¨¢s, acusa un descenso acelerado en los ¨²ltimos a?os a causa de las medidas de austeridad y recorte.

Tan dram¨¢tica situaci¨®n refleja, en gran parte, la reducci¨®n de las pol¨ªticas redistributivas para combatir las desigualdades generadas en un contexto de continuada recesi¨®n e incremento del desempleo. Se ha originado, por tanto, un profundo deterioro en t¨¦rminos de igualdad de oportunidades y, correlativamente, en los niveles de calidad de vida. Las pol¨ªticas de ajuste y los severos recortes agravan tanto tales efectos que cercenan el desarrollo futuro de una sociedad en la que los ciudadanos puedan impulsar sus proyectos personales de manera efectiva e igualitaria.

Espa?a podr¨ªa alcanzar 18 millones de pobres si los recortes se mantuvieran una d¨¦cada

Diferentes estudios publicados recientemente coinciden en destacar aspectos especialmente alarmantes relacionados con el incremento del riesgo de exclusi¨®n social en nuestro pa¨ªs. As¨ª, Unicef-Espa?a, al analizar el impacto de la crisis en los ni?os, llamaba la atenci¨®n sobre el elevado nivel de pobreza infantil alcanzado en 2010 (26,2% de la poblaci¨®n menor de edad) y el paulatino agravamiento de su intensidad. Por su parte, Foessa y C¨¢ritas Espa?ola, o la Fundaci¨®n Encuentro, en la valoraci¨®n de la realidad social de 2012, alertan sobre la p¨¦rdida de capacidad de igualaci¨®n social que ven¨ªa desempe?ando la educaci¨®n. Esto se produce, fundamentalmente, como consecuencia del retroceso en algunos derechos sociales b¨¢sicos mediante recortes indiscriminados impuestos por un modelo de marcado corte neoliberal. Tambi¨¦n, de manera especialmente ostensible, en el ¨¢mbito sanitario, donde los m¨¢s d¨¦biles est¨¢n empezando a sufrir ya de modo dram¨¢tico las peores secuelas.

Ni siquiera hemos aprendido de las fallidas experiencias del pasado. En opini¨®n de Intermon-Oxfam, Espa?a podr¨ªa alcanzar los 18 millones de pobres en una d¨¦cada (casi el 40% de la poblaci¨®n) si se mantienen las imperantes medidas de austeridad y los recortes sociales, tal y como sucedi¨® en Am¨¦rica Latina y el Este Asi¨¢tico en los a?os ochenta y noventa, lo que supondr¨ªa retardar 25 a?os la recuperaci¨®n del nivel de bienestar social anterior a la crisis.

Para combatir el suspenso espa?ol en igualdad de oportunidades, la Fundaci¨®n IDEAS, en su trabajo El persistente reto de la igualdad de oportunidades en Espa?a, aboga por una intervenci¨®n p¨²blica reactivadora que incida positivamente en la movilidad social de los individuos, tanto intergeneracional como intrageneracional. Un Estado proactivo proporcionar¨¢ alternativas y soluciones que se adelanten a las posibles situaciones de desigualdad y eliminen las ya existentes. Tal acci¨®n ha de conjugar medidas predistributivas ¡ªdirigidas a que el entorno inmediato de una persona no condicione sus posibilidades ulteriores¡ª, con acciones correctoras redistributivas, que aseguren que las opciones de progreso no est¨¦n obstruidas por circunstancias espec¨ªficas de vulnerabilidad. Esa combinaci¨®n cobra especial significado en la actualidad, cuando es prioritario dar respuesta a las necesidades m¨¢s perentorias de una parte de la sociedad aquejada por las demoledores consecuencias de la crisis y el tipo de pol¨ªticas de austeridad que se aplican.

Est¨¢ en juego el tipo de sociedad hacia el que avanzamos y el impacto sobre las pr¨®ximas generaciones. Por ello, la apuesta estrat¨¦gica de futuro sit¨²a las oportunidades efectivas e iguales de todas las personas en el centro de la acci¨®n p¨²blica.

?Irene Ramos es responsable de Pol¨ªtica, Ciudadan¨ªa e Igualdad de la Fundaci¨®n IDEAS.