La UE y Am¨¦rica Latina: socios mundiales para el siglo XXI

La Cumbre de Santiago, que se celebra hoy y ma?ana entre la Uni¨®n Europea y la nueva Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe re¨²ne a dirigentes de 60 pa¨ªses de ambas regiones. La Cumbre tiene lugar en un momento decisivo para ambas partes. La econom¨ªa mundial ha atravesado tiempos dif¨ªciles y ambas regiones pueden desempe?ar un papel fundamental en el restablecimiento de un crecimiento fuerte y sostenible a nivel mundial.

Estamos superando una etapa de la crisis financiera, que ha afectado gravemente a la econom¨ªa de la Uni¨®n Europea. Nuestra respuesta a la crisis ha sido decisiva, y la competitividad y la confianza se est¨¢n restableciendo paulatinamente. Hemos tomado las duras, aunque necesarias, decisiones que impedir¨¢n que problemas semejantes se den en el futuro. Nuestros pa¨ªses est¨¢n emprendiendo reformas estructurales sin precedentes y estamos reforzando nuestra gobernanza econ¨®mica a nivel de la Uni¨®n. A pesar de esta crisis, la Uni¨®n Europea sigue siendo la mayor econom¨ªa del mundo y un socio indispensable para la comunidad Internacional en el fomento de la paz, la democracia y el respeto de los derechos humanos, as¨ª como para el desarrollo, la erradicaci¨®n de la pobreza y la protecci¨®n de bienes comunes a nivel mundial tales como el clima. La perspectiva para el futuro es de una mayor integraci¨®n y este es el camino que hemos venido dise?ando estas dos ¨²ltimos a?os.

?Am¨¦rica Latina y el Caribe est¨¢n viviendo tambi¨¦n cambios profundos, si bien de car¨¢cter distinto. Gobiernos y ciudadanos se encuentran ante decisiones que determinar¨¢n la futura senda de desarrollo de sus pa¨ªses en las pr¨®ximas d¨¦cadas. En gran parte de la regi¨®n los ¨²ltimos a?os han sido de fuerte crecimiento econ¨®mico. Cerca de 50 millones de personas han salido de la pobreza. La democracia ha seguido consolid¨¢ndose y tambi¨¦n se ha reforzado la voz de la regi¨®n en los asuntos internacionales. Siguen existiendo, sin embargo, enormes desaf¨ªos en los ¨¢mbitos de pobreza, la desigualdad, la seguridad o en cuestiones medioambientales. La abundancia de recursos naturales ha resultado un activo para algunos pa¨ªses, pero s¨®lo un modelo econ¨®mico m¨¢s diversificado sostendr¨¢ el crecimiento a largo plazo.

En este contexto, la Cumbre de Santiago llega en un momento en el que la relaci¨®n es m¨¢s importante que nunca. Su tema central es tanto un reto como un llamamiento: una "alianza por el desarrollo sostenible; fomentar inversiones de calidad desde el punto de vista social y medioambiental". Este tema hace que la atenci¨®n se centre en un pilar decisivo de la relaci¨®n. La Uni¨®n Europa representa no menos del 43% del volumen total de Inversi¨®n Extranjera Directa (IED) en Am¨¦rica Latina y el Caribe. Y a pesar de la dif¨ªcil situaci¨®n econ¨®mica, los flujos anuales de IED de la Uni¨®n Europea a la regi¨®n alcanzaron en 2011 niveles record. ?Cu¨¢nta gente es consciente de que la IED europea es mayor en Am¨¦rica Latina y el Caribe que en Rusia, China y la India tomadas en conjunto?

Nuestra ya larga asociaci¨®n ha constituido una aut¨¦ntica comunidad de valores

Sin embargo, no s¨®lo se trata de cantidad. Tambi¨¦n se trata de calidad. Para que el desarrollo sea sostenible, debe ser integrador, debe crear empleos dignos. Para los pa¨ªses de Am¨¦rica Latina y el Caribe que siguen un modelo de crecimiento m¨¢s sostenible e integrador, las inversiones europeas destacan en cantidad y calidad. Ya est¨¢n contribuyendo de distintos modos a una mayor competitividad y a un desarrollo social. Esta inversi¨®n, altamente diversificada, no se limita al ¨¢mbito de los recursos. Las empresas europeas son el origen de casi dos tercios de todos los proyectos de inversi¨®n en I+D en la regi¨®n. Las inversiones en sectores como la energ¨ªa el¨¦ctrica contribuyen a la prestaci¨®n de servicios p¨²blicos esenciales a grandes sectores de la poblaci¨®n. Las empresas europeas presentes en la regi¨®n suelen ser pioneras en t¨¦rminos de compromiso del sector privado con la protecci¨®n del medio ambiente y las normas laborales. Las maneras de fomentar una mayor cooperaci¨®n sobre responsabilidad social de la empresa ser¨¢n un tema importante de los debates de Santiago.

Sin embargo, la Cumbre de Santiago tratar¨¢ tambi¨¦n de cuestiones que van m¨¢s all¨¢ de la inversi¨®n, como lo refleja el hecho de que nuestra ya larga asociaci¨®n siempre ha constituido una aut¨¦ntica comunidad de valores, en el ¨¢mbito de la democracia, los derechos humanos y la cohesi¨®n social. Se debatir¨¢ sobre la igualdad entre hombres y mujeres, que se convertir¨¢ en un nuevo pilar del plan de acci¨®n com¨²n que gu¨ªa nuestra cooperaci¨®n entre cumbres bienales. Exploraremos v¨ªas para colaborar m¨¢s estrechamente sobre los desaf¨ªos de seguridad, por ejemplo sobre el mejor modo de apoyar la estrategia regional desarrollada por los pa¨ªses de Centroam¨¦rica. Europa y Am¨¦rica Latina y el Caribe. Tenemos tambi¨¦n un inter¨¦s com¨²n en buscar modos de colaborar m¨¢s estrecha y eficazmente en las organizaciones multilaterales, por ejemplo, en materia de cambio clim¨¢tico y de desarrollo sostenible.

La Uni¨®n Europea mantiene su firme compromiso de apoyar el desarrollo econ¨®mico y social de Am¨¦rica Latina y el Caribe. El impresionante progreso econ¨®mico de la regi¨®n supone que debamos debatir con algunas de sus econom¨ªas m¨¢s din¨¢micas nuevas formas de cooperaci¨®n, que sustituyan a las relaciones donante-receptor del pasado.

Es conocido que el poeta mexicano Octavio Paz afirm¨® en una ocasi¨®n que Am¨¦rica Latina "no es tanto una tradici¨®n que continuar, como un futuro que realizar". Esta afirmaci¨®n recoge tambi¨¦n con nitidez el potencial y el dinamismo de nuestra asociaci¨®n entre la Uni¨®n Europea y la nueva Comunidad de Estados de Am¨¦rica Latina y el Caribe.

Esta asociaci¨®n refleja tambi¨¦n la convicci¨®n de que en el mundo interdependiente de hoy, la cooperaci¨®n es imprescindible para enfrentarse a retos que nos son comunes. Cada parte aporta su propria experiencia y capacidades. Compartimos conocimientos y nuestras acciones se complementan y refuerzan rec¨ªprocamente. Estos principios orientar¨¢n nuestros debates en Santiago, al tratar de paz y seguridad en el mundo, al discutir sobre cuestiones econ¨®micas y sociales, y sobre democracia o desarrollo.

Herman Van Rompuy es presidente del Consejo Europeo y Jos¨¦ Manuel Barroso es presidente de la Comisi¨®n Europea.