Famosos adictos al pan
Personajes del ¨¢mbito cultural, gastron¨®mico y econ¨®mico ensalzan las virtudes de un producto que alimenta sus recuerdos Un libro recoge sus idilios con la masa madre
?En qu¨¦ se parecen una baguette, una focaccia, o la masa de una pizza? Pues en que, independientemente de su forma, sabor y textura, al fin y al cabo todos son pan. Palabra de Ferran Adri¨¤. El cocinero catal¨¢n es el encargado de prologar y aclamar las bondades de este alimento en el libro Locos por el pan. Pan¨¢ticos (editado por Lunwerg). De le?a, de pay¨¦s, baguette, con aceitunas, nueces, pipas, semillas o sobrasada¡ hay unas 350 variedades en el mercado. Si los ni?os nacen con un pan debajo del brazo, los veintis¨¦is personajes del mundo de la cultura, econ¨®mico o el deportivo que aparecen en este libro nunca lo han soltado. En ¨¦l desvelan con qu¨¦ acompa?an su pan favorito y sus recuerdos y an¨¦cdotas al pensar en este alimento de harina, levadura, agua y sal.
Entrar en una panader¨ªa e inspirar para alimentarse con el olor, ir a comprar el pan y que llegue a casa sin los curruscos, apretarlo cerca de la oreja para escuchar como cruje... son escenas tan cotidianas como el mismo alimento que las protagoniza. El actor, c¨®mico y presentador Jos¨¦ Corbacho confiesa ser un adicto al pan desde la infancia, capaz incluso de com¨¦rselo con la fruta y de ped¨ªrselo a escondidas a Ferran Adri¨¤ en su restaurante El Bulli: ¡°Entre tantos platos creativos e innovadores ten¨ªa la necesidad de agarrarme a un sabor tradicional¡±. Otra adicta es la escritora Rosa Montero, quien confiesa comerse una barra entera casi sin darse cuenta.
En los ¨²ltimos a?os el pan se ha 'gourmetizado', con decenas de 'boutiques' que han aparecido por todo el pa¨ªs
Carles Sans, uno de los tres miembros del Tricicle, lleg¨® a preguntar en un restaurante la direcci¨®n de su panadero para ir a felicitarle y de paso hacer unas compras. Una an¨¦cdota m¨¢s: el pan casi nos deja sin los libros de Javier Moro, quien se hubiese convertido en panadero si su novela Pasi¨®n india no hubiese sido un ¨¦xito. Loquillo, Martina Klein, Tot¨®n Comella, Josep Carreras, Rosa Tous o Carlos Ferrater tambi¨¦n comparten plano con el pan en las p¨¢ginas del libro, del que una frase de Cayetana Guill¨¦n Cuervo resume su filosof¨ªa: ¡°Una mesa sin pan est¨¢ incompleta¡±.
En los ¨²ltimos a?os el pan se ha gourmetizado, con decenas de boutiques que han aparecido por las ciudades de todo el pa¨ªs. El cocinero Carles Gaig, para quien este producto ¡°es el primer pensamiento a la hora de preparar la cena¡±, est¨¢ orgulloso de que el negocio del sector panadero haya vuelto a las manos de quienes aman su oficio. Pero el economista de las explicaciones claras Leopoldo Abad¨ªa, con 12 hijos y 44 nietos a los que llena con pan, advierte en el libro: ¡°El hecho de que alrededor de mi casa haya hasta siete establecimientos con servicio de panader¨ªa da que pensar¡±.
Una moda que ha ayudado a los amantes del pan a atreverse con otros sabores, como el pan de trufas elegido como su favorito por la dise?adora Amaya Arzuaga o el pan de cerveza del periodista y escritor M¨¤rius Carol. Pero m¨¢s all¨¢ de tiendas bonitas con los productos m¨¢s llamativos, la clave est¨¢ en encontrar ese establecimiento que no utilice los ingredientes para enmascarar un mediocre sabor del pan ¨Cy, por supuesto, en huir de las gasolineras, los supermercados y las tiendas 24 horas¨C. El libro, impulsado por el horno artesano l¡¯Obrador que destinar¨¢ todos los beneficios de su venta a la Fundaci¨®n Banco de Alimentos y la Fundaci¨®n Josep Carreras contra la leucemia, reivindica la importancia de la panader¨ªa artesana. As¨ª que tambi¨¦n ofrece consejos para amasar el pan y facilita varias recetas. No se puede olvidar que su elecci¨®n puede marcar la diferencia en algo tan simple como un bocadillo de jam¨®n. Para su ¨¦xito, ¡°el pan es tan importante y debe ser tan bueno como el jam¨®n¡±. Palabra de Ferran Adri¨¤.
Descubre m¨¢s an¨¦cdotas panaderas aqu¨ª.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.