La buena/mala fama de Olvido
La concejal socialista de Los Y¨¦benes que despert¨® una ola de solidaridad tras difundirse un video ¨ªntimo, dimite ahora para explotar su notoriedad
Las vueltas que puede llegar a dar la fama. Olvido Hormigos ha vuelto al candelero medi¨¢tico, pero esta vez ya no parece despertar tantas simpat¨ªas. La concejal socialista de Los Y¨¦benes (Toledo, 6.400 habitantes) recibi¨® una oleada de solidaridad en septiembre del a?o pasado despu¨¦s de que se hiciera tristemente famosa por la difusi¨®n ileg¨ªtima de un v¨ªdeo ¨ªntimo en el que aparec¨ªa desnuda d¨¢ndose placer. El v¨ªdeo lo hab¨ªa grabado ella misma y lo hab¨ªa enviado a alguien de su confianza, pero acab¨® en los tel¨¦fonos y ordenadores de todo el pueblo trav¨¦s de WhatsApp.
Sobrepasada por la repercusi¨®n del v¨ªdeo, que r¨¢pidamente se extendi¨® por la Red, la edil decidi¨® dimitir, pero los muchos mensajes de apoyo que recibi¨®, la disuadieron. Mensajes de todos los colores, desde el de su correligionaria Elena Valenciano al de la expresidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, del PP, que tuite¨®: ¡°En defensa de tu intimidad, no dimitas¡±. A los ojos de sus compa?eros de partido y de muchas mujeres, hab¨ªa sido v¨ªctima de alguien que la quer¨ªa muy mal, y aunque en el debate suscitado tambi¨¦n hubo quien le advirti¨® de que si no quer¨ªa correr riesgos, ciertas intimidades era mejor no grabarlas y menos enviarlas, Olvido Hormigos logr¨® darle la vuelta al suceso y convertirse en un icono de la intimidad asediada.
Muchos de quienes la apoyaron se han llevado ahora un chasco, porque Olvido Hormigos ha dimitido finalmente, pero no para defender su intimidad, sino para poder explotar mejor la fama que de forma tan imp¨²dica logr¨® gracias a la difusi¨®n del v¨ªdeo. El pasado 15 de frebrero dej¨® su acta de concejal y su militancia en el PSOE para participar en un reality show.
El viraje se ha consumado con la publicaci¨®n en la revista Intervi¨²de un extenso reportaje gr¨¢fico en el que muestra sus desnudas intimidades, aunque esta vez de forma premeditada y hasta remunerada. La ola de solidaridad se ha evaporado y aunque cualquiera puede hacer con su vida y con su cuerpo lo que le plazca, siempre que no da?e a terceros, Olvido Hormigos dif¨ªcilmente podr¨¢ volver a ser un s¨ªmbolo que defender, aunque del episodio habr¨¢ quedado algo positivo: el debate sobre c¨®mo tratar la difusi¨®n no consentida de im¨¢genes ¨ªntimas.
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