Si no hay testamento, se lo queda Carlos

El muy democr¨¢tico Reino Unido sigue sorprendiendo con sus ancestrales legados feudales. Ahora se ha sabido que el pr¨ªncipe de Gales, que es tambi¨¦n duque de Cornualles, tiene derecho a quedarse con las herencias de las personas de la zona de Cornualles que fallecen sin hacer testamento y que no tienen herederos conocidos, que en el resto del reino pasan directamente a engrosar las arcas de la Hacienda p¨²blica.

El pr¨ªncipe Carlos recibi¨® por este concepto un total de 450.000 libras (unos 530.000 euros) y otras 90.772 libras por los rendimientos anuales del capital acumulado con el tiempo por el llamado Fondo Ben¨¦fico del Duque de Cornualles, seg¨²n los datos de las cuentas anuales del a?o pasado publicados por el diario The Guardian. Es decir, en total, el fondo registr¨® en 2012 unos ingresos de 540.772 libras (casi 640.000 euros), que se suman a los m¨¢s de tres millones de libras acumulados hist¨®ricamente, lo que eleva la cantidad de dinero feudal del heredero de la corona brit¨¢nica a 3,33 millones de libras (casi cuatro millones de euros).

Una cantidad bastante respetable, pero que queda lejos de los 18 millones de libras (21,3 millones de euros) de ingresos privados adicionales al a?o que le genera el t¨ªtulo de duque de Cornualles. La definici¨®n de ingresos privados es, sin embargo, relativa porque no es el ciudadano Carlos Windsor quien los recibe. Cuando el pr¨ªncipe de Gales se convierta en rey, ser¨¢ el nuevo pr¨ªncipe de Gales, su hijo Guillermo, quien herede el ducado de Cornualles, con sus privilegios feudales incluidos.

De hecho, el pr¨ªncipe no utiliza para s¨ª mismo ese dinero feudal, que en teor¨ªa se destina ¨ªntegramente a financiar sus numerosas actividades caritativas. El del a?o pasado ha sido un ejercicio de contenci¨®n. Frente a los citados ingresos de 450.000 libras, el fondo ha repartido subvenciones por tan solo 100.000 libras. En 2011, en cambio, se repartieron subvenciones por 150.000 libras pese a que los ingresos se quedaron en 135.000 de los que tan solo 50.800 libras proced¨ªan de las herencias no testadas de la regi¨®n de Cornualles.

Las donaciones del fondo son de cantidades muy modestas. En 2012, 32 de ellas fueron inferiores a las 1.000 libras cada una y otra treintena de organizaciones recibieron justo 1.000 libras (cerca de 1.200 euros). El grueso de la ayuda ha sido para Business in The Community, una organizaci¨®n ben¨¦fica presidida por el propio Carlos que promueve los negocios sostenibles y que el a?o pasado recibi¨® casi 23.000 euros del dinero feudal del pr¨ªncipe. Las ruinas de la casi milenaria abad¨ªa galesa de Strata Florida se beneficiaron con una ayuda de 5.900 euros.

La misma cantidad recibi¨® la escuela de Gordonstoun, en Edimburgo, en la que el pr¨ªncipe Carlos estudi¨® en su adolescencia y donde antes hab¨ªa estudiado su padre, el duque de Edimburgo. Es una cantidad insignificante al lado de los 35.500 euros que paga cada alumno por la matr¨ªcula anual, pero no deja de ser una donaci¨®n sorprendente porque es conocido que el heredero de la corona guarda muy mal recuerdo de aquellos a?os. Carlos lleg¨® a definir su estancia all¨ª como ¡°pena de c¨¢rcel¡±. Su abuela, la reina madre, escribi¨® en 1961 a Isabel II para pedirle que su nieto fuera trasladado a Eton, a tiro de piedra del palacio de Windsor, donde la familia real pasa gran parte de su tiempo. Pero la reina se ocupaba de las cosas de Estado y era el pr¨ªncipe Felipe quien estaba al cargo de las decisiones familiares.

Las donaciones caritativas de Carlos no son exactamente neutrales. Entre los beneficiados el a?o pasado estaba la Prince¡¯s Foundation for Building Communities, que comparte las ideas del heredero en materia de arquitectura y ordenaci¨®n urban¨ªstica.