Proceso a las cajas

La decisi¨®n del juez Elpidio Jos¨¦ Silva de dictar prisi¨®n provisional eludible ¡ªeludida desde ayer por la tarde¡ª bajo fianza de 2,5 millones contra Miguel Blesa, expresidente de Caja Madrid, no desentona de la pr¨¢ctica procesal com¨²n, pero incluye elementos que mueven a la reflexi¨®n.

El juez tiene capacidad para decidir el encarcelamiento si el delito investigado puede dar lugar a penas de c¨¢rcel superiores a los dos a?os o si aprecia riesgos de fuga o destrucci¨®n de pruebas. En este caso, el juez ha encontrado indicios de los que se desprende bien administraci¨®n desleal o bien apropiaci¨®n indebida y falsedad de documento p¨²blico en la compra, por parte de Caja Madrid, del City Nacional Bank de Florida.

Est¨¢ en juicio la p¨¦sima gesti¨®n de una de las primeras entidades financieras espa?olas, gesti¨®n en la que se mezclaron estrategias incompetentes con la intervenci¨®n permanente de las autoridades de la Comunidad de Madrid, consejeros colocados a dedo que no le¨ªan las auditor¨ªas con empresarios y sindicalistas percibiendo retribuciones por tareas para las que no estaban cualificados. Pero la cuesti¨®n principal es si la investigaci¨®n de la compra del CNB de Florida conducir¨¢ a demostrar causas y responsables de esa quiebra o si se acabar¨¢ dando por buena la idea de que las p¨¦rdidas de la caja por la adquisici¨®n (unos 500 millones) son solo el resultado de un precio estrat¨¦gico err¨®neo, pero no doloso. Porque otras entidades bancarias y empresas han adquirido activos a precios muy superiores a los de mercado con el fin de obtener ventajas de futuro (cuotas de mercado, dominio regional), y sus expectativas se han frustrado a posteriori, despu¨¦s de una crisis financiera que no se supo anticipar. Tambi¨¦n estas entidades han tenido que arrostrar enormes p¨¦rdidas.

El juez sigue los protocolos de evitar la fuga, atar al imputado al proceso mediante una fianza elevada y evitar la destrucci¨®n de pruebas. El instructor debe evitar en lo posible los adjetivos; el auto, sin embargo, abunda en ellos, lo cual puede dar motivo a recusaciones. Califica de ¡°aberrante¡± que Caja Madrid adquiriera el banco de Florida en pleno tsunami financiero y se explaya ir¨®nicamente en torno a la ¡°tormenta perfecta¡± que hizo zozobrar la caja; no fue el clima, dice el juez, sino el proceder de su presidente y la falta de controles adecuados de riesgos; pero no se citan indicios de desv¨ªo de fondos o de cobro de comisiones ilegales.

Es deseable que la crisis de Caja Madrid, que le ha costado de forma directa o indirecta m¨¢s de 40.000 millones a los ciudadanos, no pase inadvertida e impune. Para ello, es crucial que la compra del banco norteamericano o del cr¨¦dito a D¨ªaz Ferr¨¢n se investiguen exhaustivamente, exigencia que quiz¨¢ no sea compatible con la rapidez; y que el proceso de fusi¨®n de Caja Madrid o su salida a Bolsa tambi¨¦n se analicen judicialmente con toda la atenci¨®n que se merecen.