Ofensiva contra las viejas glorias tras el fracaso de Bonnie Tyler

Han pasado cinco d¨ªas y todav¨ªa se habla del asunto. Un a?o m¨¢s el Reino Unido asiste a la misma secuencia. Que arranca con un desinter¨¦s que roza el desd¨¦n por todo lo relacionado con Eurovisi¨®n y termina con el representante nacional relegado a la cola de la clasificaci¨®n y el orgullo patri¨®tico brit¨¢nico magullado. ?C¨®mo puede se puede ignorar as¨ª a una naci¨®n tan influyente en la historia de la m¨²sica? se preguntan los brit¨¢nicos ech¨¢ndose las manos a la cabeza.

Esta ocasi¨®n con Bonnie Tyler como enviada no fue diferente. Las expectativas ya distaban de ser halag¨¹e?as. En la calle apenas sonaba Belive In Me, la canci¨®n elegida por la cantante galesa y las apuestas no la se?alaban como favorita. La propia Tyler se compar¨® con un cordero antes del sacrificio. Nada mell¨® la profesionalidad de la artista en Suecia, que se hizo fotos con los fans, atus¨® su melena y aguant¨® el tipo en el escenario compensando las iniciales notas falsas con sonrisas de estrella experimentada. Tyler termin¨® en el puesto 19 de un total de 26 pa¨ªses, con solo 23 puntos frente a los 281 de la ganadora Emmelie de Forest.

¡°S¨¦ que muchos se han sentido decepcionados pero he disfrutado de la experiencia. Hice todo lo que pude¡±, declar¨® una optimista despu¨¦s de la gala Tyler, que en 1993 hab¨ªa rechazado la oferta de participar en la competici¨®n.

Con la resaca eurovisiva llegaron los golpes en el pecho y la b¨²squeda de explicaciones. La justificaci¨®n m¨¢s com¨²n es atribuir el descalabro anual a las alianzas t¨¢citas entre pa¨ªses, que dejan al Reino Unido en desventaja. La canci¨®n, que seg¨²n algunos no fue lo suficientemente memorable y estaba en un registro demasiado bajo, tambi¨¦n se llev¨® parte de culpa. Johnny Logan, que consigui¨® el trofeo tres veces para Irlanda, declar¨® que no ten¨ªa la calidad suficiente porque la mala prensa del evento ha provocado que los buenos compositores dejen de involucrarse (en realidad Belive In Me iba a ser parte del pr¨®ximo disco de Tyler hasta que la BBC le propuso retrasar el lanzamiento y participar en el concurso).

Otra raz¨®n popular para explicar que una naci¨®n con tanta cultura musical no gane Eurovisi¨®n desde 1997 es el empe?o de la BBC de ignorar las nuevas generaciones de artistas. Desde el Daily Telegraph proponen con humor enviar a alguien ¡°alejado de la edad de jubilaci¨®n. O mandar tanques¡±. Las elecciones de Tyler y Engelbert Humperdinck ¡ªel representante de la edici¨®n anterior que termin¨® pen¨²ltimo¡ª han demostrado que los discos de oro y la veteran¨ªa no son armas ¨²tiles en una competici¨®n donde muchos de los implicados y espectadores son demasiado j¨®venes o con un bagaje musical demasaido diferente para reconocer a la int¨¦rprete del ¨¦xito Total Eclipse of The Sun. La soluci¨®n podr¨ªa hallarse en Twitter. La artista de electropop Little Boots ha expresado con un comentario en la red social su deseo de participar el pr¨®ximo a?o. El presentador de la gala Graham Norton le contest¨® a trav¨¦s de este medio que recibir¨¢ una llamada.