?Sabes qu¨¦ pescado est¨¢s comiendo?

Por Guillermo Prudencio, comunicaci¨®n de WWF

A los espa?oles nos gusta comer pescado, mucho pescado: comemos, de media, 27 kilos al a?o. Es una cifra que nos sit¨²a entre los pa¨ªses del mundo que consumen con mayor avidez el alimento que nos proveen los oc¨¦anos. Unos oc¨¦anos que, aunque parec¨ªan inagotables, est¨¢n cada vez m¨¢s vac¨ªos: seg¨²n datos de la Comisi¨®n Europea, un 39 % de las pesquer¨ªas evaluadas en el Atl¨¢ntico y un 88 % de las mediterr¨¢neas se encuentran sobreexplotadas.

Y la demanda de pescado de la humanidad no para de crecer, impulsada en gran medida por los pa¨ªses emergentes como China. En mayo el ¨ªndice global de precios del pescado que elabora la FAO bati¨® un nuevo r¨¦cord, tras subir un 15% respecto al a?o pasado. Una demanda en crecimiento que contrasta con unas pesquer¨ªas en crisis. Una cosa parece clara: las pesquer¨ªas, y con ellas el sustento de m¨¢s de mil millones de personas en todo el mundo, van directas al colapso si seguimos esquilmando el mar como hasta ahora.

Son hechos que cualquier consumidor responsable deber¨ªa conocer y tener en cuenta a la hora de hacer su compra en la pescader¨ªa. La cesta de la compra es nuestra mayor arma para asegurar el futuro de los oc¨¦anos, y con ellos el futuro de la pesca. ?Pero sabes lo que hay detr¨¢s de lo que compras cuando vas a la pescader¨ªa? ?Sabes qu¨¦ pescado est¨¢s comiendo?

Aunque es un derecho b¨¢sico de los consumidores, la informaci¨®n disponible sobre el pescado que comemos suele ser escasa, imprecisa, o a veces directamente inexistente. Conocer el lugar de captura o el m¨¦todo utilizado es b¨¢sico. Para ayudar a los consumidores, desde WWF Espa?a hemos lanzado la Gu¨ªa de pescado para un consumo responsable, que puede ayudarnos a hacer una compra m¨¢s informada y consciente en la pescader¨ªa.

La gu¨ªa es un term¨®metro que ir¨¢ variando con los nuevos datos cient¨ªficos, con las nuevas evaluaciones y con las mejoras puestas en marcha por el sector y la Administraci¨®n. La diferencia con otras gu¨ªas de consumo de pescado es que no s¨®lo se tiene en cuenta el estado de la poblaci¨®n de la especie; tambi¨¦n el impacto ecol¨®gico del arte de pesca utilizada y si la pesquer¨ªa de la que procede cuenta con un modelo de gesti¨®n sostenible y transparente. Son los principios del MSC, un sello que asegura la sostenibilidad ambiental de los productos del mar.

El sello MSC es una de las mejores garant¨ªas que podemos encontrar para realizar una compra responsable de pescado y marisco y, aunque en Espa?a a¨²n estamos lejos de pa¨ªses como Alemania ¨Cdonde el 50% de los productos pesqueros del mercado est¨¢n certificados-, se han producido avances en los ¨²ltimos a?os. Ya hay incluso dos pesquer¨ªas certificadas con MSC en aguas espa?olas: las navajas de la r¨ªa de Pontevedra, de la Cofrad¨ªa de San Marti?o de Bueu, y las almejas y berberechos de la r¨ªa de Arousa. Algunas empresas pesqueras de la flota espa?ola ya han certificado sus pesquer¨ªas en otros oc¨¦anos, y varias est¨¢n en el proceso de realizarlo.  

Hay m¨¢s ejemplos de que las cosas avanzan positivamente en el sector pesquero. Un 39 % de caladeros sobreexplotados en el Atl¨¢ntico puede parecer una cifra alta, pero en 2005 est¨¢bamos en un escalofriante 95 %. La mejora de la situaci¨®n del emblem¨¢tico at¨²n rojo del Atl¨¢ntico y del Mediterr¨¢neo tambi¨¦n nos muestra que incluso en estados de extrema gravedad podemos reaccionar y cambiar la tendencia. Importantes pesquer¨ªas europeas tienen planes de recuperaci¨®n que est¨¢n funcionando, y se han tomado medidas de control de la flota. Pero esos cambios deben ser m¨¢s r¨¢pidos y m¨¢s profundos si queremos asegurar el futuro del mar.

Para conseguirlo es imprescindible que como consumidores incentivemos a aquellos pescadores, mariscadores o acuicultores que realizan su labor de manera m¨¢s sostenible. Nuestras elecciones de consumo tienen un papel fundamental para que los tonos rojos y ¨¢mbar que predominan en esta gu¨ªa -como en otras muchas- pasen al verde. Debemos ser conscientes de que al hacer la compra en la pescader¨ªa estamos incidiendo en la sostenibilidad de recursos de aqu¨ª y de otros lugares lejanos.