Hay vida bajo el hielo eterno
El lago Vostok guarda un tesoro biol¨®gico bajo una capa helada de cuatro kil¨®metros de espesor
La ciencia no ha tenido la oportunidad de buscar vida en Europa, la luna de J¨²piter cuyas aguas subterr¨¢neas figuran como uno de los lugares m¨¢s prometedores del sistema solar para encontrarla. Pero, mientras llega ese momento, tal vez lo m¨¢s parecido a un ensayo general sea la investigaci¨®n sobre uno de los lugares m¨¢s remotos y solitarios de nuestro propio planeta: el lago Vostok de la Ant¨¢rtida, el mayor dep¨®sito conocido de agua subterr¨¢nea, o subglacial, un gigante geol¨®gico separado del resto del mundo por una capa de hielo perpetuo de cuatro kil¨®metros de espesor.
Nadie ha estado all¨ª abajo, pero los cient¨ªficos han recurrido a perforaciones profundas para buscar el ADN de cualquier ser vivo que pueda andar por all¨ª. Y han obtenido genomas de nada menos que de 3.500 especies, en su inmensa mayor¨ªa bacterias adaptadas a esas extremas condiciones de presi¨®n, temperatura y oscuridad.
La mera existencia del lago fue objeto de conjeturas hasta los a?os noventa, cuando sofisticados estudios sismol¨®gicos y sistemas especiales de radar lograron demostrarla sin margen de duda. La teor¨ªa m¨¢s aceptada para explicar la presencia de agua l¨ªquida ¡ªm¨¢s de 5.000 kil¨®metros c¨²bicos¡ª en esas condiciones es que bajo el lago hay una actividad volc¨¢nica lo bastante intensa como para fundir esa cantidad de hielo, y que el lago lleva aislado de la atm¨®sfera terrestre desde que se form¨® la hoja oriental de la Ant¨¢rtida, hace 30 millones de a?os.
De ser as¨ª, los miles de especies de bacterias reci¨¦n descubiertas llevar¨ªan eones evolucionando de forma independiente del resto de las formas de vida, y ser¨ªan un tesoro de informaci¨®n biol¨®gica. Si el ADN no miente ¡ªy no tiene costumbre de hacerlo¡ª, los seres vivos de ese inmenso lago subglacial no son tan alien¨ªgenas como podr¨ªa esperarse.
El 94% de las especies parecen ser bacterias como las del resto del mundo, pero de estirpes adaptadas a condiciones extremas de temperatura, salinidad, presi¨®n o acidez. El 6% restante son especies eucariotas, es decir, del mismo tipo de c¨¦lulas que nuestro cuerpo, e incluso parece haber ADN de unos pocos organismos multicelulares como an¨¦monas y moluscos. Vida remota que no parece, despu¨¦s de todo, diferente de la que mora en la cocina de casa.
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