No se enroque, se?or Garz¨®n

Desde luego que no escribo en favor del se?or Rajoy y, s¨ª, he escrito a EL PA?S en favor del se?or Garz¨®n en otra oportunidad y el texto fue publicado, dicho sea de paso.

Sin embargo, leyendo lo que public¨® el martes con el t¨ªtulo No se enroque, se?or Rajoy, no puedo menos que reaccionar y preguntarle si todo lo que all¨ª dice lo tiene en cuenta cuando viene a mi pa¨ªs y se retrata con gente del Gobierno de aqu¨ª que hace exactamente lo mismo que Rajoy o, incluso, cosas mucho peores.

Aqu¨ª la situaci¨®n se agrava con Garz¨®n, porque ¨¦l no puede ignorar que los derechos humanos en los que puede ampararse para justificar sus fotos al lado de personajes lamentables, comparencias, etc¨¦tera, son usados de manera aberrante por el Gobierno argentino para cometer infinidad de tropel¨ªas y actos de corrupci¨®n como los que ¨¦l critica en Rajoy, sobre todo para enga?ar groseramente a los j¨®venes.

Naturalmente, Garz¨®n puede tener sobrados argumentos para escribir lo que escribe de Rajoy y de Espa?a, pero en absoluto los tiene aqu¨ª para venir a avalar a un Gobierno corrupto desde donde se mire, salvo que me obligue a pensar lo que no quiero pensar de ¨¦l, o sea, que es remunerado por tales servicios.¡ª Rub¨¦n ?ngel Macchi. Buenos Aires, Argentina.

Baltasar Garz¨®n deber¨ªa cambiar el g¨¦nero de su admonici¨®n No se enroque, se?or presidente y convertirla en No se enroque, se?ora presidenta para amonestar a Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner, a cuya cleptocracia est¨¢ prestando asesoramiento en la ofensiva contra la independencia del Poder Judicial argentino.¡ª Eduardo Goligorsky. Barcelona.