Par¨¦ntesis patrimonial
D¨ªaz Ferr¨¢n ocult¨® inmuebles por valor de 88 millones para burlar a los acreedores
Encarcelado desde diciembre, el expresidente de la patronal CEOE Gerardo D¨ªaz Ferr¨¢n est¨¢ siendo investigado por presunto saqueo patrimonial del grupo Marsans. En una pirueta que le acredita como estratega financiero y caballero de mohatra, aunque no como ciudadano y empresario ejemplar, D¨ªaz Ferr¨¢n ha ocultado (presuntamente, por supuesto) o, seg¨²n su terminolog¨ªa preferida, puesto entre par¨¦ntesis, un patrimonio de casi 88 millones de euros, con el fin de hurtarlo a las ¨¢vidas apetencias de sus acreedores. Recu¨¦rdese al respecto que D¨ªaz Ferr¨¢n dej¨® una deuda de 400 millones; y que durante varios meses despu¨¦s de la quiebra de Marsans se resisti¨® con excusas y subterfugios a abandonar la presidencia de la patronal, a pesar de la notable injuria al sentido com¨²n que le supone a una patronal tener como figura de referencia a un quebrado; periodo en el que presuntamente se dedic¨® a distribuir sus propiedades entre distintas sociedades para burlar a los acreedores. A continuaci¨®n, se declar¨® insolvente. El mundo es de los audaces.
Hay que tener una confianza berroque?a en s¨ª mismo para planear la ocultaci¨®n de un patrimonio inmobiliario de 88 millones. La polic¨ªa ha destapado el escondite; ahora sabemos que el se?or D¨ªaz Ferr¨¢n es capaz de quebrar un grupo de empresas con una gesti¨®n deplorable, usar la CEOE como coartada para ganar tiempo y poner entre par¨¦ntesis el capitalismo y su patrimonio inmobiliario. Que no es una frusler¨ªa. Incluye dos apartamentos frente a Central Park, pisos en Marbella, Mallorca y Menorca y una suntuosa finca, con castillo incluido, en Santa Cruz de Retamar. M¨¢s le hubiera valido encastillarse (valga la redundancia) en sus almenas toledanas y arrojar desde ellas piedras y aceite hirviendo a sus acreedores que aferrarse al sill¨®n de la CEOE.
Para la moral cat¨®lica, la contrici¨®n verdadera de un hurto se demuestra restituyendo lo sustra¨ªdo. La regla ¨¦tica deber¨ªa convertirse en judicial: la libertad deber¨ªa estar condicionada a la devoluci¨®n y el pago de lo adeudado o afanado. Eso, o constituir la figura de un tutor de la condicional que vigile el patrimonio y los recursos de los B¨¢rcenas, Ferranes o Roldanes fuera de la trena.
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