El ministro del Interior y la violinista miran al El¨ªseo

Con sus ¨²ltimas declaraciones sobre la inmigraci¨®n y los gitanos, sosteniendo tesis similares a las de la extrema derecha al negar la posibilidad de integrarse en Francia a los roman¨ªes europeos y defender su expulsi¨®n, el ministro del Interior franc¨¦s, Manuel Valls, ha vuelto a confirmarse como el menos socialista del gobierno socialista y alimenta la inevitable y recurrente comparaci¨®n con el expresidente conservador Nicolas Sarkozy. Ambicioso, medi¨¢tico e hiperactivo, el ministro m¨¢s popular del ejecutivo, al igual que el exmandatario, domina a la perfecci¨®n las c¨¢maras de televisi¨®n y los focos de la prensa. No duda tampoco en poner en escena a su medi¨¢tica esposa, la violinista de ¨¦xito Anne Gravoin, una mujer que se define como una ¡°mano de hierro en un guante de seda¡±, recelosa de su independencia profesional, pero volcada a la vez en la fulgurante carrera de su esposo.

El espectacular beso protagonizado por la pareja al final de un concierto de la violinista, oficialmente espont¨¢neo pero para muchos demasiado cargado de s¨ªmbolos para no ser planeado, publicado en una doble p¨¢gina de la revista Paris Match, fue el gran protagonista del verano. Bajo el sugerente titular All you need is love, sirvi¨® de colof¨®n a un verano, redondo para el pol¨ªtico nacido en Barcelona, durante el cual ha multiplicado sus apariciones y ganado de paso cuatro puntos de popularidad, para alcanzar un envidiable 73% de aprobaci¨®n entre los franceses, seg¨²n la misma revista. El porcentaje se dispara hasta el 80% entre los mayores de 50 a?os, y al 89% entre los simpatizantes socialistas.

La pareja se cas¨® en julio de 2010, aunque ambos llevaban a?os viviendo juntos. Gravoin, quien ha mantenido su apellido ¨C¡°aprovech¨¦ una ley que acababa de entrar en vigor para guardar mi nombre, no soy la se?ora Valls, pero Manuel es mi gran amor¡±, declaraba a la revista Paris Match-, es la segunda esposa de Valls. Este se cas¨® en primeras nupcias con Nathalie Souli¨¦, con la que tuvo cuatro hijos. La violinista es por su parte madre de un peque?o, fruto tambi¨¦n de una relaci¨®n anterior.

El espectacular beso protagonizado de la pareja tras un concierto de la violinista se convirti¨® en el gran protagonista del verano

Criada en una familia acomodada de m¨²sicos, Gravoin ha seguido una carrera dibujada ya desde peque?a. A los ocho a?os ya estudiaba m¨²sica cl¨¢sica, aunque de mayor decidi¨® romper los estereotipos y lanzarse a realizar colaboraciones con cantantes de m¨²sica popular como los franceses Laurent Voulzy o Charles Aznavour o la estadounidense Liza Minelli. El d¨ªa de la ceremonia de traspaso de poderes de su esposo, durante la primavera de 2012, no asisti¨® porque ten¨ªa otro compromiso importante: dirig¨ªa una orquesta de unos 40 m¨²sicos cl¨¢sicos en un concierto del rockero Johnny Hallyday en su gira de despedida.

A pesar de su dedicaci¨®n con su propia carrera ¨Cen 2003 cre¨® el grupo R¨¦gie Orquestre-, no descuida en ning¨²n momento la de su marido, del que controla cada detalle de su impecable look. Durante la campa?a electoral, la artista se hizo amiga de la periodista Val¨¦rie Trierweiler, pareja del ahora presidente Fran?ois Hollande, por "el bien del futuro de su marido", seg¨²n ella misma relataba en las cenas mundanas de las que es habitual como cuenta Le Canard Encha?n¨¦.

Gravoin entr¨® sin embargo en la arena p¨²blica con mal pie, a ra¨ªz de una minipol¨¦mica surgida de una frase tan elitista como absurda soltada en una entrevista al diario Le Parisien. Eran los primeros d¨ªas del gobierno socialista instalado desde junio de 2010. Al preguntar al diario que la entrevistaba por qu¨¦ se interesaban por ella, respondi¨® ella misma: ¡°Es verdad que una artista tiene m¨¢s glamur que lo que hace Brigitte Ayrault¡±. La esposa del primer ministro Jean-Marc Ayrault es profesora de idioma en un colegio de la periferia de Nantes.

La ¨²ltima an¨¦cdota protagonizada por Gravoin vuelve ahora a colocarla en la pol¨¦mica. Seg¨²n la revista l¡¯Express, Leaticia Hallyday, la esposa de Johnny Hallyday, le habr¨ªa pedido la intervenci¨®n del ministro del Interior para evitar el cierre administrativo de un local propiedad del padrastro del cantante. Valls anunci¨® de inmediato que denunciaba a la revista por difamaci¨®n.