La sombra de ¡®Pretty woman¡¯

?Otra Roberts inocentona?

Hubo cierto regocijo en la opini¨®n p¨²blica la noche en la que la sobrina de Julia Roberts fue violada. Ayud¨®, sin duda, el hecho de que todo fuera una ficci¨®n: lo ¨²nico que ocurri¨® ese pasado 5 de octubre es que se estren¨® la tercera temporada de American horror story, la serie en la que la joven de 22 a?os interpreta a una fiestera bruja del siglo XXI de la que abusa casi toda una fraternidad universitaria. Pero no por ello la reacci¨®n, reflejada en cualquier recoveco de Internet, es menos chocante: hace seis meses, la aparentemente inocente veintea?era llamada Emma Roberts parec¨ªa haber heredado de su t¨ªa el t¨ªtulo de Novia de Am¨¦rica, ganado a pulso por interpretar a chicas buenas una y otra vez en series y pel¨ªculas infantiles desde que ten¨ªa 12 a?os. Este a?o, sin embargo, que estrena los proyectos m¨¢s ambiciosos de su carrera (a la serie hay que sumar Somos los Miller, con Jennifer Aniston, que estrena en Espa?a la semana que viene), le ha sorprendido efectuando la dif¨ªcil transici¨®n entre fen¨®meno adolescente y actriz adulta. El resultado es que ahora el p¨²blico se regodea al verla sufrir maltratos, por ficticios que sean.

?Cu¨¢ndo empez¨® el cambio?

Unas fotos publicadas en julio de este a?o marcaron el momento en que la imagen de Roberts cambi¨® a peor: los paparazis la encontraron escondida bajo unas gafas de sol, como cualquier otra famosa. Tambi¨¦n ten¨ªa el brazo vendado y las piernas llenas de moratones. Eran secuelas de cuando, unas noches antes, hab¨ªa agredido a su novio en Montreal. Seg¨²n la demanda que este interpuso y luego retir¨®, Roberts lo hab¨ªa mordido y apaleado. No era secreto que hab¨ªa sido detenida por ello, pero aquellas fotos se convirtieron en la constataci¨®n visual de que su imagen de ni?a buena pod¨ªa ser poco m¨¢s que una fachada. Sigui¨® la ronda de rumores habituales que justificaban este comportamiento: drogas, mal car¨¢cter, altivez y muchas fiestas. Nadie los neg¨®. De ser un ¨ªdolo de menores de edad, Roberts pas¨® a ser la siguiente Lindsay Lohan.

?M¨¢s hija que sobrina?

Es imposible confirmar los testimonios de quienes aseguran haber visto a Emma Roberts en su desmelenado esplendor. Tampoco es que eso importe. Fue separada del bando de Julia y catalogada en el de su padre, Eric, actor en varias pel¨ªculas menores y alguna de prestigio, pero sobre todo detenido en 1987 por posesi¨®n de coca¨ªna y marihuana, y otra vez en 1995 por agredir a su mujer. Esos a?os, vistos ahora, podr¨ªan haber sido el verdadero debut de Emma Roberts.