?Sin deuda no hay dinero?
Todo el mundo quiere tener dinero y evitar la deuda, pero pocos saben que el sistema monetario obliga a que alguien est¨¦ endeudado para que haya dinero.
Seg¨²n el colectivo brit¨¢nico Positive Money m¨¢s del 97% de la libra esterlina se emite como cr¨¦dito bancario. La banca juzga si el solicitante del pr¨¦stamo tiene la capacidad para pagarle las tasas de inter¨¦s adem¨¢s de devolver el capital principal, porque la propia oferta del cr¨¦dito (la inyecci¨®n de la liquidez) es una actividad comercial para lucrarse.
No hay dinero si no hay deuda: los individuos, las empresas y/o el sector necesita endeudarse para ofrecer la masa monetaria a la econom¨ªa.
La banca nos ofrece cr¨¦ditos s¨®lo cuando son rentables: Se ofrece demasiada cantidad de cr¨¦ditos en la ¨¦poca de la bonanza para calentar la econom¨ªa todav¨ªa m¨¢s mientras que se reduce la oferta de cr¨¦ditos una vez que entra en retroceso.
Se requiere el crecimiento perpetuo y exponencial para liquidar la deuda: como las tasas de inter¨¦s aumentan el pasivo total de la econom¨ªa, se necesita cada vez m¨¢s cantidad de dinero para devolver deudas.
El Estado redistribuye la riqueza del pa¨ªs a favor de los ricos: hoy en d¨ªa los estados miembros de la Eurozona no pueden vender bonos al Banco Central sino a la banca privada. Por lo tanto se enriquece el sector privado en detrimento del sector p¨²blico que sufre tanto aumento explosivo de su deuda que no tiene otro remedio que recortar sus gastos.
Puedes encontrar m¨¢s informaci¨®n en el documental 97% Owned. Pero no desesperes. Las monedas sociales sirven para derrumbar este paradigma tambi¨¦n. En el modelo LETS (ej.: Eco Alt Congost, Turuta y Puma), adem¨¢s de los dos sistemas del barter comercial (Trocobuy y RES Catalunya), se crea el saldo positivo de un socio cuando otro socio le paga en esta unidad de cuenta, resultando en el saldo negativo, pero a diferencia de la deuda en moneda oficial, se la puede liquidar con la oferta de productos y/o servicios y el saldo negativo no crece nunca. Los clubes de trueque que prosperaron en Argentina tambi¨¦n funcionaban sin crear deuda, pues cada ¡°prosumidor¡± (socio) recib¨ªa 50 cr¨¦ditos (equivalentes a 50 pesos argentinos = d¨®lares estadounidenses en aquel entonces) para la compraventa en las ferias.
Hay otras propuestas tambi¨¦n de emitir la moneda con la entrega de bienes. Helo¨ªsa Primavera, quien promov¨ªa los clubes de trueque en Argentina, propone la celebraci¨®n de ferias de trueque en que se emiten vales de acuerdo con respaldos entregados al Ecobanco. Bernard Lietaer, otro promotor de moneda social a escala mundial, presenta una moneda global TERRA que ser¨¢ emitida a base de la cantidad entregada de principales materias primas (ej.: trigo, hierro y petr¨®leo), y otro modelo C3 que convierte el pagar¨¦ en una moneda social. En estas experiencias las monedas volver¨¢n a ser respaldadas, no con oro o plata sino con otros bienes que necesitamos en nuestra vida. Hasta Joseph Stiglitz, quien gan¨® el Premio Nobel de Econom¨ªa en 2001, habla de la creaci¨®n monetaria por el Tesoro Nacional en vez del banco central.
Una clave para el ¨¦xito de las monedas sociales es no olvidar nunca el hecho de que la emisi¨®n de la moneda significa la creaci¨®n de un pasivo para el emisor. Cuanta m¨¢s moneda emites, m¨¢s debes a la sociedad y tienes que liquidarla ofreciendo productos y/o servicios equivalentes. En el modelo de Ecobanco y TERRA no hay este riesgo, puesto que el emisor ya tiene la cantidad equivalente de respaldo y este respaldo servir¨¢ para garantizar el valor de la moneda mientras que en otros modelos tu saldo negativo significa tu compromiso a ofrecer algo.
Fotograf¨ªa de apertura: Muestra de la cartilla de Turuta, en Vilanova i la Geltr¨² (Barcelona)
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