Transparencia

Parece que ¨²ltimamente los espa?oles no salimos muy bien parados en los rankingsy en los estudios.

El ¨ªndice de percepci¨®n de la corrupci¨®n (CPI) de Transparencia Internacional indica que Espa?a baja seis puntos con respecto al a?o pasado. Nos situamos en los 50 puntos (sobre 100). Somos el segundo pa¨ªs que m¨¢s desciende, despu¨¦s de Siria, naci¨®n gobernada por un dictador y que se desangra en una guerra civil.

Casos como el esc¨¢ndalo N¨®os que afecta a la Monarqu¨ªa espa?ola y que, se mire por donde se mire, es incre¨ªble; la trama G¨¹rtel, que vincula a empresarios y pol¨ªticos en una trama de regalos, dinero y adjudicaciones; los papeles de B¨¢rcenas, con la supuesta contabilidad B del partido en el Gobierno; el esc¨¢ndalo de la Uni¨®n General de Trabajadores y Comisiones Obreras con los ERE, etc¨¦tera, demuestran la p¨¦rdida de valores de la sociedad espa?ola que se refleja en las actitudes y en el comportamiento, en el ¡°todo vale¡± y en el ¡°cuanto m¨¢s mejor¡± que, en mi opini¨®n, es m¨¢s notable y mucho m¨¢s sangrante cuando afecta a personas p¨²blicas e instituciones. Nos lastran hasta ser el hazmerre¨ªr de Europa.

Nuestros gobernantes intentan relanzar la Marca Espa?a con acciones de relaciones p¨²blicas, tomando como modelos a personajes ilustres y deportistas de ¨¦lite. Mejor si, entre todos, impulsaran una ley de transparencia que dote de mecanismos de control para sacar a la luz los aumentos desmedidos de patrimonio, regalos, sobresueldos, contabilidades B y amiguismos. Excesos que no nos podemos permitir, que nos afectan y que a la larga pagamos todos.¡ª Eva Blanco C¨¦spedes.