?pica para la vida de Mandela en cine

No es la primera pel¨ªcula sobre la vida de Nelson Mandela pero s¨ª la primera en la que ¨¦l mismo podr¨ªa haber firmado el gui¨®n. Mandela: el largo camino hacia la libertad pone en im¨¢genes la autobiograf¨ªa hom¨®nima que el primer presidente negro de Sud¨¢frica empez¨® a escribir a escondidas en la prisi¨®n de Robben Island, donde cumpli¨® 18 de los 27 a?os de la condena que le impuso el r¨¦gimen del apartheid. Tambi¨¦n es la cinta que abarca m¨¢s tiempo, desde 1934 con su iniciaci¨®n al mundo de los adultos en la ceremonia tradicional xhosa, hasta 1994, con un Mandela reci¨¦n nombrado presidente y subiendo por una colina de su aldea natal junto a unos ni?os, aunque la acci¨®n empieza en 1942, cuando ya ha abierto con Oliver R. Tambo el primer despacho de abogados negros en Johannesburgo.

Cartel promocional de la pel¨ªcula en ingl¨¦s. En Espa?a habr¨¢ que esperarhasta el 17 de enero de 2014.

El productor de la cinta, Anant Singh, los defiende como ¡°la elecci¨®n perfecta¡± e incluso la ex esposa de Mandela, la carism¨¢tica Winnie, no par¨® un momento de alabar el trabajo de Harris durante la presentaci¨®n de la cinta en Johannesburgo.

El secundario Tony Kgogore, que interpreta al l¨ªder antiapartheid Walter Sisulu, sali¨® tambi¨¦n en defensa del protagonista asegurando que el acento de Mandela ¡°es muy dif¨ªcil de conseguir, incluso para los sudafricanos¡± pero entre todos, dijo, se trabaj¨® para que fuera lo m¨¢s parecido posible. En honor a la verdad, hay que destacar que ambos se esfuerzan y han cogido el caracter¨ªstico acento del ingl¨¦s sudafricano y Elba clava la manera de hablar de Mandela.

Elba junto a Winnie y Zindzi Mandela, ex mujer e hija de Mandela,
en la presentaci¨®n de Johannesburgo. Reuters / Siphiwe Sibeko

Singh ha tardado 25 a?os en hacer realidad el proyecto. ¡°S¨®lo dos a?os menos que lo que Mandela estuvo en la prisi¨®n¡±, bromea cuando se le pregunta si se siente liberado. A finales de los 80, estando Madiba a¨²n recluido le escribi¨® una carta pidi¨¦ndole permiso pero el preso n¨²mero 46664 le respondi¨® extra?ado que para qu¨¦ alguien querr¨ªa ver su historia.

El brit¨¢nico Idris Elba, carcterizado de Mandela, en el juicio de Rivonia
que le llevar¨ªa a Robben Island a cumplir cadena perpetua.

El productor no se dio por vencido y tir¨® adelante hasta conseguir los derechos, imponi¨¦ndose a otras llamadas interesadas desde Hollywood. La pel¨ªcula es ya la m¨¢s cara de la historia de Sud¨¢frica, con un presupuesto de 35 millones de d¨®lares, nada en comparaci¨®n de lo que podr¨ªa haber costado si finalmente tuviera sello de Estados Unidos, apostilla Singh.

¡°Es una pel¨ªcula ¨¦pica porque su vida lo es¡±, explica el productor. A lo largo de las dos horas y 40 minutos de metraje, se van sucediendo el Mandela adolescente, el luchador por los derechos humanos, el preso, el l¨ªder, el presidente, sin olvidar ¡°el Mandela hombre¡±. La historia dicen que funciona porque al fin y al cabo trata temas universales, como el sufrimiento o el amor. En las salas de cine, m¨¢s de un espectador deja caer una lagrimita o se indigna con las mil y una injusticas a que someten a la poblaci¨®n negra y a la familia Mandela.

El resultado ha gustado al clan m¨¢s famoso de Sud¨¢frica. El productor hizo un pase privado para Winnie y una de sus hijas, Zindzi, quienes ¡°terminaron muy emocionadas¡± pidiendo que ¡°no se cambiara nada¡±. Zindzi confes¨® que la pel¨ªcula le hab¨ªa tra¨ªdo recuerdos dolorosos, como los de una infancia marcada por la ausencia permanente de su padre y puntuales de su madre, que tambi¨¦n sufri¨® la dura represi¨®n del r¨¦gimen suprmecista blanco.

Winnie celebra con sus hijas Zenani y Zindzi (derecha) su liberaci¨®n despu¨¦sde meses de estar separadas, mientras Mandela sigue en prisi¨®n.

Mandela no pudo ver la pel¨ªcula terminada pero hace un a?o, el equipo le mostr¨® algunas escenas. ¡°?Y dices que ese soy yo?¡±, pregunt¨® riendo al ver a Elba en acci¨®n.

Elba est¨¢ encantado con el ¡°regalo¡± que le ha tocado y, como no pod¨ªa ser menos, no ha cejado en proclamar su admiraci¨®n por la vida y la lucha del l¨ªder sudafricano. No obstante, el brit¨¢nico advierte que en ocasiones est¨¢ en las ant¨ªpodas del h¨¦roe de la paz y la convivencia. El actor se reconoce ¡°gru?¨®n, poco amable y muy impaciente¡± y espera que haber llevado el traje de Madiba le permita adoptar su esp¨ªritu. Los responsables del filme m¨¢s bien aspiran a que se lleve el Oscar a la mejor interpretaci¨®n masculina para que le d¨¦ un trampol¨ªn en la promoci¨®n a nivel mundial.

Una joven Winnie, interpretada por Harris, sale con el pu?o en alto del juicio tras conocer que Mandela yotros camaradas del Congreso Nacional Africano han sido condenados a cadena perpetua.

Si lo consigue, Elba tendr¨¢ que agradec¨¦rselo a Ahmed Kathrada, de 84 a?os, amigo personal de Mandela y camarada de la lucha y de presidio en Robben Island, liberado tan s¨®lo unos meses antes que Madiba, y a George Bizos, el viejo abogado que defendi¨® a Madiba en el juicio que le conden¨® a cadena perpetua. Ambos ayudaron al actor a vestir su personaje, habl¨¢ndole del expresidente. En la presentaci¨®n en Johannesburgo, Kathrada admiti¨® que en alg¨²n momento de las negociaciones con el r¨¦gimen del apartheid, a finales de los ochenta, creyeron que Madiba hab¨ªa ca¨ªdo en una especie de s¨ªndrome de Estocolmo con sus carceleros, sobre todo cuando lo fueron a visitar a la residencia a la que hab¨ªa sido trasladado para facilitar las conversaciones y se lo encontraron en "la piscina y con unos zapatos muy bonitos".

El equipo recurri¨® a Katharada para que le asesorara en aspectos concretos de la trama. El hombre, conocido por haber sido el gu¨ªa de Barack Obama en su reciente visita en la prisi¨®n de Robben Island, admiti¨® que al llegar a la famosa c¨¢rcel se sinti¨® ¡°como en casa¡±. En la misma celda donde Mandela pas¨® la mayor parte de su reclusi¨®n, Elba durmi¨® alguna que otra noche para meterse en la piel de un hombre que, como ¨¦l mismo dice, no es ¡°ning¨²n santo¡± pero que muchos le ponen en un altar.

Una de las sorpresas de la cinta es que la banda sonora incluye un tema escrito por el cantante Bono expresamente para esta historia.

La pel¨ªcula no esconde, como Mandela tampoco en su libro, los problemas conyugales que surgen inmediatamente despu¨¦s de su liberaci¨®n, en febrero de 1990. Desde que se casaron en 1957 s¨®lo convivieron cuatro a?os y durante la mayor parte del tiempo de la condena no tuvieron contacto f¨ªsico alguno y tan s¨®lo alguna visita espor¨¢dica o cartas censuradas por la prisi¨®n. Adem¨¢s, Winnie se mostr¨® contraria a esa voluntad de perdonar a los blancos de que hac¨ªa gala su marido y la direcci¨®n del Congreso Nacional Africano. Como en las memorias, se hace referencia a sus ganas de continuar la lucha armada en los suburbios de negros y de castigar a los traidores y chivatos, lo que a?os m¨¢s tarde la llev¨® ante la justicia acusada de secuestro. Winnie era la presidenta del Mandela United Footbal Club. La pareja se separ¨® antes de que Mandela sea investido presidente, en 1994.

El director de la Fundaci¨®n Nelson Mandela, Sello Hatang, pone de relieve que la pel¨ªcula puede ayudar a dar a conocer m¨¢s la figura y los valores del que fue Premio Nobel de la Paz de 1993, as¨ª como su lucha por los Derechos Humanos. En este sentido, anima a los escolares no s¨®lo de Sud¨¢frica sino de todo el mundo a visionar la cinta para aprender una parte de la historia universal.

En Espa?a se estrena, previsiblemente, el 17 enero.