Mal asunto

Hemos visto fotograf¨ªas de las obras del canal de Panam¨¢ y, en efecto, hay que echar ah¨ª mucho hormig¨®n armado, y mucha caradura, y mucha subcontrata, quiz¨¢ tambi¨¦n muchas comisiones. Hay que echar de todo en esas esclusas para que no goteen como gotean la Monarqu¨ªa y el Gobierno y la judicatura y la unidad de Espa?a. Tenemos el suelo del pa¨ªs lleno de palanganas de las que sale el clonc clonc caracter¨ªstico de la gota al estrellarse contra la superficie de la bacina desportillada. Clonc clonc, la banda sonora del hambre, de la posguerra, de los abortos clandestinos, de las porras policiales contra las espaldas de los contribuyentes. Hay que echar de todo en esas esclusas paname?as con p¨¦rdidas. Ahora estamos arrojando palabras. ?Fant¨¢stica, esa mezcla de ingenier¨ªa naval y financiera y l¨¦xica! Observado con perspectiva, el Canal tiene tambi¨¦n algo de maqueta del futuro. Se lo imagina uno dentro de dos siglos, abandonado ya, medio podridos sus contrafuertes y arbotantes, y piensa en ¨¦l como en las fauces del infierno. Per me si va nella citt¨¤ dolente.Un poeta simbolista, cuyo nombre no me viene, dijo al regresar de una enfermedad grave: "He visto el recibidor del infierno". Al preguntarle c¨®mo era, respondi¨® que como de clase media, con su cornucopia y su perchero para los sombreros de Magritte. Lo que hace falta ahora a la entrada del Canal es una cornucopia gigante frente a la que atusarse el bigote antes de comenzar la visita a lo que quiz¨¢ sea el parque medi¨¢tico m¨¢s grande de la corrupci¨®n universal. Nuestra ambici¨®n carece de l¨ªmites, todo se nos queda peque?o, pero todo gotea y hay que ir tapando agujeros aprisa y corriendo. Para eso est¨¢n las palabras y la palabrer¨ªa. Dice la ministra que los espa?oles no nos haremos cargo de la contabilidad de Sacyr. Mal asunto, tampoco ¨ªbamos a arreglar la de Bankia.

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