Miley Cyrus tiene mucho que ense?ar
2013 ha sido su a?o. La cantante ha desterrado su imagen de ni?a Disney para convertirse en un icono de la provocaci¨®n y el ¡®twerking¡¯ Mientras escandaliza a unos, la Red la adora
Miley Cyrus pretend¨ªa cerrar 2013 con una ¨²ltima exhibici¨®n de carne y poder¨ªo. La excusa era un videoclip que public¨® el ¨²ltimo jueves del a?o en YouTube; uno en el que se ve a la cantante de 21 a?os, y persona m¨¢s buscada en Google del a?o pasado, retorci¨¦ndose en ropa interior entre las s¨¢banas de una cama de la que es la ¨²nica ocupante mientras canta Adore you a la c¨¢mara. Con ingredientes parecidos, Cyrus hab¨ªa convertido la actuaci¨®n de una entrega veraniega de premios de MTV en un momento trascendental para la m¨²sica de 2013. Uno que la convirti¨® en la figura m¨¢s reconocible del pop del momento y en la descubridora del twerking, el baile m¨¢s incontestable del a?o. Un mismo formato que hizo que su anterior videoclip, Wrecking ball, batiera, en octubre, el r¨¦cord de reproducciones en YouTube: m¨¢s de cien millones en seis d¨ªas. Hoy lleva m¨¢s de 450 millones.
Este nuevo v¨ªdeo ha tardado el mismo tiempo en porfiarse unos 33 millones de reproducciones. Nunca la proporci¨®n entre la cantidad de piel exhibida por Cyrus y los visionados resultantes ha sido tan baja. Ella lo adujo en un tuit a que el v¨ªdeo se hab¨ªa filtrado en la Red antes del lanzamiento y, sin el factor sorpresa, el impacto no fue el mismo (sus palabras fueron: ¡°Todos sabemos que mis fans habr¨ªan roto otro r¨¦cord de no ser por el gilipollas que filtr¨® mi v¨ªdeo¡±). Quien no se crea esa versi¨®n podr¨¢ interpretar, si as¨ª lo desea, este descenso como una se?al de que Miley Ray Cyrus fue un hurac¨¢n tan mastod¨®ntico en 2013 que solo puede llegar decr¨¦pito a 2014. Aunque inaugura el a?o como imagen de la ¨²ltima campa?a de Marc Jacobs.
En menos de seis meses, la cantante se ha convertido en emblema de la cultura del momento, ha colado un concepto en el diccionario Oxford, ha vertebrado gran parte del discurso de la Red, ha derrotado a Edward Snowden y al papa Francisco en el inter¨¦s de los internautas y se ha convertido, por fortuna o por desgracia, en uno de los personajes m¨¢s representativos de 2013. Y ¡°Miley Cyrus es el ahora¡±, explica el escritor y exdirector de la revista Popstar Matthew Rettenmund. ¡°El secreto de muchas de las estrellas de la m¨²sica es llevarnos a su mundo. Miley Cyrus ha logrado lo opuesto: ella nos saca de nuestro mundo y le pone cara a la esfera p¨²blica. Estoy seguro de que dentro de poco los historiadores de la cultura pop podr¨¢n decir sin dudar que ella ha sido 2013¡±.
Esos historiadores hipot¨¦ticos lo tendr¨¢n f¨¢cil: el auge que ha convertido a Cyrus en un icono cultural se cimienta en momentos f¨¢ciles de fechar. El primero fue el 25 de agosto, durante los Premios VMA de MTV. El dueto de Cyrus con el cantante Robin Thicke se esperaba que fuera algo subido de tono, aunque fuera porque amboshab¨ªan sacado videoclips con m¨¢s carne que acordes en los meses anteriores. Lo que no se esperaba es que Cyrus se convirtiera en la estampa del a?o. En lugar de bailar, empez¨® a mover el trasero como una turbina frente a la entrepierna de Thicke, mientras fing¨ªa practicarle un cunnilingus a un modelo, a la vez que se masajeaba la entrepierna con un dedo gigante de espuma de esos que se ven en cualquier estadio estadounidense.
El movimiento del trasero, se apresuraron a explicar medios del mundo entero a su boquiabierto p¨²blico, se denominaba twerking y era algo t¨ªpicamente afroamericano. ¡°Sexualidad indisimulada con raza. Son los dos esc¨¢ndalos favoritos de Am¨¦rica¡±, explica Riley Tyler, productor musical afincado en Los ?ngeles. ¡°Y ah¨ª estaba Miley mezcl¨¢ndolos. Es probable que ah¨ª est¨¦ la semilla de su ¨¦xito este a?o¡±.
Durante semanas se debati¨® si hab¨ªa sido demasiado controvertidamente sexual o racista o si no hab¨ªa habido tal controversia. Las parodias tomaron la Red. Se hab¨ªa convertido en una estampa universal.
El 9 de septiembre se public¨® en Internet el v¨ªdeo de Wrecking ball, donde aparec¨ªa vestida solo con unas botas mientras se abrazaba a una bola de demolici¨®n y lam¨ªa un martillo con ¨¦xtasis epic¨²reo. ¡°A lo mejor no es el v¨ªdeo m¨¢s visto de la historia de YouTube¡±, explica Farai Chideya, analista de la cultura popular, ¡°pero s¨ª fue el que m¨¢s inter¨¦s suscit¨®. Tard¨® seis d¨ªas en tener cien millones de visionados; un r¨¦cord para un videoclip¡±.
Los r¨¦cords
El videoclip: Wreicking ball rompi¨® en octubre el r¨¦cord de reproducciones en YouTube: m¨¢s de cien millones en seis d¨ªas. Hoy lleva m¨¢s de 450 millones.
Internet: Miley Cyrus fue la persona m¨¢s buscada del mundo en Google durante 2013 .
Las ventas: Bangerz fue el alb¨²m de 2013 que m¨¢s copias vendi¨® en su semana de lanzamiento: 270.000.
Si el inter¨¦s por Cyrus parec¨ªa inversamente proporcional a la ropa que llevaba, quiz¨¢ fuera porque desempe?¨® el papel de chica Disney entre 2006 y 2011. En esos a?os protagoniz¨® la serie Hannah Montana y alcanz¨® entre los adolescentes un estrellato tan grande como el de su padre, tambi¨¦n cantante, entre los seguidores del country.
¡°No estamos viendo el descenso a los infiernos de una princesa Disney, como era el caso de Britney Spears en 2007 [cuando la cantante se rap¨® la cabeza y destroz¨® un coche con un bate de b¨¦isbol]¡±, advierte Rettenmund. ¡°El atractivo de Miley es algo mucho m¨¢s rec¨®ndito, pero m¨¢s relativo a nuestros tiempos¡±.
Seg¨²n Amit Ray, profesor de sociolog¨ªa en el Rochester Institute of Technology, est¨¢ el hecho de que la m¨²sica sea cada vez m¨¢s visual que sonora. ¡°Mira a Rihanna: este a?o no ha sacado nada de m¨²sica, pero s¨ª un videoclip, y ha vuelto a ser relevante. Beyonc¨¦ ha sacado un nuevo ¨¢lbum en diciembre: 14 canciones y 17 v¨ªdeos¡±. Tambi¨¦n ayuda que este sea el a?o en el que la casa Billboard haya aceptado los visionados de YouTube como forma de medir los ¨¦xitos. Wrecking ball es la canci¨®n m¨¢s vista del a?o, pero se ha emitido por la radio menos veces que Roar, de Katy Perry, y se ha descargado bastante menos que Royals, de Lorde.
M¨¢s determinante resulta el hecho de que no haya orden ni concierto en el discurso de Cyrus. Desde agosto ha justificado su actuaci¨®n en la gala de MTV alegando que solo quer¨ªa provocar para que hablaran de su m¨²sica; que solo quer¨ªa pasarlo bien; que buscaba romper tab¨²es sexuales y, finalmente, en diciembre le dijo a The New York Times que lo hac¨ªa para que las mujeres sintieran que pod¨ªan hacer lo que les diese la gana. ¡°Hay algo liberador en el hecho de que no haya discurso¡±, prosigue Ray. ¡°Lady Gaga hizo una actuaci¨®n t¨¦cnicamente impresionante en la gala MTV, pero ten¨ªa l¨®gica, historia y una tesis art¨ªstica detr¨¢s de todos esos cambios de vestuario. Miley llam¨® la atenci¨®n con lo sexual, pero lo que permaneci¨® fue algo m¨¢s profundo: solo eran posturas, que resultan m¨¢s superficiales, pero son f¨¢ciles de digerir y de compartir por Internet. El mundo de Internet luego rebota al real y as¨ª se crean emblemas como ella. Solo son im¨¢genes, pero una imagen es suficiente. Repetida las suficientes veces, es un fen¨®meno¡±.
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