Sarkozy ejerce de marido de Carla Bruni
El expresidente acompa?a a su esposa de gira y testa su popularidad a pie de calle ¡°Ella me ayud¨® cinco a?os. Yo puedo ayudarla cinco meses¡±, dice
Apartada un tiempo de los focos, la pareja Bruni-Sarkozy vuelve a mostrarse en p¨²blico en v¨ªsperas de las elecciones municipales de finales de marzo en Francia. El expresidente, que sigue de cerca las intrigas de su partido, aprovecha la gira de su esposa por Francia para recuperar ba?os de multitudes y comprobar su popularidad entre su tradicional electorado. Para Carla Bruni, que tuvo que renunciar a los escenarios durante su tiempo en El El¨ªseo por motivos de seguridad, la ocasi¨®n marca su reencuentro con el p¨²blico. Le toca a ella ahora recobrar todo el protagonismo, asegura el c¨ªrculo ¨ªntimo del matrimonio: a la espera de la evoluci¨®n pol¨ªtica, Sarkozy de momento se conformara, dicen, con ser el ¡°marido de Carla¡±.
¡°No hables mucho, mi amor, podr¨ªa acabar en la prensa¡¡±. La escena transcurre al final del concierto que dio la cantante y exmodelo en enero en Beziers, en el sur de Francia, en el marco de su gira por su nuevo disco, Little French Songs, iniciada a finales de 2013. Bruni y Sarkozy se encontraban en el camerino, donde conversan con diputados y candidatos a las municipales que no dudaron en asistir al espect¨¢culo, seg¨²n relata esta semana la revista Paris Match. ¡°Lo ve¡ ?la jefa en la pareja es ella!¡±, responde el pol¨ªtico al que sus interlocutores siguen llamando respetuosamente presidente.
Como en la mayor¨ªa de las actuaciones de su esposa, una veintena desde noviembre, Sarkozy est¨¢ presente. ¡°Sinceramente, se ha pasado casi cinco a?os apoy¨¢ndome. Yo puedo ayudarla durante cinco meses¡±, dice. El exmandatario ha alquilado un avi¨®n privado para que la pareja pueda regresar a Par¨ªs al final de cada concierto y poder as¨ª cuidar de la peque?a Gulia, la ni?a que el matrimonio tuvo en noviembre de 2011, medio a?o antes de dejar el palacio presidencial.
Pero por mucho que lo niegue ¡ªSarkozy se mantiene oficialmente en silencio sobre su regreso a la pol¨ªtica¡ª, cada una de sus apariciones le sirven para acercarse a la opini¨®n p¨²blica. Con barba de tres d¨ªas que le da un aspecto relajado, no pierde oportunidad de filtrar una buena foto y alguna que otra confidencia. Es la clave de su estrategia de comunicaci¨®n a lo largo de toda su carrera pol¨ªtica. Aquella noche en B¨¦ziers, entre firmas de aut¨®grafos y apretones de mano, tard¨® m¨¢s de 10 minutos en abrirse paso hasta el backstage. ¡°No es culpa m¨ªa. La gente est¨¢ contenta de verme¡±, observa satisfecho.
¡°No tengo ni idea de lo que har¨¢. Pero es un animal de la pol¨ªtica. Lo lleva en la sangre. Entonces, quiz¨¢s¡¡±, explicaba en una reciente entrevista al diario Nice Matin, la madre de Carla Bruni, Marisa Borini. "Si esto ocurre, esta vez mi hija seguir¨¢ adelante con su carrera", a?adi¨®. Aunque Carla Bruni lleg¨® a sacar un disco durante su periodo de primera dama no le qued¨® m¨¢s remedio que renunciar a promocionarlo con una serie de conciertos. Liberada de su papel oficial, al que se pleg¨® interpretando la perfecta esposa que respalda la carrera pol¨ªtica de su marido, Bruni recupera as¨ª el contacto directo con el p¨²blico que tanto anhelaba. Pero, si Sarkozy lleva la pol¨ªtica en la sangre, para Bruni la m¨²sica es simplemente ¡°su pasi¨®n¡±, seg¨²n su madre. ¡°Es una verdadera poetisa. La veo tan feliz estos d¨ªas que est¨¢ de gira¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.