Demos nosotros el ejemplo

?Pensamos realmente que la situaci¨®n pol¨ªtica y econ¨®mica por la que estamos pasando no tiene soluci¨®n, que no se puede hacer nada para resolverla?

Vemos pasar a pol¨ªtico tras pol¨ªtico acusado de corrupci¨®n, de robar dinero p¨²blico, nuestro dinero y el de nuestros hijos. ?Y de verdad pensamos que no podemos hacer nada? ?Estamos dispuestos a dejar que unos pocos acaben con todo lo que tanto nos ha costado conseguir hasta ahora? Es cierto que la clase pol¨ªtica es la que tendr¨ªa que dar ejemplo de justicia, de honestidad y sobre todo de humildad a una sociedad que est¨¢ luchando con u?as y dientes por salir adelante. Pero no es as¨ª. ?Por qu¨¦ no damos nosotros, los ciudadanos de a pie, ese ejemplo?

No dejemos que la injusticia campe a sus anchas. Si vemos algo injusto en el trabajo, en la familia, en nuestro entorno, no callemos, es mejor que te critiquen por decir lo que crees que por callar. Si en nuestra ciudad, en nuestro pueblo hay una concentraci¨®n para reivindicar algo que creemos justo, ¨²nete a ella, no te quedes en casa, cuantos m¨¢s seamos m¨¢s fuerza se har¨¢. Inculquemos a nuestros hijos unos valores. Ense?¨¦mosles a cuidar las cosas que hay en nuestra casa, pero tambi¨¦n las que est¨¢n fuera de ella, el mobiliario urbano de nuestras ciudades, nuestros bosques, nuestros mares.

No pasemos por este mundo como si no fu¨¦ramos parte de ¨¦l. Todos formamos parte de su engranaje y de nosotros depende que llegue a buen puerto. Vamos a ponernos una inyecci¨®n de entusiasmo. Vamos a luchar por lo que cre¨ªamos. Nada est¨¢ perdido.¡ª Francisca Blanco Sabio.