San Jorge contra los trepas

Voy a decirlo finamente para los delicados de esp¨ªritu: estoy hasta las ubres de Miley Cyrus. S¨ª, mujer, la artista antes conocida como Hannah Montana. Una exni?ata prodigio yanqui, exprincesa Disney por m¨¢s se?as, que antes daba grima de tan cursi y ahora da asco de tan grosera. Cantar no canta mal, la chiquilla: esa berrea de hembra en celo que se lleva ahora, pero lo que mejor hace es dar el cante gratuitamente. Que si saca la lengua, que si ense?a el perineo, que si se besa con Katy Perry, que si hace como si se tira a diestro y siniestro, que si se introduce el micro por todos los orificios, qu¨¦ aburrimiento.

Casi tanto como el v¨ªdeo de Shakira y Rihanna haciendo como que se dan el lote del milenio. Una rubia oscura y una morena clara revolc¨¢ndose juntas con lencer¨ªa ultrarreductora y tacones de aguja en plan mira qu¨¦ modernas somos, que estamos superliberadas y pasamos de vosotros, machos opresores. O sea: la fantas¨ªa sexual de todos los varones heterosexuales del planeta desde los hom¨ªnidos de Atapuerca. Menudo escandalazo. Y para terminar de arreglarlo, va la bomba latina y confiesa en la tele colombiana que es que Piqu¨¦, el padre de su hijo, no la deja rodar con t¨ªos y no le iba a negar ese capricho a su hombre. Ella, que lo m¨¢s fino que le aullaba a Pitbull era ¡°ar¨¢?ame la espalda y mu¨¦rdeme la boca¡±. Total, que si eso es el nuevo feminismo, que venga el obispo Reig Pla y lo bendiga. Por m¨ª, que liberen a otra. De transgresoras, nada. Unas arribistas por la v¨ªa de toda la vida es lo que son las nuevas divas.

Por cierto, que el otro d¨ªa se me apareci¨® la V¨ªrgen, perd¨®n, su siervo en la tierra, Jorge Fern¨¢ndez-D¨ªaz, y me dio la idea del siglo para repeler el intolerable asalto anual de los becarios. Hipertrofiadita tiene una la vejiga de estar todo el santo d¨ªa sin levantarse ni a orinar de la silla por miedo a que se la quiten los M¨¢steres del Universo, cuando resulta que la soluci¨®n estaba en la ferreter¨ªa de la esquina: las mallas antitrepas. S¨ª, ?qu¨¦ pasa? Si el ministro m¨¢s p¨ªo del Ejecutivo las quiere poner en la frontera para que no entren en Europa los hambrientos de pan, por poco cristiano que parezca, ?no las voy a poder poner yo protegiendo mi mesa para que no me jubilen los hambrientos de gloria de los nuevos, por muy pijos que sean de hecho?

Como que estoy por denunciar el caso a la comisaria del ramo, Cecilia Malmstr?m, e invitarla a pasar un d¨ªa en mi curro para que vea la presi¨®n sucesoria, igual que la convid¨® el ministro a las vallas de Ceuta y Melilla para que constatase la migratoria. Ten¨ªas que verlo el otro d¨ªa con su traje, su corbata y sus gafas de sol antediluvianas, patrullando el espig¨®n donde murieron 15 personas, en plan san Jorge contra el drag¨®n de los subsaharianos. Hasta sac¨® fotos con el m¨®vil, como si no tuviera a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado en pleno a sus ¨®rdenes. Apuesto a que se hizo un selfie y se lo mand¨® por WhatsApp diplom¨¢tico a la comisaria de marras marcando el territorio: ¡°En El Tarajal, guardando a Espa?a¡±.