Milagro en el recibo de la luz

Los milagros existen. Conviene registrarlos en la memoria y en los cronicones para que quien los vivi¨® presuma de ello y para convencer a los incr¨¦dulos. Esta es la singularidad milagrosa: las compa?¨ªas el¨¦ctricas tendr¨¢n que devolver dinero a los 17 millones de consumidores que gastan luz bajo tarifa. No importa cu¨¢nto (quiz¨¢ entre 30 y 40 euros), ni el cu¨¢ndo (la situaci¨®n de la tesorer¨ªa manda), ni siquiera el c¨®mo (quiz¨¢ compensen la cantidad debida en recibos posteriores), sino la singularidad del acto, la alineaci¨®n milenaria de los planetas. El consumidor, ansioso de recibir la devoluci¨®n, quiz¨¢ se pregunte la causa de este acontecimiento tan excepcional. Pues bien, resulta que los precios medios del mercado diario han marcado 26 euros por megavatio hora (Mw/h), cuando la tarifa fijada por el Gobierno equivale a 48 euros Mw/h. Las compa?¨ªas el¨¦ctricas tienen que devolver el sobreprecio percibido, seg¨²n nos explic¨® el ministro del ramo energ¨¦tico, un circunspecto y desconcertado Jos¨¦ Manuel Soria. Si el sistema lo dice y el ministro lo ratifica, Iberdrola, Endesa y Gas Natural Fenosa no tienen otra opci¨®n.

Pero una cosa es un milagro y otra muy distinta hacerse ilusiones. No habr¨¢ en el futuro precios m¨¢s bajos. La tendencia general del recibo de la luz es al alza, porque la teor¨ªa de la oferta y la demanda no se cumple en seg¨²n qu¨¦ mercados. Quien haga caso a los manuales de econom¨ªa deducir¨¢ err¨®neamente que los precios caer¨¢n en los pr¨®ximos meses, porque la demanda es d¨¦bil, llueve y sopla el viento. Pero en la pr¨¢ctica, las reglas de los manuales se curvan, aparecen nuevos conceptos que sufragar, d¨¦ficits que compensar y subidas de costes que enjugar. Es dudoso que el recibo de la luz se deje sorprender por otro milagro como el acontecido.

El ministro defini¨® su desconcierto el¨¦ctrico con una frase para la eternidad que, al mismo tiempo, nos precisa el futuro de nuestros bolsillos: ¡°Los precios no han dejado de subir, el d¨¦ficit de tarifa y los beneficios tambi¨¦n. No me parece mal, pero algo raro hay¡±. Pues s¨ª que hay algo raro, pero no debe preocuparse; en los peri¨®dicos tiene bien explicada la rareza.