Crucigramas asesinos
El Gobierno venezolano acusa a un diario de incitar a la violencia con sus pasatiempos
En apariencia, El Arag¨¹e?o es un peri¨®dico normal, con sus art¨ªculos de pol¨ªtica, sucesos, vida social... Nada hac¨ªa sospechar que el veterano diario de Maracay (Venezuela) tuviera otro prop¨®sito que el de informar a sus apacibles lectores. Hasta que la ministra de Cultura, Delcy Rodr¨ªguez, dio el mi¨¦rcoles la voz de alarma: El Arag¨¹e?o incita a la violencia contra el Gobierno de Nicol¨¢s Maduro. ?C¨®mo? Mediante mensajes cifrados en sus crucigramas. La ministra no da detalles, pero ha anunciado una investigaci¨®n.
No se trata de propaganda encubierta, ni de sofisticados juegos subliminales, innecesarios en un pa¨ªs donde el propio presidente multiplica ¡°los penes y los panes¡±. Son c¨®digos secretos para acabar con el socialismo del siglo XXI. Y no es la primera vez que un anodino crucigrama se convierte en arma de conspiraci¨®n fascista. En 2012, Neptal¨ª Segovia, crucigramista del diario ?ltimas Noticias, fue acusado de incitar al asesinato de Ad¨¢n Ch¨¢vez, actual gobernador de Barinas y hermano del fallecido Hugo Ch¨¢vez. Coladas en las filas horizontales y verticales, como quien no quiere la cosa, estaban las palabras ¡°ad¨¢n¡±, ¡°asesinen¡± y ¡°r¨¢faga¡±.
Don Neptal¨ª asegur¨®, espantado, que sus crucigramas solo ten¨ªan un sano prop¨®sito cultural y educativo. Tambi¨¦n El Arag¨¹e?o ha recordado el trabajo ¡°objetivo, honesto y veraz¡± en sus cuatro d¨¦cadas de compromiso con sus paisanos. En Venezuela, donde los diarios est¨¢n asfixiados por la persecuci¨®n judicial y las trabas para importar papel, hasta los pasatiempos son ahora sospechosos.
Las paranoias pol¨ªticas ser¨¢n pintorescas, pero muy peligrosas. El pasado enero, la fiscal¨ªa egipcia investig¨® a los creativos de un anuncio televisivo de Vodafone porque sospechaba que sus mu?ecos enviaban a los Hermanos Musulmanes instrucciones para poner bombas. La compa?¨ªa telef¨®nica explic¨® que su campa?a solo promocionaba una oferta para los clientes que reactivasen sus antiguas tarjetas SIM. Los militares egipcios empiezan persiguiendo mu?ecos y terminan condenando a muerte a personas de carne y hueso. No estar¨ªa de m¨¢s que sus hom¨®logos venezolanos se pusieran a hacer crucigramas en vez de censurarlos.
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