Famosos, contra los ¡®drones¡¯ cotilla
Las estrellas ven en los paparazis voladores a su nuevo peor enemigo Piden a los legisladores que se proh¨ªba el uso de avioncitos teledirigidos para obtener 'robados'
Las estrellas de Hollywood han elevado su lucha contra los paparazis hasta el cielo. Un grupo de famosos ha pedido a las autoridades californianas que proh¨ªban la toma de fotos desde el aire mediante el uso de drones o veh¨ªculos a¨¦reos no tripulados. Se trata de la ¨²ltima moda entre los reporteros gr¨¢ficos que, a la b¨²squeda de instant¨¢neas robadas de las celebridades y sus familias, cuelgan sus c¨¢maras en aparatos a mitad de camino entre aviones de juguetes teledirigidos y los sofisticados drones de uso militar.
Fue as¨ª como intentaron robarle una instant¨¢nea en la zona francesa de las Antibes a Paris Hilton o se colaron el pasado a?o en la boda de Tina Turner en Suiza. Ahora es la actriz Kristen Bell, conocida por su trabajo en las series Veronica Mars y House of Cards, adem¨¢s de por ponerle voz a la princesa Anna en el mega ¨¦xito animado de Frozen: El reino del hielo, quien se une a esta cruzada contra las nuevas armas del enemigo. Madre de la peque?a Lincoln, de 10 meses, la int¨¦rprete ha expresado su preocupaci¨®n asegurando que teme que los paparazis ¡°aterroricen¡± a su hija con estos nuevos m¨¦todos sobrevolando el jard¨ªn de su casa.
A la queja se han sumado otras actrices que, como Scarlett Johansson y Amy Adams o Halle Berry y Jennifer Garner con anterioridad, hacen lo posible por mantener la vida de sus hijos fuera del alcance de la prensa. Bell los denomina ¡°paedorazzi¡± (mezclando los temidos t¨¦rminos de pedofilia y papazazzi) en la campa?a que ha puesto en marcha en Internet y que bajo el nombre de NoKidsPolicy tiene como meta proteger a los menores de protagonizar estas im¨¢genes. Algunos medios de comunicaci¨®n estadounidenses se han sumado de manera voluntaria a la petici¨®n y prometen evitar la publicaci¨®n de fotos de menores sin el consentimiento de sus familiares.
Para combatir a aquellos que mantienen la determinaci¨®n de difundirlas, son numerosas las peticiones de medidas legales que limiten el acoso de los fot¨®grafos a los famosos y a sus familias y allegados. Entre ellas est¨¢ la legislaci¨®n aprobada el a?o pasado gracias a la iniciativa de Berry y de Garner, que defiende el derecho de sus hijos a crecer en el anonimato y ampl¨ªa el significado legal de lo que se considera acoso a cualquier fotograf¨ªa publicada de un menor sin consentimiento de su padre o tutor.
La medida se suma tambi¨¦n a otros frenos contra las fotos robadas como la que en California se conoce bajo el nombre de enmienda Aniston y que, a iniciativa de la actriz que la bautiza, pone freno a las persecuciones automovil¨ªsticas que la int¨¦rprete de Friends asegura sufrir cada vez que sale de casa y que dieron como resultado la muerte de la princesa Diana en 1997. Esta medida hizo posible que se impusiera a los paparazis implicados multas superiores a las que sufren los conductores ebrios. Tambi¨¦n en Haw¨¢i la llamada propuesta Steven Tyler, en alusi¨®n al l¨ªder de Aerosmith que ped¨ªa que se prohibiera sacar fotos a ¡°personas de inter¨¦s¡± en las playas p¨²blicas de la isla, fue aprobada por las autoridades del Estado.
M¨¢s all¨¢ de la campa?a de Internet de Bell, la Justicia californiana ya analiza la legalidad del uso de drones tanto en manos de paparazis como de otras instituciones y, la semana pasada, las autoridades competentes solicitaron que su uso oficial requisiera de una orden de registro por parte de las autoridades, a menos que se trate de una emergencia. En esa misma sesi¨®n, la asamblea californiana tambi¨¦n escuch¨® una propuesta para ilegalizar la presencia de reporteros gr¨¢ficos a la puerta de colegios y hospitales para evitar as¨ª que se fotograf¨ªe no solo a los famosos y a sus hijos sino ¡°a los compa?eros de clase, que no deben de ser v¨ªctimas¡± de este apetito insaciable de im¨¢genes por parte de la prensa.
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