Unos violadores a la horca, otros humillando a sus v¨ªctimas

Un vecino de su aldea entr¨® a su casa y la viol¨® enfrente de sus tres hijos en el Estado de Bengala Occidental, en India. La comunidad no permiti¨® a esta mujer y a su esposo hacer una denuncia ante la polic¨ªa, en su lugar les prometieron que el culpable ser¨ªa castigado por un tribunal popular, que son ilegales. Este tribunal lleg¨® a la conclusi¨®n que el hombre ten¨ªa que pedirle perd¨®n toc¨¢ndole los pies. La mujer se prendi¨® fuego en la madrugada, cuando nadie la ve¨ªa: no pudo con la humillaci¨®n, asegur¨® su marido a la polic¨ªa y a los medios locales. Muchas mujeres no denuncian las violaciones por miedo al estigma social y esta no es la primera vez que una mujer se suicida despu¨¦s de ser violada.

La discusi¨®n sobre las violaciones est¨¢ candente en India desde hace m¨¢s de un a?o que la violaci¨®n en grupo, y despu¨¦s muerte a causa de las heridas, de una estudiante en Nueva Delhi desat¨® una ola de protestas en todo el pa¨ªs. Esta inconformidad social desencaden¨® en la aprobaci¨®n de leyes m¨¢s fuertes en contra la violencia de g¨¦nero.

Justo bajo esa nueva ley, esta semana un tribunal en Bombay sentenci¨® a muerte a tres hombres, de entre 18 y 27 a?os, acusados de la violaci¨®n en grupo a dos mujeres. Los j¨®venes atacaron en julio y agosto pasado a sus v¨ªctimas en un molino abandonado en Bombay, la capital financiera de India. Una de ellas una operadora en un call center, la otra una fotoperiodista. Esta condena a muerte quiere evitar la reincidencia de los criminales, que no pueden reformarse, se asegur¨® en el tribunal tras el fallo. ¡°Fue violaci¨®n en las formas m¨¢s horrendas y diab¨®licas, sin mostrar ninguna piedad. Nuestra postura debe ser de cero tolerancia por las ofensas de este tipo¡±, dijo la juez Shalini Phansalkar Joshi. Este caso es muy importante porque se trata de la primera vez que se aplica la pena m¨¢xima por casos de reincidencia en violaci¨®n en India y podr¨ªa sentar precedentes.

Entre los activistas y abogados sin embargo han visto esta condena como injustificada y que fue un juicio populista con el fin de pacificar a la opini¨®n p¨²blica en momentos en que la violaci¨®n es un tema muy sensible en India.

¡°S¨®lo se deber¨ªa considerar una reincidencia y la pena m¨¢xima despu¨¦s de haber juzgado y castigado el primer delito. Se est¨¢n juzgando los dos casos juntos y eso no est¨¢ contemplado en la ley¡±, explica Yug Mohit Chaudhry, el representante legal de dos de los acusados, que prepara la apelaci¨®n del veredicto. Chaudhry es una de las caras m¨¢s visibles en India en contra de la pena de muerte. Considera que el Estado no deber¨ªa tener la capacidad de matar. ¡°Adem¨¢s los tribunales est¨¢n compuestos por seres humanos, que son falibles, que pueden cometer un error en cualquier momento y la pena de muerte es irreversible¡±, dice por tel¨¦fono desde Bombay.

Mientras tanto, los medios dan la noticia de la pen¨²ltima agresi¨®n sexual, la de una mujer violada por un miembro del ej¨¦rcito en CaChemira. Otra, la que sufri¨® una turista brit¨¢nica que salt¨® por la ventana supuestamente huyendo del encargado de su hotelen Agra, la ciudad del famoso Taj Mahal.