As¨ª hice el nuevo videoclip de Pharrell Williams

Le ha pasado a medio planeta. En el supermercado, en los probadores de una tienda, en el metro (prohibido bajar a las v¨ªas) y tambi¨¦n en el partido de f¨²tbol. Escuchar Happy e imaginarse dentro de un videoclip (ahora le compro una violeta a la estanquera, ahora me marco un moonwalk en el paso de cebra atestado, ahora trisco cual cabrita montesa por los pasillos del instituto), con el consiguiente riesgo de accidente (lamentablemente, esto no es ficci¨®n).

En ese universo ha tenido que vivir un realizador espa?ol. Luis Cerver¨® se ha encargado de imaginar (y dirigir) las im¨¢genes de Marilyn Monroe, el nuevo hit de Pharrell Williams, el artista del momento, el Curtis Mayfield de la radiof¨®rmula de 2014. Amante tanto de la explosi¨®n colorista, como del ritmo del rocanrol y el soul o de las im¨¢genes impactantes de las vanguardias, el realizador valenciano ha tramado una minipel¨ªcula ambiciosa en varios actos que funciona, tambi¨¦n, como ensayo sobre algunas tipolog¨ªas de roles femeninos literarios que r¨ªase usted de Jane Austen. Tambi¨¦n act¨²a como cuento de hadas subido de tono (y de pantone).

Aqu¨ª no las hay, m¨¢scaras, pero s¨ª pies algodonados en el salpicadero, coreograf¨ªas omn¨ªvoras, gui?os a Shakespeare, tiro con arco y el ya ic¨®nico sombrero de Pharrell mutando de color cual camale¨®n seg¨²n el escenario. Cerver¨®, uno de los realizadores espa?oles con m¨¢s proyecci¨®n mundial, que tanto trabaja para bandas del underground barcelon¨¦s como para ¨¦xitos de ventas a nivel planetario, explica a ICON cinco claves de su ¨²ltimo trabajo.

1. Evitar a Michael Jackson y a Marilyn Monroe.

¡°Solo hubo dos peticiones de las que tuvieramos que huir. No quer¨ªan ninguna referencia expl¨ªcita a Marilyn Monroe, porque la canci¨®n no va de eso. Y no quer¨ªan nada que permitiera la comparaci¨®n de Pharrell con Michael Jackson, porque est¨¢ un poco harto y porque le admira mucho, no se siente c¨®modo en esa comparaci¨®n. Lo ¨²nico que me pidieron que cambiase de mi primer gui¨®n fue el principio, en el cual Pharrell ve¨ªa a la chica de sus sue?os en una pantalla de autocine, como algo inalcanzable, y la chica con la que iba al autocine sal¨ªa cabreada al ver la reacci¨®n de Pharrell ante la chica de la pantalla, y eso les remit¨ªa demasiado al comienzo de Thriller, en el cual Jackson va a ver una peli con su novia y ella se va del cine. Est¨¢ muy bien que se cargaran ese arranque porque lo que hay ahora es mucho m¨¢s sencillo, directo y gr¨¢fico.

En cuanto a m¨ª, s¨ª, claro, generacionalmente fui uno de esos ni?os que alucin¨® con Thriller. Pero lo viv¨ª de una manera natural, como cualquier ni?o, que no es consciente que no se hab¨ªa hecho nada igual con anterioridad. A m¨ª Thriller me dio a la vez miedo y ganas de bailar. No pens¨¦ para nada en aquel entonces que yo quisiera hacer videoclips. Pensaba poco en la edad adulta cuando era un ni?o yo, estaba demasiado ocupado pas¨¢ndomelo teta¡±.

2. Trabajar para el ¡®underground¡¯ vs. el Top 1.

¡°Intento afrontar todos mis trabajos con el mismo entusiasmo. Aunque ser¨ªa mentir que dijese que todos los grupos con los que he trabajado me generan el mismo nivel de entusiasmo. Por otra parte, creo que lo que define mi trabajo, e incluso mi falta de un estilo concreto, es mi respeto por el m¨²sico, mi sensaci¨®n de responsabilidad por tener que generar una imagen que refleje su sonido, y una conciencia incluso algo excesiva de que lo que estoy haciendo tiene que servir para vender discos (si es que todav¨ªa queda alguien en el planeta que los compre). Tengo una mentalidad muy de chalado de que lo que hago definir¨¢ al m¨²sico y al single, y en ese sentido me pongo en disfraces muy diferentes seg¨²n para qu¨¦ m¨²sico est¨¦ trabajando. Eso creo que es m¨¢s relevante que trabajar dentro o fuera del pa¨ªs. Y las diferencias m¨¢s rese?ables entre trabajar aqu¨ª para peque?os grupos y fuera para grandes estrellas ser¨ªan la diferencia abismal de presupuesto y la falta de comunicaci¨®n directa con el autor, al que ¨Cen el caso internacional, claro¨C s¨®lo accedes una vez est¨¢s rodando con ¨¦l. Pero como ves son diferencias que poco tienen que ver con lo creativo, es algo m¨¢s en las din¨¢micas, as¨ª que en lo general el curro es el mismo¡±.

3. Inspiraciones y gui?os.

?¡°La idea que present¨¦ era muy sencilla, entre otras cosas porque tampoco me dieron mucho tiempo para presentarla. Pharrell busca a su mujer ideal, pero es una abstracci¨®n, no existe. As¨ª que, partiendo de la realidad, tiene que entrar en mundos cada vez m¨¢s abstractos para llegar a ella. Esa l¨ªnea narrativa tan sencilla ser¨ªa tratada como un musical de Gene Kelly, en los cuales la c¨¢mara siempre le segu¨ªa mientras ¨¦l atravesaba escenarios (aqu¨ª la referencia fue el Gotta Dance de Cantando bajo la lluvia). Y en esos musicales las bailarinas estar¨ªan siempre divididas en tres grupos: las Marilyn Monroes (la mujer sexual, explosiva, carnal), las Cleopatras (la mujer autoritaria, poderosa, altiva) y las Joan of Arcs (la mujer independiente, intelectual, asexuada). Esto se ver¨ªa tanto en diferencias de estilismo como del propio baile de cada grupo. Y la manera de empezar en la realidad y viajar hacia la abstracci¨®n era realizando un viaje a la inversa por el cine musical cl¨¢sico.

Y aqu¨ª es donde entran los referentes. Cuando yo recib¨ª la canci¨®n, que era la del disco, hab¨ªa cuatro estrbillos, as¨ª que hab¨ªa cuatro escenas en el gui¨®n, y empezaba con el estilo documental y muy de montaje de Bob Fosse en All That Jazz (con esa habitaci¨®n industrial de ensayo del n¨²mero Take Off With Us, luego pasaba por los musicales pop europeos de William Klein y Ken Russell (aqu¨ª las referencias eran The Boy Friend de Russell y Mr. Freedom de Klein, luego por el resurgir musical de Blake Edwards y Robert Wise (el n¨²mero musical final del video es muy similar al final de Star! de Robert Wise, muy en particular a la escenograf¨ªa de su n¨²mero Saga of Jenny con Julie Andrews) y finalmente quer¨ªa acabar en un escenario muy amplio y vac¨ªo como el de las escaleras rosas donde Gene Kelly ve a Cyd Charisse con ese vestido de seda de 15 metros en Cantando bajo la lluvia, de Stanley Donen.

La idea era acabar con una est¨¦tica muy sencilla, pict¨®rica y simb¨®lica como las de Cedric Gibbons en los 40 y 50. Pero se decidi¨® hacer un radio edit, sacar un estribillo, y entonces pas¨¦ la referencia m¨¢s 50s a la escena del sue?o que abre el video, y que es una mezcla de Brigadoon, otra peli de Donen y Kelly, y los elementos escenogr¨¢ficos cl¨¢sicos del Midsummer Night Dream de Shakespeare.

Vamos, como ves un buen revuelto de referencias y gui?os a varias pelis de distintas ¨¦pocas. Luego tuve cuatro d¨ªas para preproducir el video y la cosa se fue simplificando, pero algo de todo eso queda¡±.

4. Pharrell, un tipo majo.

¡°Pharrell es un amor. Y no lo dir¨ªa si no fuera cierto. Es simp¨¢tico, entregado y muy directo. Cuando me lo presentaron me mir¨® a los ojos y me dijo 'Te pido por favor que no te cortes, que me digas sin ning¨²n miedo lo que te gusta y lo que no te gusta y lo que quieras cambiar de todo lo que yo haga. Por favor, que no te d¨¦ ning¨²n miedo decirme cualquier cosa que tengas en la cabeza. Yo me pongo en tus manos'. Yo tampoco he trabajado con tantos artistas mainstream de ese nivel, pero por lo visto es cero habitual esa cercan¨ªa y esa horizontalidad en la relaci¨®n.

Con Pharrell fue todo muy f¨¢cil, estuvo abierto a todo, puso muy pocos problemas y todo el mundo en el set le adoraba, empezando, por supuesto, por todas las bailarinas, con las que estaba de risas constantemente entre toma y toma. A nivel humano, fue un rodaje sorprendentemente f¨¢cil y fluido. En cuanto al estilismo, yo s¨®lo opin¨¦ de paletas de color para que estuviera en armon¨ªa con el resto de personajes y fondos. Pero aunque estuve presente en la elecci¨®n de cada prenda, Pharrell lo tiene clar¨ªsimo y fue ¨¦l quien decidi¨® qu¨¦ se pondr¨ªa en cada escena, lo cual me parece de lo m¨¢s normal, sensato y pr¨¢ctico¡±.